C7•Perdoname.

334 28 12
                                    

Alma: ¿Que haces aquí?

Francisco: Volví, Alma perdóname.

Alma: Y crees que es así de fácil, me dejaste sola en el peor momento de nuestras vidas, no solo perdí a mi hijo sino a ti.

Francisco: Estaba mal por lo de Mateo, no aguante toda la situación.

Alma: ¿Y crees que yo si? Era tu hijo pero también el mío, yo también sufrí y mucho mas que tú porque me abandonaste ¿sabes dónde estuve hasta hace poco tiempo? ¿Lo sabes? (llorando y Javier la abrazó).

Verónica: No tienes derecho a estar aquí, te fuiste y no te importó nada, Alma casi se me va, sabes quién estuvo en la clínica cuando su depresión la llevo a querer matarse? Yo estuve!! porque tú no estabas, no tienes derecho a nada aquí.

Francisco: Se que hice mal, lo sé y me arrepiento, Alma hablemos por favor.

Javier: ¿No escuchó que tiene que irse?

Francisco: ¿Y tú quien eres?

Javier: El novio de Alma (en frente de él).

Francisco: ¿ Novio? Estás loca o que? Es un niño.

Alma: Pero me ayudó, cosa que tú no.

Francisco: Apenas murió nuestro hijo y ya estás con éste...niñito.

Javier: Muy niño pero si valoro a Alma.

Alma: Vete ya!! (llorando).

Francisco: Me voy a ir pero volveré, vamos a hablar Alma.

Alma: Ya lárgate!! Vete ya (llorando desconsolada).

Javier: Ya mi amor, cálmate.

Verónica: Será mejor que tome un calmante.

Javier: Si, vamos a tu recámara (ayudándola).

Habitación de Alma

Javier: ¿Estás mejor?

Alma: No lo sé (tomando su pastilla) aún no puedo creerlo.

Javier: Ni yo, después de irse no entiendo que hace aquí, pero tienes que calmarte ¿Si? (Alma asintió)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Javier: Ni yo, después de irse no entiendo que hace aquí, pero tienes que calmarte ¿Si? (Alma asintió).

Verónica: Necesitas estar tranquila (tomándola de las manos).

Alma: Voy a estar bien (quitando sus manos).

Verónica: Si, lo sé (bajo su rostro) estaré en mi recámara.

Javier: No te preocupes Vero, yo me ocupo (la abrazó) todo estará bien (en voz baja).

Verónica: Gracias Javi, de verdad.

Alma: ¿No tienes que ir a la clínica?

Javier: Si pero no iré, pediré el día, no pienso dejarte sola Alma, sabes que estos episodios pueden hacerte mal, ahora acuéstate, tienes que descansar.

Tu MiradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora