Confía En Mi || Stiam

46.- pizza

Narradora

Malia había entrado al local mientras que Peter se disponía a sentarse en las bancas que estaban fuera de la pizzería.

Mientras miraba tranquilamente el cielo estrellado no pudo evitar pensar en todo lo que ha sucedido.

- ¿Cómo puedo amar a ese idiota? -pregunto al cielo pero su pregunta tuvo respuesta.

- A veces en el corazón no se manda y pues nadie se atreve a decirle que se equivoca, pero si lo culpan.

Peter observó atento al ojiazul.

- ¿Y tú eres? -cuestionó alzando una ceja haciendo que el chico le sonriera nervioso.

- Nolan, Nolan Holloway, ¿Tu eres? -se presentó con una pequeña sonrisa que a Peter le pareció tal linda e inocente pero había algo mal y era su aura de inseguridad.

- Peter, Peter Tate -dijo intentando recordar cómo estaba inscrito en el curso que llevaba junto a su hija, según para que no estuviera de vago y su mente no se perdiera.

- Tu eres hermano de esta chica que se junta a veces con Liam, la chica ruda y que siempre anda con una pelirroja, ¿Verdad?

Peter asintió.

- Se llama Malia, y en realidad es mi hija.

El ojiazul empezó a reír ante las ocurrencias del chico pero al ver que sus ojos cambiaron paro.

- Soy inofensivo si lo piensas un poco, me agradas Nolan, ¿Crees que quieras ir a mi casa esta no...?

- Listo Pet... Hola 68 -dijo interrumpiendo a Peter y en el proceso interrumpirse a ella misma al notar al chico y saludarlo.

- Hola -dijo sonriéndole tímidamente.

- ¿Entonces si vas está noche? -cuestionó Peter a lo que el chico vio como Malia sonreía ampliamente mientras le indicaba con la cabeza que digiera que si ya que ella no quería que su padre siguiera sufriendo por Scott.

- Está bien -dijo regresando su vista al chico que encantado se levantó y le extendió la mano.

- Solo pasaremos a dejar a Malia con unos amigos y nos vamos a mi casa.

El chico asintió y subió en el asiento del copiloto, cortesía de Malia que se subió en los asientos de atrás mientras que Peter puso en marcha el Jeep.

Al llegar a la veterinaria Malia les dejo una caja de pizza diciendo que era para que cuando terminarán recuperarán energía y bajo diciendo "Nos vemos mañana y diviértete papá".

El viaje a la casa de Peter que en realidad lo llevo al edificio de Derek se dispuso a entrar seguido del chico a uno de los departamentos que ya estaban amueblados y que era donde se quedaba cuando el Sr. Tate se ponía a ver sus partidos y no lo dejaba dormir.

- Es hermoso -dijo el chico viendo el apartamento, le agradaba y parecía hogareño.

- Me alegra que te guste, ¿Quieres cenar primero o... -dejo la pregunta inconclusa al ver que el chico levantó la caja.

- Si quieres lávate las manos, el baño está por aquel pasillo.

Nolan asintió mientras Peter preparaba la mesita que se encontraba en el balcón y la adornaba rápido pues al parecer el chico había aprovechado para revisar si estaba todo en orden, casi quiso reír cuando escucho la ducha cosa que le dió más tiempo para acomodar los utensilios y el vino.

Cuando regresaba con la pizza ya calentada nuevamente el chico salió del pasillos algo sonrojado y con el cabello algo húmedo.

- ¿Todo bien? -pregunto Peter logrando que el menor se sonrojara más de lo que ya estaba.

- Si, solo que me ocupe, ¿Te molesta?

Peter nego y le sonrió enternecido.

Comenzaron a cenar y a media cena por fin Nolan se atrevió a preguntar qué era.

- Hombre lobo y si te preguntas cómo es que tengo una hija que se ve de mi edad la respuesta es simple, hace unos meses sucedió un accidente y teníamos que entrar por un espacio muy reducido dónde debíamos entrar y salir sin dificultad, la solución era fácil pero como el incompetente ese no escucho bien las instrucciones hizo efecto al doble de lo que debía ser y heme aquí.

El chico asintió entre emocionado por lo genial que sonaba eso y temeroso por lo que pudiera pasar, ahora no vería nada de la misma forma.

- ¿Entonces cuántos años tienes en realidad?

Peter se encogió de hombros y dejando todo de lado se levantó y se acercó al chico que lo vio confundido para luego simplemente cerrar los ojos al ver que el chico lobo se acercaba y cuando sintió los labios ajenos como pudo se levantó logrando que Peter buscará la manera de cargarlo, cosa que no fue difícil ya que Nolan le ayudo impulsandose hacia arriba y enredando sus piernas en las caderas del mayor.

- 39... -dijo al separarse por la falta de aire a lo que el chico rio bajito y examinó por unos segundos el rostro del mayor.

- Si que estás viejo... -dijo para luego reír y volver a besarlo aún con una sonrisa que Peter ya estaba comenzando a adorar.

- Este viejo te llevará al cielo y no querrás que pare jamás -dijo separándose para luego volver a besarlo y con cuidado de no tirarlo y no caerse el mismo se adentraron y como pudo se guío hasta su habitación y la abrió de un empujón, agradecía que el lugar Kate lo limpiará cada fin de semana porque si no esa habitación sería un desastre.

- Si que parece una habitación de un aburrido anciano... -se burló el chico observando todo y Peter lo bajo con cuidado para encaminarse al baño de la habitación y de una cajita que tenía en el gabinete de las toallas abrió una caja que tenía ahí y saco el lubricante y condones.

Cuando regreso a la habitación descubrió al chico viendo un portaretratos dónde estaban los Hale antes de cambiará a adolescente y que Derek se fuera en busca de Kate.

- ¿Quienes son? -pregunto volteandose al sentirlo tras él.

- El niño soy yo, el chico es mi sobrino y a mi hija ya la conoces.

El asintió y dejo el portaretratos en su lugar para luego girarse y pasar sus brazos por los hombros del mayor.

- ¿Tienes alguna donde pueda ver cómo eras?

Peter asintió para luego dejar un rápido beso en los labios y separarse para de uno de los cajones del armario saco otro portaretratos.

- ¿Que harás después de verme como soy realmente?

Nolan se le acercó y dejo un beso en su mejilla para luego acercarse a su oreja y morderla suavemente para después susurrarle.

- Me harás tuyo las veces que quieras.

Se separó solo para ver la amplia sonrisa que adornaba los labios de Peter que le entrego el portaretratos dónde observó a Malia, el que supuso era el sobrino pero pensó que al igual que el chico a su lado había rejuvenecido por las mismas circunstancias y al final se centro en el ojiazul que mantenía a ambos abrazados y con una amplia sonrisa.

- Se nota que los amas mucho -dijo sonriendo para luego acomodar el retrato al lado del otro.

- Me gusta más como se ve allí que en ese cajón.

Peter se le acercó y lo abrazo por detrás para comenzar a besar el cuello del menor que no se negó y dejo que el mayor hiciera lo que quisiera, ya luego hablarían de lo que pasaría después.

Continuará...

03-05-22