Tu Mirada

C8• Mis niños.

Días después

Verónica: Alma ¿Puedo pasar?

Alma: Mhm, no sabía que vendrías hoy.

Verónica: Como no voy a venir, si mira como estás, se que quieres proteger a Javier pero habla con él mejor, no dejes que Francisco haga de las suyas, tu amas a Javi y eras feliz, no te hagas esto Alma.

Alma: Y como hago (llorando) no quiero que Javier se quede sin empleo por mi culpa, sabes bien que el necesita trabajar.

Verónica: Pero él va a entender, por favor Alma entiende, mírame...nunca vas a ser tan feliz como con Javier y lo sabes, te salvó.

Alma: ¿Crees que deba hablar? ¿Y si no quiere verme?

Verónica: Iré contigo, vamos.

Alma: Vero, espera, quiero pedirte perdón de como te traté, para mí es difícil entender estas cosas pero yo lo único que quiero es que seas feliz y si tu felicidad es Olivia pues, hazlo yo te apoyo en lo que sea, así como tú siempre lo haces.

Verónica: ¿De verdad?

Alma: Claro que sí, tu siempre estuviste conmigo en las buenas y en las malas, no puedo dejarte así, yo no tengo problemas con eso, es que cuando te toca en la familia quizá a veces es difícil pero te apoyo.

Verónica: Gracias Alma (la abrazó) no sabes cómo necesitaba estás palabras.

Alma: Es más, podemos invitar a Olí a cenar y me platican de todo.

Verónica: Te adoro hermana, tanto tanto.

Alma: Y yo a ti (la abrazó).

Alma y Verónica se fueron en busca de Javier, necesitaba contarle todo y tenerlo a su lado de nuevo, fueron a su departamento pero no estaba, así que decidieron ir a la clínica...

En el coche

Verónica: ¿Porque no bajas?

Alma: Lo espero aquí mejor, en cuanto salga bajo.

Verónica: Ok, esperemos.

Alma: Está era su hora de salir, sino quizá entre y pregunte.

Verónica: Ahí sale!!

Alma: Si es él, pero...¿esa mujer? Lo estaba esperando, están juntos (se bajó del coche).

Verónica: Alma espera!! (fue tras ella).

Alma: ¿No que era solo una conocida de la prepa? ¿Que no te importaba?

Javier: ¿Que haces aquí?

Alma: Vine a buscarte para hablar pero veo que estás muy ocupado.

Andrea: No que ya no salias más con ella.

Alma: Tu cállate!!

Javier: No tengo que darte explicaciones, tu volviste con tu marido.

Alma: No entiendes nada, pero sabes que? Quédate con tu "amiguita", ahora se que todo era mentira, todo!! Jamás me amaste (lléndose).

Verónica: No lo puedo creer Javier (se fue al coche donde encontró a Alma llorando).

Alma: No tendría que haber venido.

Verónica: Ya no llores, fue mi culpa.

Alma: Tu no tienes la culpa de nada, él es el idiota.

Rato después en casa de Alma

Verónica: Mira como estás, tomate estás pastillas.