Cap. 20 Vamos a Intentarlo

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Valentina

Se siente tan bien dormir con Juls, abrazadas, su piel, sus brazos, es tan delicada, tan hermosa, huele bien, no quiero que amanezca, no quiero que acabe está noche, me provoca besarla, pero estoy luchando con mi Valentina interna, pero ya probé sus labios, ya probé sus besos, ya me volví adicta a ella, y que diablos ella es hermosa, hasta dormida, ya está a punto de amanecer, paso mi mano por su cintura, mi hermanita, también está abrazada a ella, y yo tengo mi cara pegada a su cuello, ella está dormida aún, le daré un besito, últimamente, no puedo dejar de besar sus labios, que cuello tan lindo, roce mis labios por su cuello, ella se movió, pase mi nariz por su cuello, la quería besar, quería que me abrace. Ella despertó, no quería que se despertará, quería tenerla así, estoy en una burbuja, la abrace más fuerte. Ella giro un poco su cabeza, seguro durmió mal, Mariana y yo encima de ella, Santi por un pie, aunque él tiene un mal dormir y de seguro está en el piso. Deje un beso en su mejilla y luego me arriesgue, bese sus labios, un pequeño beso, pero ya no me aguantaba a tenerla tan cerca de mí. Sentimos que Santi se estaba despertando porque algo se estaba moviendo por mis piernas. De ese movimiento evito que fuéramos encontradas por mis padres, entraron a la habitación, en ese preciso momento.

Lucia: Que hermosos, pero necesitamos que se levanten.

Valentina: No quiero, abrace a Juliana

Mariana: Mami, es domingo

León: Y queremos salir con ustedes

Mariana: No quiero ir.

Valentina: Yo tampoco

Santiago: Yo sigo dormido

Valentina: ¿A dónde iremos?

Juliana: Buenos días, cuando me logren soltar, me iré a donde deseen

Lucia: Vamos a desayunar en nuestro lugar favorito, luego al parque, almorzamos en un delicioso restaurant e iremos al zoológico.

¿Es neta, El zoológico? Mire a Juliana, yo no quería soltarla, quería estar pegada a ella. Pero salir de la casa puede ser una ventaja, mis padres están al pendiente de los morochos y nosotras dos podamos perdernos para hablar. Me levante de rapidez, quitando las cobijas, sin decir mucho.

Valentina: Ya me voy a duchar

Mariana: ¿A esta que le pico? Nunca le ha gustado el zoológico

Eva: Creo que le paso Juliana.

Trague grueso no entendí lo que mi tía quiso decir, pero no me iba a poner en evidencia y Sali de la habitación, corrí a ducharme, creo que hoy tendría que buscar el momento perfecto en el zoológico con Juliana. Me duché, mientras el agua corría por mi cuerpo, pensaba en que fue lindo amanecer con Juliana, ella es tan linda. ¿Valentina no sé a dónde va a llegar todo esto?, pero quiero que pase algo, entre ella y yo hay una inevitable atracción, por ella siento más que un deseo, es algo que está dentro de mi corazón.

Bajamos todos, me dio la impresión que mi tía estaba viéndome la cara, como cuando trata de descifrar algo, ella siempre descubre mis sentimientos. Me Debo cuidar de mi tía. Ella siempre sabe cuándo ando en alguna travesura.

Nos subimos al coche, mi papá lleva su camioneta ya que somos muchos, desayunamos, fuimos al parque, a caminar, pero es un lugar muy abierto, solo podía decirle a Juliana los planes que tenía.

Estábamos sentados en la grama, cuando salimos con mis padres están prohibido los teléfonos, o cualquier aparato electrónico. Eso lo incluía a ellos también, mientras los morochos jugaban, y mis padres sentados viéndolos entretenidos, le susurre a Juls.

Jamás Pensé Amar AsíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora