capítulo 1

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—No quiero hacerlo —Me ignora mientras me empuja hacia la puerta.

—No seas cobarde y hazlo —Niego con la cabeza mientras Daniela me sigue arrastrando ahora por los pasillos del instituto —, ¿Quieres que lo haga yo? —Me amenaza con su típico tono de "Yo si tengo el valor" mientras levanta una de sus cejas.

—¡No! ¡Daniela suéltame! —Me da un empujón que casi hace que caiga al suelo pero no lo hago ya que choco contra el torso de alguien, su altura sobrepasa la mía y pálidezco al deducir quién es.

No tengo el valor de alejarme pero tampoco puedo quedarme pegada a él.

—Que distraída eres Emma casi te caes por salir corriendo del salón —Daniela me toma del brazo mientras yo sigo en shock
—Disculpala Brandon.

No sé donde enterrar la cara por la vergüenza que me recorre las venas.

—¿Estás bien? —Su voz hace estragos en mi interior y me siento como una chiquilla de trece años cuando ve al chico que le gusta.

—Si —Alzo la cara para poder verlo a los ojos, me intimida y a pesar de la vergüenza no le aparto la vista, sus ojos son muy bonitos y siento desfallecer cuando me dedica una sonrisa que muestra las pequeñas arruguitas que se le forman en la comisura de los labios.

—¿Tú estás bien? —Indaga Daniela, luego pasa sus ojos hacia mí —. No seas descortés y pregúntale si está bien. —murmura entre dientes mientras sonríe forzosamente.

Brandon nos ve a ambas con el ceño fruncido.

—Ah... si claro, ¿Estás bien? —Sus ojos se posan en mi y tarda unos segundos en responder. Segundos donde siento que me suda hasta el alma por los nervios.

—Si lo estoy, a la próxima ten más cuidado está prohibido correr en los pasillos.

Se da media vuelta antes de irse, suelto todo el aire que tenía retenido en los pulmones.

—Te estabas volviendo morada pensé que te desmayarías —Canturrea Dani a quién volteo a ver con malos ojos.

—Casi me tiras a sus pies —La riño.

—Mi querida amiga, te tiene a sus pies desde que lo conociste —se encoge de hombros —. Además deberías agradecerme porque por fin hablaron —Se observa las uñas mientras yo la sigo aniquilando con la mirada.

—No era la manera... y no es cierto.

No era la manera... me interrumpe tratando de imitar mi voz mientras me observa con un ¿es en serio? Claro en los ojos —, Si no lo hacia yo, tú nunca ibas a tomar la iniciativa y no trates de mentirme, sabes que es cierto lo que te digo es solo que eres demasiado cobarde para aceptar que se te cae la baba por él.

—Iba a hacerlo ¿Ya? Si iba a hablarle solo necesitaba tiempo —Trato de defenderme.

—Si claro y ¿cuando? Le tienes miedo acercarte a él tanto como yo le tengo miedo al compromiso y a una relación seria.

Sonrío por sus ocurrencias aunque claro está que no es broma cuando dice que le tiene miedo a eso, siempre que le conozco a alguien con quién anda aclara que no son novios, ni siquiera amigos trata de no ponerle etiquetas a esas personas que ella identifica como "personas X" ya que obteniendo lo que quiere de ellos los deshecha y jamás los vuelve a ver. Caminamos un poco más por los pasillos hasta llegar a la parte de atrás del instituto.

El aire fresco me tranquiliza un poco ya que el calor es sofocante, el olor a la naturaleza se siente por todo el lugar ya que el instituto está ubicado en medio de un pequeño bosque. El color verde resalta por todo el lugar y debajo de unos árboles frondosos están ubicadas unas pequeñas mesas de madera tomamos asiento en una.

Al Final Fuiste tú [En Proceso].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora