Capitulo 7

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"Entonces, ¿por qué estamos desayunando en el Gran Comedor?" preguntó Iris mientras todos se sentaban alrededor de la mesa de Gryffindor, comiendo el desayuno que los elfos domésticos les habían proporcionado. Iris había preferido tener sus comidas en la Sala de los Menesteres, ya que le impedía tener que lidiar con las miradas de todas las personas que normalmente no podían verla.

"El domingo es el día del correo, y las lechuzas lo entregan en el Gran Comedor". Shirou dijo con un simple encogimiento de hombros.

"¿Y estás en la mesa de Gryffindor porque?"

"No hay reglas en contra de eso".

Las cosas no iban tan bien para Shirou en la casa de Hufflepuff, ya que mientras Tonks y sus amigos eran lo suficientemente amigables con él, los chicos de su mismo año no lo eran tanto, lo que hacía que la vida en los dormitorios fuera incómoda. Realmente no hablaba con ellos en las clases, no compartía ningún interés y no comía con ellos. Pero él no había hecho nada para que lo odiaran.

Shirou pensó que tenía que ver con las cosas que Snape había dicho, haciéndolos sentir que era una especie de impostor entre ellos, aunque Susan dijo que probablemente tenía más que ver con que estaban celosos.

No es que Shirou tuviera idea de por qué estarían celosos. No era como si lo estuviera haciendo mucho mejor que cualquiera de ellos en sus clases, excepto en Pociones. No era un fanfarrón y tampoco era rico.

Cuando Shirou dijo esto, Susan lo miró como si tuviera la cabeza espesa. Le preguntó a Iris por qué, pero ella no parecía tener idea de lo que Susan había querido decir y solo esperaba que no tuviera nada que ver con su estúpido estatus de celebridad.

Su fama se lo había puesto difícil a Iris, que se había sentido incómoda al instante cuando la gente se acercaba a ella como si la conocieran de toda la vida y la trataban como 'La-niña-que-vivió'. Incluso Hermione, que era una nacida de muggles, había comenzado su primera conversación con 'He leído todo sobre ti'.

Ni Shirou ni Iris tenían muchos amigos dentro de sus propias casas. Incluso Hermione solo estaba presente porque era amiga de Susan, así que cuando Shirou se sentaba con Iris y Susan se sentaba con Hermione, los cuatro estarían en el mismo lugar.

A Shirou no le importaba particularmente no tener amigos. No era como si ninguno de ellos tuviera realmente la misma edad, e incluso cuando Shirou realmente era un niño, la cantidad de amigos que había tenido se podía contar con los dedos de una mano, con dedos de sobra. Iris también parecía bastante acostumbrada a no tener amigos y estaba perfectamente satisfecha consigo misma. La relación entre los dos se parecía mucho a la de Shirou y Sakura, la de un junior y un senior. Por eso le había dado por enseñarle a cocinar cuando empezó a enseñarle a Rin.

También para ayudarla con Pociones.

A Iris no le había importado Rin, porque la chica japonesa no tenía ningún sentimiento de fanático en ella, pero Rin estaba muy lejos de llamarla de otra manera que no fuera 'Potter'. No es que hubiera dejado de llamar a Shirou 'Emiya'. Solo habían pasado dos días desde que se conocieron, por lo que era natural, en lo que respecta a Shirou.

Solo eran conocidos y compañeros de clase.

"Aquí vienen." Alguien en el pasillo gritó, y Shirou miró hacia arriba para ver cientos de lechuzas volando hacia el pasillo... de alguna manera. No vio ninguna ventana, y se suponía que el techo solo estaba encantado para parecerse al cielo exterior, sin embargo, los pájaros entraron volando.

Un pájaro dejó caer algo frente a Shirou. Una carta de Tom, deseándoles buena suerte, y un periódico muggle.

Shirou miró la primera página y no pudo contener una sonrisa muy parecida a la de Archer, mezclada con una mirada de disgusto.

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