Yangyang book

flight to China

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Sorprendentemente, tus abuelos accedieron. Tu abuelo, como muchos adultos de su edad, en un principio negó, diciendo que extrañaría su casa y sus cosas, que no conocía el país y no tenía ganas.

Pero al verte triste por la respuesta, cambió de decisión y ayudó con las valijas.

No te importaba cuánto saldría el viaje para ellos dos, pero irían juntos. Yangyang se encargó de encontrar los boletos más accesibles para la misma fecha y los compraron.

Sería un día de viaje, pero podrían soportarlo y conocer brevemente algunas ciudades.

Tu abuela dejó a tu primo a cargo de ella casa y las mascotas. Fue él quien los llevó al aeropuerto, despidiéndose de Yangyang y deseándoles un buen viaje.

Estabas emocionada, no lo ibas a negar. Te encantaba la idea de presentarles un nuevo país, nuevas comidas, el departamento y pasar unas lindas vacaciones en China.

Porque entendías que ellos no se sintieran cómodos como para quedarse el resto de sus vidas. Así que arreglaron que se quedarían un mes, pero eso podía cambiar.

Tu abuela a veces extrañaba la casa cuando viajaban dentro de Argentina, por lo que sabías que no sería fácil para ninguno y tampoco los obligarías.

Yangyang ayudó a los adultos, con los bolsos y valijas, tu llevabas otros y los boletos los tenía tu abuela. El mayor de los hombres, miraba su reloj cada cierto tiempo, esperando despegar.

Tú tenías el asiento al lado de él, así que hablaron un rato y le enseñaste a poner una película. La azafatas les dieron snacks para pasar parte de la tarde y mirar algo por la pantalla.

Yangyang tocó tu cabeza desde el asiento de atrás y sonrió cuando volteaste.

---- ¿Todo está bien? - susurró -

---- sí...estamos mirando una película, ¿Ustedes?

---- tu abuela encontró una novela y estoy a nada de acompañarla. - carcajeó - me gusta verte feliz, nena..

Apartaste la mirada algo cohibida y moviste tu mano hasta encontrar su cabeza y empujarla hacia abajo, volviendo lo a su asiento.

---- en unos momentos les traeré la cena..- avisó la azafata -

El primer vuelo pasó relativamente rápido. Queda uno más y era el más largo.

---- me va a quedar el culo cuadrado. - rezongó tu abuelo causándote risa - ¿Tu casa es linda, Ari?

---- ¡sí! Es muy bonita, va..a mí me gusta.

---- ¿Queda lejos del aeropuerto?

---- hmm... sí, un poco bastante, pero ni vas a notar el viaje.

---- aaah..lo que hace uno por verte feliz, ¿Eh? - sonrió leve y miró la pantalla nuevamente - me voy a perder los partidos de river..

---- puedo conseguir como verlos, no te preocupés por eso.

---- eso estaría bueno, pero tampoco te mates buscándolo. - murmuró - quiero chusmear dónde vivís y saber si es un buen lugar.

Unos leves sacudones llegaron al avión, llamando la atención de todos.

Las azafatas pidieron tranquilidad y abrocharse sus cinturones. Estaban pasando por una fuerte turbulencia.