Tú, una alegría efímera

9 0 0
                                    

Te odio, porque sabes cómo quitar mis anhelos, esos, los cuales nunca me has entregado por no lastimar con la ilusión. Simplemente, te amo por tu ser y las inspiraciones que me haces tener. Te anhelo porque tu presencia no es más que el estar sino el bienestar y eres mi alegría efímera desvanecida cuando te marchas por aquel umbral.

Historias de popurrí y retazos de pensamientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora