「Sustos.」
SOOBIN.Me desperté debido al exquisito olor de panqueques y frutas. Abrí mis ojos encontrándose en el sofá que la noche anterior había compartido con Yeonjun.
Mis mejillas se tiñeron de rojo y me levanté extrañamente contento, me enredé en la frazada y me encaminé hacia la cocina.Me encontré con la musculosa espalda de Yeonjun cocinando algo sólo en ropa interior.
-Buenos días, precioso-me sobresalté al escuchar su voz.
-Buenos di..dias-bostecé sentándome en el taburete de la mesada.
-¿Dormiste bien?-sonrió poniendo un plato de panqueques y frutas a su alrededor.
-Como un bebé-me sonrojé, lo miré detenidamente. Es precioso en la mañana, su cabello alborotado y sus ojos achinados lo hacían ver tierno y sexy a la vez.
-Puedes mirar todo lo que quieras-me guiñó el ojo.
-No te estaba mirando-mentí comiendo los panqueques.
-Ajam-se sentó a mi lado.
Puse el plato en el medio y comenzamos a comer juntos. Entre risas y sonrojos terminamos de comer y salimos hacia la casa de mi hermano.
Tocamos la puerta, un dormido Jungkook nos abrió la puerta refregandose los ojos.
-¿Quién es, amor?-Jimin lo abrazó por detrás haciéndolo sobresaltar, nos reímos y entramos luego de que mi hermano y Jimin se movieron.
-¿Jimin, me acompañas a ver algo?-dijo Yeonjun mirando a la pareja de mi hermano.
-Claro, en un rato vuelvo, mi amor-se dieron un beso apasionado y salió por puerta.
-No me extrañes, mi niño- Yeonjun besó mi mejilla y salió.
Volteé la cabeza a ver a mi hermano que sonreía tierno.
-Tonto-le di un manotazo en el hombro.
-¿Yo, por qué?-se hizo el inocente.
-Si claro, santo de Dios -reímos.
-Espera-su rostro se volvió serio y se acercó a mi oliendome.
-¿Por qué tienes su olor impregnado?-gruñó mirándome.
-Porque dormimos juntos porque yo tenía frío-expliqué.
-Oh, está bien-se calmó.
De pronto mi hermano tapó su boca e hizo una mueca corriendo hacia el baño.
-¡Jungkook!-entré detrás de él y acaricié su espalda al verlo vomitar en el water-¿Estas bien?-le pregunté preocupado.
-S...Si sólo fueron náuseas, debo haber comido algo que no hizo mal-le serví un vaso de agua y me senté a su lado.
Los chicos entraron riendo, Jimin la ver a Jungkook en ese estado de palidez corrió hacia el.
-¿Kookie, estás bien amor?-tomó su rostro delicadamente para poder observarlo.
-Si, sólo fueron náuseas-le sonrió tomando su mano.
Yeonjun se paró a mi lado y pasó una mano por mi hombro observando a mi hermano pálido.
-Vamos con Hyeri, de seguro ella sabe algo-Jimin acarició su mejilla.
-Estoy bien Jimin, algo me cayó mal es todo-sonrió tranquilo.
-Está bien, pero cualquier cosa me avisas -besó su mejilla.
Mi hermano asintió y salió hacia la puerta que segundos antes sonaba el timbre.
Nayeon, Hoseok, Hyuna y
Dawn entraron contentos por la puerta.-Hola familia-saludó Hyuna con su cachorra en brazos.
-Hola-sonreí.
-¡Hermanos!- Nayeon entró corriendo y me abrazó y después a Jungkook-¡Quiero quedarme aquí para siempre!-salió gritando hacia el living.
-Esta loca- reímos.
Hyuna entró y miró preocupada a Jungkook.
-¿Estas bien?-movió a Jimin hacia un lado.
-Si, solo me cayó algo mas el todo-le sonrió.
-Esta bien, cuidenlo-salió al living con los demás.
-¿Hermano de verdad estas bien?-asintió por mi pregunta.
-Creo que necesitas descansar-Jimin tomó su mano.
-Chicos, estoy bien, en serio-nos sonrió.
-Esta bien-suspiró Jimin-Vamos con los demás-nos levantamos y nos sentamos en el sillón junto con los demás.
Comimos algo y planeamos lo que haríamos para Navidad que era tan sólo en siete días.
Mi hermano estaba riendo y al otro momento corriendo hacia el baño con Jimin detrás.
Todos nos levantamos preocupados y esperamos a que volvieran.
-Chicos iremos con Hyeri, quédense lo que quieran-salieron por la puerta como un rayo.
Todos nos miramos preocupados, yo sólo esperaba a que mi hermano estuviera bien.
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Y la sorpresa es...Gracias por leer galletitas.🍪✨
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My Black Wolf (Jikook) |Omegaverse| [Adap.]
Manusia Serigala-Porfavor n...no me hagan daño -dije con mi último aliento. Me dolía todo, sentía la sangre caliente salir lentamente de mis heridas para caer a la húmeda tierra pegada a mi mejilla izquierda. Observé casi inconsciente las sombras que se alzaban a m...