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No se por que despierto en la enfermería siento un picor en el brazo y miro que la marca fea y negra se empieza a volver como cicatriz y veo que entran todos los profesores y me hago la dormida —¿Que fue lo que paso profesor? — pregunta la profesora Mcgonagall al director el cual se menea y me deja ver a Harry el cual parece que acababan de atacarlo —Fue Quirrel, primero la señorita Black con la marca de su brazo y después esto— dice el profesor Albus y entra Snape —¿los dos estan bien? — pregunta Snape y se nota preocupado como si la idea de perdernos le afectará —Si estan bien llegamos a tiempo no tan tarde como con la señorita Black la cual sigue dormida después de semanas — dice Albus Dumbledore me quedo helada ¿como que semanas?.... 

Apenas pudimos salir el día de la fiesta de fin de curso y Slytherin volvía a ganar la copa durante siete años seguidos. Un gran estandarte, que cubría la pared detrás de la Mesa Alta, mostraba la serpiente de Slytherin. Cuando entramos Harry y yo se produjo un súbito murmullo y todos comenzaron a hablar al mismo tiempo, Harry se deslizó en una silla, entre Ron y Hermione y yo entre Fred y Wood en la mesa de Gryffindor obviamente. Algunos hasta se paraban para vernos. Por suerte, Dumbledore llegó unos momentos después. Las conversaciones cesaron. —¡Otro año se va! — dijo alegremente Dumbledore —Y voy a fastidiaros con la charla de un viejo, antes de que podáis empezar con los deliciosos manjares. ¡Qué año hemos tenido! Esperamos que vuestras cabezas estén un poquito más llenas que cuando llegasteis... Ahora tenéis todo el verano para dejarlas bonitas y vacías antes de que comience el próximo año... Bien, tengo entendido que hay que entregar la copa de la casa y los puntos ganados son: en cuarto lugar, Gryffindor, con trescientos doce puntos; en tercer lugar, Hufflepuff, con trescientos cincuenta y dos; Ravenclaw tiene cuatrocientos veintiséis, Slytherin cuatrocientos setenta y dos— cuando dice eso el director provoca una tormenta de vivas y aplausos que estalló en la mesa de Slytherin. —Sí, sí, bien hecho, Slytherin— les dice Dumbledore —Sin embargo, los acontecimientos recientes deben ser tenidos en cuenta. —dice Dumbledore y todos se quedaron inmóviles. Las sonrisas de los Slytherin se apagaron un poco. —Así que tengo algunos puntos de última hora para agregar... Dejadme ver. Sí... Primero, para el señor Ronald Weasley... — dice Albus y Ron se puso tan colorado que parecía un rábano con insolación. — por ser el mejor jugador de ajedrez que Hogwarts haya visto en muchos años, premio a la casa Gryffindor con cuarenta puntos. — los hurras de Gryffindor llegaron hasta el techo encantado, y las estrellas parecieron estremecerse. Se oyó que Percy le decía a los otros prefectos: «Es mi hermano, ¿sabéis? ¡Mi hermano menor! ¡Consiguió pasar en el juego de ajedrez gigante de McGonagall!». Por fin se hizo el silencio otra vez. —Segundo... a la señorita Hermione Granger... por el uso de la fría lógica al enfrentarse con el fuego, premio a la casa Gryffindor con cuarenta puntos. — Hermione enterró la cara entre los brazos. Y tengo la seguridad de que estaba llorando. Los cambios en la tabla de puntuaciones pasaban ante nosotros y Gryffindor estaba cien puntos más arriba a lo que no paraba la felicidad de los Gryffindors —Tercero... al señor Harry Potter... — continuó Dumbledore. La sala estaba mortalmente silenciosa algo realmente raro —... por todo su temple y sobresaliente valor, premio a la casa Gryffindor con sesenta puntos. Y por cuarto... 20 puntos para la señorita Black que a pesar de todas las adversidades y por su sacrificio — y a pesar de que eso casi no tuvo sentido, el estrépito fue total. Los que pudieron sumar, además de gritar y aplaudir, se dieron cuenta de que Gryffindor tenía los mismos puntos que Slytherin, cuatrocientos setenta y dos. Si Dumbledore me hubiera dado un punto mas los sobre pasaríamos. Pero Dumbledore levantó el brazo. La sala fue recuperando la calma. —Hay muchos tipos de valentía — dijo sonriendo Dumbledore —Hay que tener un gran coraje para oponerse a nuestros enemigos, pero hace falta el mismo valor para hacerlo con los amigos. Por lo tanto, premio con diez puntos al señor Neville Longbottom— dijo el director y si alguien que hubiera estado en la puerta del Gran Comedor habría creído que se había producido una explosión, tan fuertes eran los gritos que salieron de la mesa de Gryffindor. Harry, Ron y Hermione se pusieron de pie y vitorearon a Neville, que, blanco de la impresión, desapareció bajo la gente que lo abrazaba. Nunca había ganado más de un punto para Gryffindor. —Lo que significa — gritó Dumbledore sobre la salva de aplausos, porque Ravenclaw y Hufflepuff estaban también celebrando la derrota de Slytherin —Que hay, que hacer un cambio en la decoración— Dumbledore dio una palmada. En un instante, los adornos verdes se volvieron escarlata; los de plata, dorados, y la gran serpiente se desvaneció para dar paso al león de Gryffindor. Snape estrechaba la mano de la profesora McGonagall, con una horrible sonrisa forzada en su cara. Aquélla fue la mejor noche de la vida, mejor que ganar un partido de quidditch, o que la Navidad. Nunca, jamás, olvidaría aquella noche. Los resultados de los exámenes llegaron y para mi gran sorpresa ya que no hice los exámenes pase con buenas notas. Hermione, por supuesto, fue la mejor del año... 

Misol Black (La Piedra Filosofal)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora