¿Y si él me cautiva?

Capitulo 8

Marcianos.

Sentada en una butaca escuchando sin interés la clase. Pensado en que la fiesta fue muy desastrosa en la que saque cosas con Hades. ¿En qué momento se me ocurrió decirlo? Parecía una niña pequeña tratando de pelear por un dulce. Patético.

Estaba en clase de Emma, a lado de mi asombroso compañero Hades Kaheler. Creo que si lo veía mis mejillas se tiñerían de color rojo.

Por Dios.

Él tenía cara de no haber dormido en días y querer morir en cualquier momento. Jasper Cullen diria que son gemelos. 

Trataba de poner atención, lo juro, pero no haber comido nada en el desayuno ni en la comida fue terrible idea.

Sabía que había la posibilidad de que tuviera un trastornó alimenticio, que no quería aceptar. Pero pasemos página. No me gustaba hablar del tema y menos conmigo misma.

— Clase acabada, ya pueden retirarse — Hablo Emma.

Al fin, ya no quería seguir aquí, y tenía hambre, estaba guardando mis cosas, cuando, Hades hablo:

— ¿Seguimos con el proyecto? — Tenía cara de no querer hacer nada y no tenía el brillo en sus ojos.

¿Qué había pasado?

— ¿Seguro? No te ves del todo bien — Tenía las mejillas sonrojadas de acordarme de la fiesta. Ya sabia que esto pasaría si lo veía.

— Estoy bien, solo necesito una ducha y comer, es todo — Dio una pequeñita sonrisita

— Vale — Salimos juntos del salón al estacionamiento. Sin antes comprar algo no tan saludable de la maquinita era eso o morir de hambre. Y yo no estaba en condiciones para morir de hambre.

Saco sus llaves y toco el botón para que se abriera.

— Sube, ya está abierto — Mascullo mientras se quitaba la mochila del hombro y me quitaba la mía.

Ya casi llegábamos cuando se escucharon unos pasos.

Alan venía trotando hacia nosotros.

— Hey, ¿A dónde vas? — Pregunto con seriedad. Mirando por unos segundos a Hades con una mirada de sí le haces algo te mato.

— Sí, hola hermanita, ¿Cómo estás? ¿Yo? Muy bien, ¿Tú? — Musite con un deje de sarcasmo.

Giro los ojos.

— Si eso. ¿A dónde vas? — Volvió a preguntar mientras se quitaba un mechón de cabello de la cara por el sudor.

— Tengo un trabajo que terminar con él — Lo señale con la cabeza.

Frunció el ceño y volteo a ver a Hades otra vez.  Arqueo una ceja.

— Ah, Hades — Hecho un poco la cabeza hacia atrás, en señal de saludo.

— Alan — Hizo lo mismo.

— Me avisas cuando regreses, enana, cualquier cosa me llamas — Bajo más la voz para decir otra cosa—. Utiliza protección no quiero sobrinos pronto hermanita, nos vemos después — Me guiño el ojo y se fue como si no hubiera dicho nada.

— ¡Alan Orion Miller Sallow! — Lo grité fuerte que las personas que pasaban me vieron con cara de horror.

Se fue corriendo diciendo adiós con la mano

Ahora tenía las mejillas a explotar, y Hades se estaba riendo demasiado fuerte, al parecer Alansito no había sido muy discreto.

— ¿Quieres? — Pregunto Hades divertido.