La guía de consejos de Faith.

Capitulo 22

"Estaba perdida"

Only love can Hurt like this- Paloma Faith.

Advertencia:

 Este capítulo contiene mención de traumas, dependencia emocional, descripción de la autolesión y las repercusiones que estas tienen, punto de vista crudo y descriptivo, si estás pasando por una situación similar y sabes que no te sentara bien leer algo así, tomate la total libertad de saltártelo o en su defecto dejar de leerlo.

Faith:

Me gustaba lo complicado, o, mejor dicho, tenía la teoría de que la mayoría de personas en el mundo preferían los retos a los caminos fáciles. Esperas los baches, el peligro, saltar muros y nadar después de tirarte por un acantilado, retos, eso era, yo disfrutaba los retos, pero, jamás había experimentado uno como esté.

Nunca había vivido lo que era sentirse dividida por hacer lo correcto.

Eran casi las 6 de la mañana y yo no había podido dormir nada, los chicos se habían ido pasadas las tres dejándome sola con Hope, él hacia guardia en el pasillo, caminando de un lado al otro para mantenerse entretenido, esperábamos que algún medico viniera a decirnos algo, habíamos obligado a mi madre a ir al auto a dormir un poco, así que ahora solo estábamos él, yo y nuestra amiga la incertidumbre.

Yo también estoy aquí.

Tu no cuentes.

¡La ingratitud!

A pesar de que nos habían informado que Brave se encontraba estable y sedada, no hubo forma en la que no siguiéramos preocupados, al menos no hasta poder verla. Nos habían dicho que al parecer Brave había cogido una infección viral, que con el cambio de clima y el polen en el aire, logró que se manifestara mucho más rápido de lo que se suele presentar.

La habían tenido que sedar antes de que incluso supieran que tenía, Brave era una niña muy valiente, pero estaba consciente de su enfermedad, y no me quiero ni imaginar lo que mi pobre hermanita sufría cada que tenía un ataque, cerrar los ojos y segundos después encontrarse en una habitación llena de doctores y no ver a mamá, yo también me pondría como loca.

Por suerte solo fue un susto, uno que de ser posible, no quería volver a vivir en mi vida.

Pero claro que eso no era lo que me tenía tan mal, me sentía egoísta por tener en la mente otras cosas que no fueran mi pequeña hermana en una camilla, pero no podía borrarme de la cabeza lo último que me había hablado con los chicos.

Necesitaba acomodar mis prioridades urgentemente, pero también me aterraba hacerlo, porque al final sabía que Tanner no entraría en las primeras cosas de la lista, y la sola idea de imaginar que a mí me hicieran lo mismo me estaba partiendo el corazón en cachitos.

¿Cómo le iba a hacer para fingir frente a él que todo estaba bien?

Me conocía lo suficiente para con tan solo una mirada, saber si algo sucedía, iba a tener que mentirle abiertamente, yo, la persona que detesta las mentiras más que nada en el mundo, me iba a ver en la terrible situación de hacerlo, a lo descarado.

Era una maldita egoísta.

Pero Vicco tenía razón. Necesitaba mantenerlo al margen, para pensar bien y no mezclar las cosas, con un paso en falso la situación se me podría salir de las manos, y si eso sucedía, no podría ayudarlo. Era la misma endemoniada encrucijada de antes, si le decía corría el riesgo de perder la única oportunidad que tenía para conseguir las pruebas que el necesitaba, y si no lo hacía, la peor de las consecuencias sería que me odiara.