Just another Boy

Toma todo lo que deseas

Un hombre caminaba por el pasillo de un hospital, abrió la puerta de un consultorio y se encontró con un doctor anciano. Este le vio con el ceño fruncido y el hombre se sentó mostrando una sonrisa cínica . - El jefe quiere saber si tienes su pedido.

- El jefe eres tú...¿Crees que no lo sé?

El hombre se acercó y lo agarró del cuello, odiaba que alguien le viera de esa forma, odiaba que no hicieran lo que quería. - Si sabes quien manda porque no simplemente me das lo que necesito.

- Está bien...Son las últimas drogas, no serán distribuidas a los hospitales...Hwang ya no puedo dártelas.

- No te preocupes lo solucionaré. - Salió del hospital y observó hacia la cafetería del frente, lo vio se notaba igual que hace tiempo, cuando acabó con su carrera en el ejército. - Kim Taehyung, debería haberte asesinado maldito marica.

Hwang Hyun Jin era un ex militar, había escapado de una masacre y ahora tenía a cargo un grupo criminal que secuestraba a celebridades y luego pedía buenas sumas de dinero. Hwang era un hombre violento y odiaba a donceles y hombres que se enamoraban de ellos, por eso el grupo del sub oficial Kim Taehyung era lo más aberrante. Mientras observaba a Taehyung sentado en aquella cafetería con otro chico, empezó a recordar aquellos tiempos en el ejército.

Odiaba como los tres chicos cuidaban del doncel, este había solicitado un permiso especial para entrar al ejército pese a su condición. Recordó como Hyung Sik era cuidado por Kim Taehyung, le ayudaba en algunos deberes y sobre todo le ayudaba a entrenar. Al ser de mayor rango, junto con su capitán empezó a acosar al grupo, primero fueron por Do Ji Han, era el que más cercano era a Park, lo golpearon e hicieron que uno de los soldados lo violara.

Nadie se enteraba que el homofóbico capitán violaba a los jóvenes que según él eran maricas, una completa hipocresía, Hyun Jin le seguía y le ayudaba a realizar sus crímenes alejando a cada chico que mostrara interés en los hombres. Hasta que un día encerraron a los cuatro chicos, pero Ken que era más grande logró soltarse mientras lo retenían a él y a Taehyung, se defendieron y vieron cómo asesinaban a sus amigos con mucha violencia.

Fue Taehyung quien, siendo el más habilidoso en las artes marciales luchó contra el capitán y lo asesinó con sus propias manos, Hyun Jin escapó y cuando los oficiales llegaron Taehyung y un Ken agonizante revelaron los abusos del capitán. - Sonríe Kim, ahora que sé donde estás haré de tu vida un infierno.

Subió a su auto pensando en cómo destruir a Kim, iba tan concentrado en Taehyung que no se percató del semáforo y golpeó el volante cuando colisionó contra otro auto, maldijo pues había estado distraído. De pronto su puerta fue golpeada y cuando abrió las manos de un joven lo agarraron de la solapa del abrigo. - ¡Mira maldito hijo de puta como le dejaste el auto! ¡¿Acaso tienes los ojos en el culo?!

Hyun Jin se perdió en aquellos ojos, esta vez no estaban llorando. Al parecer el chico no lo había reconocido pues lo trataba con brusquedad, era totalmente diferente su mirada no era la de un cachorro y su aura despedía un aire de seguridad que jamás vio en alguien. Hyun Jin se preguntó ¿Qué tan buena es mi suerte que encuentro a dos personajes que odio de mi pasado? Sonrió al verlo mostrando demasiada piel. - Hobi vete a la editorial, yo lo arreglo.

- ¡Primero le partiré la cara a este imbécil cara de mierda!- Hoseok lo vio a los ojos y reconoció al hombre, pero no le importó y lo empujó contra el auto. No tenía tiempo para recuerdos inútiles y más cuando deseabas asesinar al hombre que causó esos recuerdos. - Sabes qué tengo algo importante hoy sino estarías lamiendo el asfalto.

- ¿No me recuerdas? ¡Ya no eres un completo marica, Jung!

- ¿Perdón? ¡Ah! lo siento no hablo el lenguaje de las escoria y la mierda, o sea tú. Yoongi, date prisa.