Corazones comprometidos AtsuAku M-preg

9. Secuelas

Este capitulo tiene contenido sexual, para los que prefieran saltarse estas partes, aviso que pondré este símbolo (🚫) al inicio y lo pondré de nuevo donde termine :)

🚫

El azabache se había aferrado a las sábanas, intentando regular su respiración, ambos habían comenzado a soltar feromonas, mientras el albino besaba cada parte de la piel contraria, ya desnuda.

¿Qué les puedo decir? son jóvenes, fueron separados, y habían encontrando que el problema al dolor permaneciente en sus pechos se encontraba en los besos que se daban, con sus feromonas severamente afectadas, un bebé que afectaba mucho sus sentimientos y un cumulo de emociones sin expresar, vaya que esa combinación, sin duda lo llevo a su situación actual.

El albino estaba acostado sobre el azabache besándolo, ya solo tenían la ropa interior, mientras iba repartiendo besos por el cuerpo cada vez más sudado del otro, al mismo tiempo le dejaba mordidas para que lograra restablecerse, se detuvo un momento mordiendo suavemente la manzana de adán del contrario haciendo que el azabache soltara un gemido.

Atsushi sonrió al escuchar esto, mordió las muñecas del azabache, relajándolo pese al dolor que sintió, al tiempo que percibía como su malestar disminuía al ser marcado por su alfa, este fue bajando dejando besos por el cuerpo del contrario, deteniéndose un momento a besar y mordisquear los pezones contrarios haciendo a Akutagawa estremecer, ya comenzaba a ser una zona sensible.

-A-Atsu Mmmhh... no... no voy a aguantar... ¡Mgnh! .... mucho... -logro decir el azabache viéndolo suplicante.

El albino continuo pellizcando, mordiendo y lamiendo los pezones ajenos, aunque una mano ya había bajado el bóxer contrario, y quitándose los suyos, se detuvo un breve instante para ponerse una protección, puesto que tenía miedo de lastimar al bebe si terminaba dentro del azabache.

Fue bajando sus besos hasta el bajo vientre del omega causando que este comenzara a gemir de nuevo, al mismo tiempo que metió un dedo que causo que Akutagawa arqueara la espalda mientras se sujetaba de las cobijas.

Movía el dedo, viendo hipnotizado las expresiones de placer del otro, así metió el segundo simulando el movimiento de una tijera, el azabache abrió aun más las piernas cegado por el placer que tenía en ese momento.

La zona ya estaba completamente mojada, aunque se permitió meter un tercer dedo simulando embestidas, encontrando "ese" punto, que causo que el azabache literalmente gritara debido al placer.

Saco sus dedos a lo que el azabache se quejo un momento el albino lo veía con dulzura y cariño, acomodo el cabello del otro.

- ¿Quieres de verdad que lo haga? -pregunto, no quería lastimarlos, pese a todo el azabache asintió.

-S-siento que lo necesito... no sabes cuanto te deseaba -susurro mientras el albino al escuchar las palabras se inclino besando el cuello del omega, mientras metía su miembro lentamente.

Atsushi soltó un gemido suave al sentir lo apretado y húmedo de la zona, intentando no recargarse en el otro, respiraba muy agitadamente.

- ¡Hmgh! Atsu... muévete -pidió el azabache, soltando más feromonas, el olor tan dulce y adictivo volvía loco al albino, entrelazo suavemente los dedos con el azabache que acepto el gesto y comenzó a moverse.

El omega arqueaba la espalda, mientras apretaba el agarre, sentía como sus paredes se contraían haciéndolo aun más placentero para ambos, el albino solo podía gruñir ante la sensación, entraba profundo, la saliva escurría de la boca del azabache al igual que las lagrimas provocadas por el dolor y por el placer, sus piernas temblaban hasta que con una estocada tocando ese punto gimió dulcemente corriéndose.