Capítulo 6. Fernanda Robles

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Me encuentro en la orilla del mar, con un mondadientes en la boca, mientras contemplo el horizonte ¿Qué habrá más allá? ¿Acaso la carne de otros lados me sepa igual? Cierro los ojos, mientras la brisa del aire recorre mi rostro, con una sonrisa cínica y con las manos dentro de los bolsillos de mi pantalón, solo recuerdo la exorbitante sensación de mi víctima anterior.

Crash.. crash.. crash, oigo las conchas del mar siendo trituradas con el andar de alguien detrás, sensación del sonido que me recuerda a las costillas de Elissa McGuire, siendo trituradas con mis dientes mientras desgarraba la carne bien cocida de aquél momento.

"¿Un hermoso día para tomar el aire no es así?" Me han hablado y volteo a ver, mujer morena de cabello oscuro cuerpo estéticamente formado por el entrenamiento diario de un trabajo constante, piel sudada por el ejercicio, voz con acento distinto a las anteriores.

"¡Oh...si! Es un hermoso día para tomar el aire" contesto mientras la miro discretamente, cuerpo de 1.65 de alto, blusa azul y shorts negros con franjas blancas, tintes de color blanco y zapatillas deportivas de color blanco y negro por igual; gorra plástica sin copa de color turquesa.

"¿No le da mucho calor vestir así? Ese sastre de color café debería ir en estas épocas en el guardarropa ¿no cree usted?"

"¡No... se preocupe! Ya estoy acostumbrado a vestir día y noche de esta forma, a veces el cuerpo se vuelve caprichoso con la ropa y así como se sabe domar a un perro, el cuerpo es lo mismo; aunque no siempre responde a las órdenes, a veces uno lo hace por inercia"

"¡WOW! Eso sonó muy poético... Me llamo Fernanda... Fernanda Robles ¿Y usted joven hombre?"

"¡Todos me llaman G! Sr. G, para servirme..." Te tomé la mano y te la bese de manera generosa, no podía quedarme con las ganas de conocer el sabor de sudor después de haber pasado la mano por la frente.

"¡Mil disculpas! No pensé que me besara la mano" dijiste avergonzadamente

"¡Descuida! Ya estoy acostumbrado" te dije cautelosamente.

"¿Y dígame? ¿Usted de dónde es? Eh visto muchas personas con diferentes aspectos faciales, pero loa suyos... Parece que le han pegado, tiene una que otra cicatriz ¿Acaso lo han asaltado? La inseguridad cada día es más grave..."

"¡Algo así! Aunque igual, ya estoy acostumbrado, eh vivido con estás manchas toda mi vida"

"... ¿Se ha enterado usted que han habido varios asesinatos? Uno en éstos días vive con el miedo a sol y sombra, no entiendo porque los Oficiales no han logrado dar con el paradero del Asesino Come Carne"

"¿Asesino come carne has dicho? Y ¿A qué se debe que lo hayan apodado así?"

"Mis compañeras de cuarto me han comentado que hay una persona devorando a sus víctimas, después de desmembrarlas, sobre todo a las Mujeres, parece que son su plato preferido"

"Las mujeres tienen una textura suave, sin importar el tamaño, peso o talla; a diferencia de los hombres, el estrógeno que emana su cuerpo los hace muy toscos..."

"¿Y usted, como sabe eso?"

"Libros de anatomía, inclusive muchos autores de obras literarias basadas en historias de suspenso, terror, historias oscuras, han debidamente estudiar la psique de las personas para plasmarlo en pensamientos"

"¡Es una persona de mucho culto! A mis amigas les caería bien conocerlo para que cuente un poco más de su experiencia"

"¡Sería un gran honor! ¿Cuántas son ustedes?"

"Compartimos el departamento en total tres, éramos cuatro pero una de ellas desapareció sin dejar huella"

"¿A caso le pasó algo a tu cuarta amiga?"

"¡Lamentablemente si! Tuvo la misma suerte que las otras chicas que han aparecido en las noticias, la encontraron sin piernas detrás de unas lapidas del cementerio, al parecer el asesino fue a recordar a sus víctimas y ella se sumó a ellas"

"¡Oh ... Que lamentable noticia! Mis más sinceras condolencias, el cementerio es un lugar muy frívolo y muy solitario"

"La verdad si, ¿Le importaría si me acompaña al departamento? Después de hablar del tema prefiero regresar acompañada, gracias al cielo que di con usted, se ve que es una persona muy segura"

"¡Te agradezco mucho Srita. Fernanda! Con gusto la acompaño y de paso me presenta a sus amigas"

Caminamos juntos al departamento, sin que te dieras cuenta que aquel Asesino Come Carne que ustedes anuncian era yo, mientras caminábamos imaginaba el manjar al que me llevarías, el edén de la victoria, ¿Quién iba decir que aquella chica vestida de gótica era amiga tuya? ¿Acaso tus padres nunca te enseñaron a no llevar gente desconocida?

Cruzamos el Central Park, luego las calles aledañas al departamento, después cruzamos una tienda y después un super mercado, me habías traído a una zona muy conocida para mí, jamás imaginé que seríamos vecinos de calles fronterizas.

Entramos al edificio, llegamos a tu departamento, habitación 2458, una pequeñas suites residencial, me invitaste a pasar y yo acepté, una nota en la mesa había y decía así:

"Fer, salimos de compras Nao fue a ver a sus papás, te encargamos la cena; pasaremos a ver a Guzmán, besitos"

Vaya suerte la mía, ni mala ni buena, me dijiste que irías a cambiarte y me dejaste disponible el frigobar, fui a la cocina y desde ahí escuché el agua de la regadera caer, abrí la alacena y tome un gran cuchillo, seguí el ruido del agua y abrí lentamente la puerta, ventana corrediza dividía el baño, abrí lentamente dicha ventana y después, el agua se tornó roja.

Merci

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