𝟬𝟴

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— ay, nos vió —susurró Mari.

— ¿qué? —mire al frente.

y si, ellos estaban viniendo hacia nosotras.
todo estaba yendo bien, tengo que pensar algo.

no estaba lista para hablar con él, mis nervios no me lo permitían.

— las veo en el salón.

fue lo último que dije para esconderme entre la gente, pero fue inútil.

note como Martin y Duki hablaban con María y Belén, pero Mauro miraba para todos lados, como buscando a alguien, su cara no tenía ninguna expresión y parecía estar cansado.

quería ir y saludarlo, pero mis nervios me jugaban en contra.

decidí alejarme y llegué a la alfombra violeta, justo se había ido alguien que no logré reconocer ya que estaba de espaldas, pero los conductores me miraron con una sonrisa.

y ahí fue cuando dije "la cagué".

Mauro

a lo lejos había visto a María, y ella me había visto a mi, la saludé desde lejos moviendo mi mano.

— ¿a quien saludas, amigo? —preguntó Martin.

— a la Mari, ¿vamos con ella?

— ¿no estábamos esperando a tu futura novia, madre de tus futuros hijos? —se burló duko.

— ya fue amigo, me dijo que no sabía si iba a venir como treinta veces, y ya van a ser las ocho —dije algo frustrado y empecé a caminar en dirección a María, seguido por mis otros dos amigos.

— pero no te pongas así, gato, seguro viene —habló martin.— quizás llega tarde, o quizás llegó más temprano que todos y ya está en el salón.

— claro, demu tiene razón.

— dejen de decir giladas. la llamé como diez veces y no me contestó ni una, seguro porque no sabía cómo decirme que no iba a venir.

— fua wacho que te haces la cabeza eh.

y no dije nada más ya que estábamos con las chicas, las saludamos y nos habíamos quedado hablando un rato.

lo que dijo Martin me daba vueltas en la cabeza, quizás si había llegado, pero la hubiera visto.

me quedé callado mirando todo el lugar queriendo que mágicamente aparezca, pero me había rendido.

— los espero en la alfombra —dije alejándome de ellos.

cuando llegue a la alfombra violeta me quedé congelado al ver quién estaba.

era ella quien estaba ahí.. hablando con Rober y Lucas, le estaban punteando el outfit y ella sonreía mirando su vestido de acetato brillante.

era corto, quizás diez dedos arriba de la rodilla, era un color rojo vino, y pegado a su cuerpo, no tanto, solo un toque. tenía su pelo negro planchado y unos aros redondos colgando de sus orejas.
los labios le brillaban por su labial, que tenía un color natural, era brillo con color rosita que apenas se notaba. sus pestañas y su delineado delicado la hacían ver más hermosa de lo que ya es, y luana no es luana sin sus Nike blancas, que hacían juego con todo en ella.

crucé mis brazos para mirarla más atentamente.
se ve que ella ni nadie se había percatado de mi presencia, aunque estoy lejos.

— tremendo outfit lulita —le dijo Lucas haciendo que ella sonría.— es muy vos.

— toda la comunidad de twitch sabe que no te gusta usar tacones —dijo Rober.

— no sé si toda peroo, team zapatillas siempre —dijo ella con esa sonrisa perfecta.

amor a distancia - 𝗹𝗶𝘁 𝗸𝗶𝗹𝗹𝗮𝗵 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora