My Black Wolf (Jikook) |Omegaverse| [Adap.]

Capítulo Veintitrés☽

「Al Mando.」

SOOBIN.

Me desperté con un extraño sentimiento de felicidad.

Sonreí internamente al recordar la noche de ayer e insintivamente llevé mi mano hacia mi cuello donde seguramente se encontraba un lindo tatuaje con las iniciales CYJ, que significan su nombre y apellido.

Aunque lo que más me extrañó fue ver que Yeonjun no estaba a mi lado ni tampoco sentía su olor en la casa.

A mi lado se encontraba una nota con algo escrito, la tomé y la leí atentamente.

"Perdón que no pudiste despertar junto a mi es que tuve que salir a hacer una misión urgente y como un miembro importante de la manada debía ir por más que quisiera quedarme contigo acurrucado.

Hoy antes de irme te observé detalladamente, eres tan hermoso y soy muy afortunado de tenerte.

Llegaré en unas horas, te amo mi niño cuida de tu hermano y mi sobrino que Jimin ha tenido que venir tambien, prometo recompensarte cuando vuelva y gracias por la noche de ayer.

Siempre tuyo, Yeonjun."

Sonreí y me levanté de la cama con un leve dolor allí abajo pero orgulloso seguí con mi camino.

Me vestí, comí algo y salí a casa de mi hermano. Realmente me sentía a gusto aquí.

-Hola-una niña de cabellos rubios me sonreía desde el piso.

-Hola bonita-dijo arrodillé.

-No encuentro a mi mamá-hizo un puchero.

-¿Vamos a buscarla si?-Ella sonrió y tomé su manito-¿Como te perdiste?-Le sonreí.

-Mi mamá estaba en casa y de pronto desapareció, busqué a papá pero tampoco estaba entonces salí de casa y te encontré a ti.

Que extraño. Decidí ir a lo de Jungkook, esto me daba mala espina.

-Primero vamos a ir a la casa de una amigo para que nos ayude si bonita -acaricié su cabello.

-Esta bien-sonrió.

Lo que me llamó la atención fue que en el camino había muy pocas personas cuando esta es una manada numerosa.
Llegamos a casa de Jungkook y golpeé la puerta.

-Hola hermano-me abrió Jungkook -¿Quién es esta preciosura?-sonrió.

-Tenemos que hablar-entré sin decir nada, Nayeon y Hyuna se encontraban allí-Nena mira ve con ellas a jugar ahora iremos a buscar a tu mami.

Ella salió corriendo y se sentó junto a Nayeon.

-¿Ha pasado algo?-preguntó Jungkook tocando su vientre.

-Me encontré con esa niña en camino a aquí, me dijo que sus padres desaparecieron de repente. Esto me da mala espina Kook-miré por la ventana.

-¿Crees que...?-asentí sin dejarlo terminar la frase.

-¿Quienes están?

-Namjoon, Dawn, Yoongi y algunos hombres más aparte de niños y mujeres-dijo cerrando las cortinas.

-Debes comunicarte con ellos, eres el único diles que nos están atacando silenciosamente y por favor no salgas de la casa-tomé sus manos.

-No ni lo pienses, tú no irás a pelear-dijo asustado.

-Tengo que proteger a mi manada Jungkook, ahora yo soy de aquí y tu eres el que está al mando pero no voy a hacerte caso, ya soy grande.

-Lo sé...Sólo ten cuidado-me abrazó.