¿Porque Pareces Que Sabes Quien Soy?-*-Makio X LectorA

Trabajos de la Señorita Novata

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-No creo que sepas mucho de ella, pero me refiero a la oiran de la casa Kyogoku, la oiran Warabihime-

-/La casa de Hinatsuru../-Pensó al oir eso, no estaba segura del porqué, pero sentía que debía averiguar más de esto.

- ¿Puedo saber qué pasa con ella? - Se atrevió a preguntar, la cara de Tansaki no cambió mucho, pero volvió a ver a todos lados. Parecía desear no ser escuchada.

-No es de buena educación hablar de esto, pero para ponerlo corto, ella es un demonio- Dijo directamente, ¿realmente esta es la que se supone es la más madura de todas? No, no era tiempo de cuestionarse eso, ser llamado un demonio es algo exagerado, más si eres una oiran que se supone son ángeles.

-Raramente, Saki-sensei tiene razón, Warabihime-sama es mala, muy muy mala- Ahí exclamó, cada una parecía llamar diferente a Tansaki. Pero dejando eso aparte, ver a la seria y leal Ai decir eso sobre una superior era algo sorprendente.

-¡Ai! Como que raramente, no hay que ser inteligentes para saber lo loca que está esa muj– -Unas fuertes pisadas interrumpieron la conversación, tanto como Tansaki como las gemelas se tensaron.

Las tres estaban asustadas, o si lo tuviera que explicar parecían un cachorro cuyo amo lo encontró rompiendo los sillones de la casa. Las pisadas pararon en seco justo detrás de Makio, a pesar de esta no saber quién era, entendía perfectamente que por nada en el mundo debería voltearse.

-Hablen, quiero ver como siguen su conversación- Los nervios llegaron directamente a Makio, ya entendía el porqué de las caras de las otras. Se escuchó a Tansaki tragar saliva rápidamente, mientras lentamente y algo robótico empezó a darse la vuelta, estaba tiesa.

-H-Harunobu-sama- Efectivamente la superior en persona estaba ahí, con su usual maquillaje y arreglos, solo que esta vez con un kimono menos extravagante. -¿N-no debería estar durmiendo?, aún es muy temprano y fue una larga noche.-

En respuesta sólo hubo un largo y molesto suspiro, sus ojos dirigieron su atención a las gemelas y posteriormente a la rubia. Volviendo a cerrar los ojos levantó su mano y dio 4 suaves golpes en la cabeza a las presentes.

-Recuerdo haberles recordado múltiples veces no hablar mal de Warabihime-sama, o hablar de ella en general- Inmediatamente tanto las niñas como las dos adultas agacharon sus cabezas en señal de perdón. Makio realmente no entendía porque pedía perdón, pero definitivamente sentía que debía hacerlo.

-Okey ya levántense, dejando eso aparte cuéntenme sus tareas de hoy- Su sonrisa volvió a salir, realmente era una oiran amable. Makio no podía evitar pensar en eso, realmente en tan solo un día y ya casi dos, esa persona había roto cinco estereotipos que tenía.-Vere si puedo ayudar en algo tal vez-

La sorpresa se mostró inmediatamente en la cara de Makio, una oiran ayudando al personal. Eso ya no era ser amable, algo definitivamente estaba mal con ella. Volteo su mirada hacia las otras tres presentes, las cuales al contrario suyo no mostraba rastro de asombro.

-Harunobu-sama, les hemos dicho que deje eso, usted nada más continúe sus trabajos de oiran, solo esos trabajos. -Tansaki soltó en un tono burlón, Makio llegó a preguntarse el nivel de confianza necesario para eso.

-Es como dijo Tanka-sensei, no te preocupes en nuestros deberes- Mei expresó con una linda sonrisa, esas pequeñas realmente querían a su oiran.

-Ya entendí ya entendí, al menos respóndanme que tienen que hacer hoy- Estaba haciendo un puchero, algo adorable siendo sinceros.

-Mei y yo nos debemos encargar de la limpieza del piso de abajo, algunos clientes ayer hicieron mucho desorden- Señaló Ai, ciertamente abajo estaba el piso donde la mayoría de los clientes pasaron su noche. Recordaba vagamente oír gritos la anterior noche provenientes de ahí.

-Y yo me debo encargar de la administración del lugar, la señora está teniendo algunas dificultades así que me dedicaré a ayudarle- La señora había explicado ayer cuando había hablado con la rubia que estos días se dedicaría a incluir a las novatas a la casa. Claro en el caso de Makio, le dijo que ella misma se encargará de incorporarse al lugar, realmente tenía expectativas en ella.

-Mh, no parece nada en lo que pueda ayudar realmente, que pena... ¿Y tú Makio-san? - Dejó la pregunta en el aire, Makio se paró a pensarlo un poco. La respuesta era desgraciadamente algo clara, estudiar, básicamente tenía que estudiar.

-Mañana la señora pondrá a prueba mis habilidades actuales, pero me dejó en claro que debía perfeccionar mínimo dos cosas necesarias para ser una buena empleada. - Mirando al techo explicó la rubia, no iba a decir más hasta que oyó un par de risas a su alrededor. -¡Oigan!-

-Perdón Makio-san, es solo que...La señora no suele ser así, estas jodida- Expresó la oiran, quien intentaba esconder sus risas, fallando en el intento.

-Gracias por el consuelo- El sarcasmo fue notado a mil kilómetros, pero solo causó que Ai y Mei quienes estaban aguantando sus risas explotaran riendo a todo pulmón. -¡¡Oh vamos, paren ya mocosas!!-

Rayos, había perdido su ̈personaje ̈, se dio cuenta al instante. Dirigió una mirada rápida a las demás, para su suerte nadie parecía diferente. Ai y Mei seguían riendo mientras que Tansaki había muerto directamente de la risa. La oiran mostraba una sonrisa agradecida, suave ¿agradecida?, volvió a dirigir su mirada a esta y efectivamente tenía esa cara.

Antes de poder siquiera pensarlo, la cara cambio. Siempre le pasaba eso con ella, no podía ni dejarla pensar antes de que quitará la razón.

-Bueno Makio-san, puedes aprender maquillaje y modales, son los más rápidos de aprender en tan poco tiempo. - Propuso la albina, las otras tres habían parado de reír finalmente poniendo atención a la conversación nuevamente.

-Si Si Harunobu-sama tiene razón, Ai es buenísima enseñando modales, ella puede explicarte- Makio dirigió su mirada a Ai, la cual mostraba un montón de confusión.

-Suave Suave, cuando acepte yo a eso-

- ¡Y Harunobu-sama podría ayudarte con el maquillaje, aprenderás de la mejor! - propuso nuevamente la gemela, realmente le gustaba tirarle trabajo a todo el mundo.

-Eh, está bien ayudarte, y estoy segura de que Ai también- Demostró la albina, Ai no tuvo más remedio que aceptar estas condiciones.

-Siendo eso así, espero verla en la habitación 4b dentro de 2 horas señorita novata, adiós~~ -Dijo y se retiró junto con las otras tres mujeres, dejando a Makio sola en el comedor, dejando a una Makio sola MUY confundida en el comedor.

-Bueno supongo que ellas decidieron por mí. -

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