Capítulo 48.

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«4 meses de embarazo»

Segunda Ecografia

Pasan los días y el día de la segunda ecografía para ver a los bebés finalmente llegó.

Todos esperaban nerviosos y felices, porque finalmente sabrían el sexo de los mellizos.

Kara estaba muy emocionada, ansiosa y sobre todo feliz, se moría por volver a verlos. Era inexplicable, pero era un momento muy especial para ellas.

Lena también estaba ansiosa mientras esperaba en esa camilla al médico.

...

Aquí estaban las dos esperando al médico con una sonrisa en sus rostros.

Kara observó a su futura esposa con cariño, le sonrió y luego besó su frente con ternura.

"¿Estás nerviosa, mi amor?", preguntó mientras se miraban a los ojos.

Como la primera vez que vinieron.

"Sí, mucho, pero más ansiosa, ¿y tú cariño?", sonrío dulcemente.

"Emocionada, ya quiero verlos, de nuevo", dijo emocionada.

"Yo también... Quiero saber si está bien", sonrió tontamente mientras imaginaba a sus pequeños pronto en sus brazos.

"Aunque creo que se verán muy pequeños todavía, ¿verdad?", preguntó tiernamente.

"Pequeños, pero hermosos... Tal vez los veamos parecerse a ti", se rió.

La rubia también se rió.

"Mi amor, seguro que se parecerán a ti", se acercó y se besaron de nuevo. Un beso muy dulce y suave.

De repente, la puerta del consultorio se escuchó abrir. Fue el médico qué entró con una sonrisa.

"Buenos días, perdón por el retraso"

"No te preocupes Doc, pero no negamos que estábamos nerviosas mientras lo esperábamos", sonrió la rubia.

"Me imagino... Qué bueno verlas de nuevo señoritas"

"Digo lo mismo, Doc", respondió amablemente a Lean ahora.

"Bueno, ¿están listas?", preguntó.

Kara miró a la pelinegra y las dos asintieron.

El médico explicó algunas cosas más y luego colocó un gel en el vientre de Lena, qué se estremeció por el hormigueo y lo frío que estaba.

Kara tomó la mano de su amada con fuerza mientras sonreía, esto le dio confianza y amor a la pelinegra.

Colocó el traductor en la pantalla del ultrasonido. El médico hizo su trabajo.

"¿Qué ve doctor... ¿Cómo están?", Kara preguntó.

"Aquí están, ¿lo ves, ahora?", preguntó el hombre con una sonrisa mientras la imagen de los pequeños aparecían en la pantalla.

Eran tan pequeños pero más grandes que la primera vez que los vieron.

Kara sonrió al no poder, estaba muy emocionada, pero tranquila mientras mira a los pequeños en la pantalla.

"Es muy hermoso... Aamor"

“¿Son míos? míos, suyos, nuestros”, pensó rápidamente Kara.

"¿Cómo están, están sanos?", preguntó ahora la pelinegra mientras salían sus lágrimas de felicidad.

↬ 𝐄𝐋𝐋𝐀 𝐄𝐒 𝐓𝐔 𝐇𝐈𝐉𝐀 ↫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora