Quien diría que con tan solo una pregunta todo se iría por la borda.
Kairi y Rindo eran pareja hasta que un día Rin se entera que Kairi está esperando un bebé, asustado por las responsabilidades Rin termina con ella dejándola a su suerte.
Kairi dec...
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⚠️ Advertencia ⚠️
Este capítulo puede tener emociones fuertes, cabe aclarar que esto es ficción.
El capítulo contiene violencia y persecuciones. ➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖
Tres semanas había pasado desde que conocí a mi hijo. En mi mente sigue presente la cara de felicidad de Ran al contarle sobre mi visita a Kairi, los reproches de Maggie al no contestar sus llamadas hacían amargos mis recuerdos. Pero hay un recuerdo que purifica aquellos malos pensamientos, el beso que le arrebate a Kairi descaradamente mientras dormía, le trae paz a mi alma. Llevaba años que no probaba un beso tan lleno de amor y cariño.
Parte de mi empezaba a reconsiderar lo que estaba haciendo con mi vida, varias preguntas abordaban mi cabeza desde ese día.
¿Por qué te vas a casar con Maggie si no la amas? ¿Por qué no detuve a Kairi? ¿Por qué abandone a mi hijo? ¿Por qué no busque a la mujer que amo? ¿Me quiero casar con Maggie? ¿Quiero vivir al lado de una mujer que no amo? ¿Qué es lo que he estado haciendo con mi vida? ¿Cuáles son mis sentimientos hacia Kairi? ¿Debería pedirle que me dé una oportunidad? ¿Me seguirá amando? Muchas preguntas pocas respuestas, estaba aturdido, por fin había llegado al punto del interrogatorio, con pesadez me levanté del sofá y me dirigí al ventanal, la ciudad se veía hermosa desde la altura, mi mirar se centro en una joven madre con su hijo al parecer estaban esperando el autobús. Más preguntas se formaron en mi cabeza al ver a la mujer y al pequeño.
¿Estará bien formar parte de la vida de Ichigo y Kairi? ¿Podré ser parte de su núcleo familiar?. Lastimosamente esas preguntas si tenían respuesta. No podía ser tan descarado como para quitarles la paz a las dos personas que me están haciendo reconsiderar mis acciones, no sería justo para Kairi aguantar un mundo lleno de inseguridades, tampoco me gustaría que mi hijo viviera rodeado de armas y violencia. Tristemente yo no podría ser parte de su vida ya que los pondría en peligro y no sería justo.
Rindo: ¡Ay! Kairi ¿Que estoy haciendo con mi vida? ¿Por qué no puedo decirte que aún te anelo que necesito de tu cariño? Que quiero criar a nuestro hijo juntos, que sería capaz de dejar mi puesto con tal de tenerlos a los dos conmigo.
¿Cómo les hago entender que son mis tesoros? ¿Que extrañamente se volvieron mi talón de Aquiles?
Un escalofrío recorrió mi piel al pronunciar esa pregunta, repentinamente un ave se estrelló con el vidrio del ventanal. Un mal presentimiento me abordo. Rápidamente me cambié y salí a la cochera en busca de mi auto una vez localizado me subí. Arranque en dirección a la boutique donde trabajaba Kairi, quería asegurarme que estuviera bien. No soy de malos alburios pero por si las dudas iría a asegurarme que todo estuviera en orden.
