¿Y si él me cautiva?

Capitulo 3

¿Arrepentida?

Hay todos cometemos errores ¿Verdad? Pues si otra una de las imprudencias de Alice Miller.

Nada nuevo. Había abierto la puerta sin la prevención de ponerme algo para tapar los tatuajes de las mariposas alrededor de mi antebrazo.

Mis papás estaban enfrente mío, mamá me veía con cara de horror el brazo. Sí, había visto los tatuajes, es que esta señora no me avisa cuando va a venir y yo en la mañana no funciono del todo bien. Nunca más bien.

Estaba recargada el marco de la puerta de la entrada del departamento. En serio a esta señora le salía lo latina por todas partes. Entro dramáticamente a sentarse al sillón, mientras mi papá le echaba aire con la mano.

— Un vaso... Con agua — Leah salió apresurada de la cocina con el bendito vaso de agua. Y mamá le susurro un gracias.

Gire los ojos cerrando la puerta de golpe. Ella también tenía. Alan tenía y muchos. Ethan también. No le veía el problema

— ¿Cómo? ¿En qué momento? Alice... Yo no te reclamo es solo que te tatuaste y lo estás tomando a la ligera. Sabes lo que es eso, se va a quedar ahí durante toda tu vida — Regaño mientras se cruzaba de brazos y me daba una mirada fulminante. 

Pues si, pero ni modo. Johnny la gente ya está muy loca, Wtf.

— Aja... Eso ya lo sé — No entendía su punto, me confundía. 

— No me molesta que lo hayas hecho, me molesta que te tatuaste la firma de tu exnovio muerto... Y unas mariposas. Dime el significado — Lo de las mariposas lo agrego, para que no sonara que solamente iba contra de él.

Vale el problema era Zac, Je.

Digamos que la relación entre mama y Zac, no fue la mejor y después de lo que paso el año anterior, ya no le caía bien, aunque estuviera muerto. Río para no llorar. Aunque siendo sincera yo tampoco lo quería, quería cerrar ese ciclo y ver solamente por mí. Si su firma hubiera sido su nombre obviamente no me lo iba a tatuar, su firma era simple una z volteada que parecía rayo.

— Pues la firma es un ¿Recordatorio? Un ¿Símbolo? Un ¿Recuerdo? Un...

Olvide la palabra, Dory me quedaba corta.

— Ya lo, capte, pero la ¿Firma? ¿No podía ser otra cosa? — En verdad estaba molesta que después de todo lo que nos, porque la incluyo, me hice esto. Pero esto fue para cerrar todo aquello que hubo con Zac Baker alguna vez. Él ya era mi pasado.

¿Le digo? ¿No le digo? En el nombre de Merlín. A ver qué sale.

— Pues si hay otra cosa — lo último lo susurre y después carraspee.

¿Es buen momento para correr?

— ¿Cómo? ¿Escuche bien?

Je. Ahora si es momento de correr, perra corre.

— Sip — Le sonreí inocentemente.

Creo que meterme en problemas debería ser mi segundo nombre y no Atenea. Atenea te defraude.

— ¿Qué es? — No se escuchaba nada relajada. La altero todavía más.

— Una paloma — Se la, enseñe. Bueno él tal Mica a pesar de, ser un idiota era un buen tatuador.

Y la paloma tenía significados no solamente porque era él símbolo de la paz. Si no que para mí significaba libertad ¿De qué? De dos años en los que fueron horribles.

De un momento a otro cambio su expresión, y me dijo:

— Vale, ya no puedo hacer más... Alice, ya no eres mi niña chiquita que cuando caía la lluvia y los truenos te asustaban corría hasta mí para poder dormir tranquila, contarte una historia o la niña que perseguía mariposas por toda Italia. A pesar de todo te admiro Atenea, eres una guerrera como ella, y lo seguirás siendo. Te amo A.