Audrey Jensen a sus once años descubre un mundo nuevo y sorprendente donde conoce a un grupo de amigos, pero también, el sufrimiento. Un desafortunado suceso cambia todo. Convirtiendo a Hermione en una peligrosa criatura durante la luna llena.
Prime...
Ron estaba tan emocionado que apenas estaba comiendo.
-¿No están emocionados?
-Bueno, lo estaría más si Harry pudiera ir.
Audrey le regaló una falsa sonrisa a Ron haciendo que él pusiera los ojos en blanco.
-Oye, ¿quieres que me quede aquí contigo?-preguntó mirando a Harry. Aunque antes de que él pudiera responder, un golpe sobre el plato en frente de Audrey lo interrumpió.
-¿Cómo dices? No vas a desaprovechar la oportunidad de ir. Eso es lo que deberías hacer por Harry. No quedarte aquí.
-Pero-
-Tiene razón.
Harry interrumpió la súplica de Audrey con una sonrisa.
-Hermione tiene razón. Deberías ir y disfrutar, no te preocupes por mí. Ya me las apañaré yo solo.-terminó con la misma sonrisa.
-Bueno, iré pero la pregunta iba para Harry no para ti.
Audrey miró a Hermione con los brazos y los ojos entre abiertos.
-Oh, no. No vamos a discutir a media mañana. Voy a pasar todo el resto del día contigo. No lo vamos a convertir en un infierno.
Hermione miró a Audrey levantando la ceja mientras se apoyaba con los dos brazos sobre la mesa.
-No me mandas.
Audrey mantuvo su mirada firme en Hermione a la vez que ella también lo hacía.
-Harry.-susurró Ron-¿Crees que deberíamos intervenir?
-Déjalas, lo mejor es que solo mires y calles.-respondió Harry susurrando y sin apartar la mirada de las dos chicas.
-Solo te digo lo que es mejor para ti.
Hermione seguía sin hacer un mínimo movimiento en el resto de su cuerpo para apartar la mirada.
-¿Lo mejor para mí o lo mejor para ti?-preguntó Audrey de la misma forma.
-¿Qué quieres decir?-preguntó Hermione sorprendida pero sin que su tono de voz abandonara la serenidad.
-No tienes ni idea de lo que es mejor para mí.-agregó Audrey.
-Yo creo que sí la tengo.
-Chicas.
Ron con valor las interrumpió, ganándose un pequeño golpe en el pie ocasionado por el de Harry.
-Por favor, pasemos el día en paz.
Las dos chicas suspiraron y asintieron rompiendo el contacto visual pero regalándose algunas miradas durante el resto del desayuno.
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