sonic un erizo que tuvo problemas con su familia ,que era un erizo sin popularidad ,y que la niña que ama ,no lo corresponde ,pero esto cambiara cuando se escape de su casa ,haga otra vida en otra parte ,y cuando se reencuentre con amy rose ,esta qu...
No pensaba que el azulado, descubriría quién era en realidad, nunca pensó que la verdad.... Saldría a la luz.
Cuando llegó a su casa, su madre se sorprendio al verla, llegar llorando, no escucho a los llamados de su madre y se fue directamente a su habitación.
Amelia : que paso Amy? Por que llegas así? -pregunto mientras la seguía hasta la habitación
Amy : el, lo sabe todo ya
Amelia : de quien estas hablando? Quien sabe todo ya?
Amy : Sonic!!... Se entero de quien era en realidad y, me dijo que no me quería volver a ver
Amelia : entonces, el si es sonic? Debemos de avisar a Aleena
Amy : no creo que sea buena idea
Amelia : Amy cariño, ellos lo han estado buscando desde hace mucho, les alegrará saber dónde está sonic, aunque no quieras, debemos de decirle
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TIEMPO MÁS TARDE:
En otro lugar, la eriza, morada mayor, estaba sentada en un cálido sillón, mientras observaba una foto de su pequeño hijo.
Ella misma se castigaba con sus pensamientos, por haber sido una mala madre en su momento.
El hecho de no haber apreciado a su hijo le trajo consecuencias que ahora pagaba.
Jules: ¿Sigues mirando aún esa foto?
Aleena: no puedo dejar de pensar en nuestro hijo; no sé si estará muerto o vivo en algún lugar.
Jules: Ya pasó mucho tiempo, aún así no nos rendimos; verás que algún día lo encontraremos.
Aleena: Y si no lo encontramos... Jamás podré perdonarme de cómo lo trate.
Jules: no debemos rendirnos, lo encontraremos, te lo prometo.
Ambos erizos mayores se miraron mutuamente, mientras con un pequeño beso cerraban aquella promesa.
Hasta que les interrumpió el sonido del timbre, que era tocado de manera desesperada.
Aleena: ¿Quién estará tocando así?
Jules: No lo sé, pero será mejor ir a averiguarlo.
Ambos se dirigieron a la entrada, donde se encontraba la puerta, que estaba abierta por el erizo.
Aleena: Oh Amelia, Amy, ¿qué haces por acá?
Amelia: Lamento venir así, pero ¿Amy tiene algo que decirles?
Jules: ¿Sobre qué?
Amelia: Amy, dile toda la verdad, dile a Jules y a Aleena. Lo que sabes de Sonic
Aleena: ¿Qué sabes de Sonic? DI-DÍMELO AHORA!!! —exclamó lo último con cierto enojo y desesperación.
Amy: Encontré a Sonic... No estuve segura desde un comienzo, así que me acerqué a él y hoy pude confirmar que es él.
Jules : donde esta el? ¿Donde se encuentra?
Amy: Vive con los oficiales Zamy y Zonic... Justamente los oficiales que les estaban ayudando a buscar a Sonic.
Aleena: Me estás diciendo que todo este tiempo, ellos tenían a mi hijo.
Amy: Sí, ellos lo cuidaron desde pequeño. Ahora mismo, él está con ellos.
Aleena : Tengo que ir a verlo, debo confirmar que sí es mi hijo... vamos, jules.
Ambos erizos mayores fueron al lugar indicado por la rosada, donde supuestamente está su hijo.
Debían ir a ver si era verdad o solo una falsa ilusión más.
Fue un viaje en silencio, mientras que ambos pensaban en si sería o no el reencuentro con su hijo menor.
Jules le avisó a su esposa que habían llegado al lugar indicado; ésta, sin esperar, fue rápido a tocar la puerta, esperando que alguien le abriera.
Jamás espero que esta sea abierta por un erizo azulado con los ojos hinchados.
Su corazón de madre, le decía que él era, podría ver la viva imagen de su esposo en aquel joven, junto a rasgos iguales que ella.
Sin previo aviso, abrazó con todas sus fuerzas al joven. Parecía que eso era lo único que la hacía vivir.
En su mente se prometía, así misma, no volver a cometer el mismo error que cometió años atrás y que sólo le trajo sufrimiento.
Jules siguió los mismos pasos que su esposa, mientras que el azulado estaba confundido.
Se preguntaba, así mismo, quienes eran estos desconocidos que habían tocado su puerta y que ahora lo abrazaban.
Sonic: Disculpen, pero ¿quienes son ustedes? ¿Por qué me abrazan? ¿Por qué lloran?
Aleena : Somos tus padres, hijo mío; tal vez no nos recuerdes, porque desde pequeño te perdimos por algo malo que hicimos tu padre y yo.
Fue ahí donde aquellas palabras hicieron que aquel joven recuerde todo lo que vivió de niño.
Aquellas noches de soledad y tristeza, aquellos momentos donde sufrió mucho, porque sus padres no le prestaban atención a él.
Todo esos recuerdos llegaron como un trago amargo; jamás espero que ese día, su pasado volviera; solo pidió un día tranquilo, pero la vida le tenía preparada otra cosa.
