Perdida.

Capitulo 1

Un rayo salió del cielo y se estrelló contra un árbol , este provocó que lo cortara a la mitad y cayera sobre el pavimento así salieron muchos rayos del cielo y pasó lo mismo con todos los árboles era una catástrofe la lluvia era muy fuerte.
El clima estaba como loco y no favorecía a la pelirosa en su misión de rastreo junto a Kiba, estos trataron de esconderse en una cueva para que no les cayera los árboles encima era lo más conveniente que se escondieran hasta que la tormenta pasará.
.
.
.
.

//Al día siguiente//

Por fin — dijo la pelirosa saliendo un poco de la cueva— quedó un desastre.

Esa fue una noche horrible, que feo clima —saliendo de la cueva junto a su fiel amigo—

Debemos despejar el camino Kiba —levantando un árbol y aventandolo a un lado— 

Sakura estoy olfateando mucha sangre, hay alguien herido —siguiendo su olfato hasta la sangre—

¿Dónde está kiba? — preocupada—

Debajo de esos árboles — señalando—

La pelirosa enseguida quito todos los árboles de encima y efectivamente ahí estaba una anciana desangrada con un daño tan feo debido a una rama del árbol que le atravesó el cuerpo y le hacía fuertes daños.
Sin perder tiempo la chica empezó a curar sus heridas superficiales y hacer un chequeo rápido de qué es lo que necesitaba y cuántos órganos estaban dañados.

Debemos llevarla a la Aldea de inmediato — sacando una camilla de emergencia de su bolsa—

Cómo es que tienes una camilla — sorprendido—

Es de emergencia se puede doblar todo incluso las varillas — desdoblando la camilla—

El inuzuka ayudo rápidamente y ambos lograron llegar a la aldea pero en la puerta principal los vieron demasiado extraños y no los iban a dejar pasar pero La pelirosa aventó una mirada de amenaza y dijo.

Yo me hago responsable , vamos a estar en el Hospital — paso de largo—

Pero doctora... —protesto un guardia—

No tengo tiempo para armar un reporte yo daré las explicaciones al séptimo ya te dije dónde estaremos . — saliendo de la vista de los guardias—

Es mejor vayas con ella y mandes a un clon a informar al Séptimo — comento el segundo guardia—

Entiendo — corriendo hacia la torre Hokage—

.
.
.
.
.

//En el hospital//

Llegó tan agitada gritando al personal que le prepararan el quirófano mientras su compañero kiba se quedó en la sala de espera llenando unos papeles al guardia.
Ella se metió a lavar las manos, a desinfectarse y a ponerse su uniforme, las heridas eran demasiado graves y profundas no había mucha posibilidad de que pudiera sobrevivir pero algo tenía esa viejita qué la pelirosa estaba tan empeñada en no dejarla morir.

Doctora, ya está todo en orden — dijo una enfermera —

Ya estoy lista — entrando rápidamente al quirófano—

.
.
.
.

//En la torre Hokage//

El rubio estaba firmando papeles, el pensaba que por estar en tiempo de paz no habría tanto papeleo pero estaba muy equivocado ya estaba demasiado cansado no iba a dormir a su casa desde que se convirtió en Hokage , si tenía mucho trabajo pero también contaba con la ayuda de Shikamaru y el podía ir a dormir a su casa diariamente solo que por alguna razón que el no quería aceptar o ver el porque no iba, un golpe en la puerta lo hizo despejarse y salir de sus pensamientos.

Adelante — sacudiendo la cabeza —

Disculpe la interrupción Hokage pero la señora Uchiha llegó de su misión con kiba y con otro cuerpo en una camilla pero no se quiso detener a dar su reporte y pedir autorización para la admisión del cuerpo.

Sakura-chan..... —rio levemente— No hay problema gracias por avisar.

Dijo que estarían en el Hospital y mi clon está ahí con ellos , su compañero Kiba está firmando unas hojas de responsiba y llenando un informe. — con firmeza—

Está bien, gracias. — seguía con una pequeña sonrisa al recordar el temperamento y la necedad de su ex compañera de equipo—

Con todo respeto Hokage — continuo hablando el guardia—

Que pasa — el rubio puso más atención—

Creo que la señora uchiha se está aprovechando mucho de que usted fuera su compañero de equipo y de su buena manera de ser, ni siquiera su esposa la señora Hinata se atreve a desobedecer las reglas y los protocolos que tiene la aldea. — finalizó—

Estas palabras hicieron enojar mucho al ojiazul, ambas mujeres no se podían comparar en absoluto y cómo se atrevía a expresarse de esa forma de su ex compañera que el quería tanto, quito inmediatamente su sonrisa que tenía y puso su cara totalmente seria apretando los puños pegó en el escritorio esto hizo que su café se derramará sobre algunos papeles, el guardia se  asustó un poco pero se quedó firme a recibir una respuesta.

Ya te he dicho que está bien y que gracias —aciendo una pausa— Tú no la conoces, no sabes cómo es ella y si la persona que venía en la camilla estaba muy herida ella va a preferir salvarle la vida antes de hacer un estúpido papeleo. —frunciendo el seño—

Con todo respeto no es un estúpido papeleo pues eso trae un control y protege la seguridad de la aldea. — contesto rápidamente—

Para proteger la aldea estoy yo y ella ya te había dicho que se hacía responsable ya están llenando una norma en el hospital que más quieres parece que el Hokage ,eres tú y no yo . —parandose de su aciento— ¿quieres tomar las decisiones aquí?

No, disculpeme — negando con la cabeza—

Y no solamente es mi ex compañera, es mi amiga y siempre va a serlo, confío plenamente en ella y se que no va a poner en peligro a la aldea. — dándole la espalda al guardia y mirando por la ventana—

Sí, discúlpeme. —cabizbajo salió de la oficina—  con permiso —cerrando la puerta—

.
.
.
.
.