Una historia única, la historia de Jane

Capítulo 5

Patrick me pasó a recoger a las 21:00h, llevaba puesto un vestido negro ajustado que me llegaba a la mitad de los mulos, también llevaba un moño y unos tacones plateados. Él llevaba puesto un traje negro y una camisa de color blanco.

Ya habíamos cenado y ahora nos encontrábamos en el parking del restaurante en el que había tenido lugar la cena.

-Jane creo que te tengo que contar una cosa.- dijo Patrick algo nervioso.

-Dime.

-En caso de que me pasará algo me podrías hacer un favor.

-Patrick me estas asustando, ha pasado algo, ido a por ti, es eso te han amenazando por haber dejado de vender.

-No no tranquila, respecto a ese tema esta todo bien.

-De verdad?

-Si. Ahora dime podrías hacerme un favor.

-Por supuesto.

-Cumple todo lo que ahí en esta lista.-Acto seguido me tendió un papel blanco.

-La puedo leer?

-Si, pero no ahora.

-Por qué?

-Por que me da vergüenza.

-No te creo Patrick teniendo vergüenza este es un echo histórico. -me burle. Desde que había conocido a Patrick nunca le había visto pasar vergüenza o que le importará lo que la gente opinará de él, tampoco se escondía ante sus trapicheos era algo de lo que mucha gente tenía conocimiento, pero de esta faceta nadie y eso me hizo sentir algo en el estómago, no sabría como describirlo, creo que me sentía afortunada.

-Por favor no te burles mi Jane, además como si tu no hubieras pasado vergüenza alguna vez.

Pasamos un rato más burlándonos el uno del otro, sobre todo yo ante la situación y al final Patrick me llevo a casa.

-Hasta mañana.-me despedí antes de cerrar la puerta.

-Hasta mañana.-repitió el chico mis palabras.

Cerré la puerta del coche y me encamine a casa. Una vez en mi cuarto ya con el pijama puesto, el maquillaje quitado y metida en la cama me acordé del papel que me había dado Patrick esta noche y lo cogí, lo abrí y empecé a leerlo.

LISTA DE COSAS QUE ME GUSTARÍA HACER:

-Tirarme en paracaídas.
-Viajar a Venecia.
-Ir a París con el amor de mi vida y sellar nuestro amor con un candado.
-Estar de fiesta 48h seguidas.
-Conducir sin rumbo a altas horas de la noche.
-Beber un litro de cerveza en 1 minuto.
-Aprender a hacer surf
-Hacer puenting
-Irme de mochilero por todo el mundo.
-Ir a Cuba.
-Darme un beso bajo la lluvia.

A medida que iba leyendo no me creía que Patrick tener una lista así pero también me di cuenta que había cosas que estaban tachadas.

-Independizarme
-Compartir piso con amigos
-Montar en globo
-Hacer sonrojar a una chica.
-Enamorarme

Esta última me tomo un poco por sorpresa, no sabía que Patrick se hubiera enamorado alguna vez, en verdad había muchas cosas de él que no sabía pero respetaba que él no quisiera hablar de ellas al igual que a mi tampoco me gustaba tratar ciertos temas de cosas que habían pasado en mi vida a lo largo de los años. 

***

Había pasado ya una semana de la cena con Patrick y casi no nos habíamos podido ver ya que él tenía que trabajar, así que, apenas habíamos intercambiado algunos mensajes.

La verdad es que todo iba bien, desde la noche de las carreras no había vuelto a ver a Zach por mi casa, solo me cruzaba con él a veces en los pasillos puesto que tampoco estaba asistiendo a filosofía que era la única asignatura que teníamos en común.

Y sentía como por el día mi mundo parecía que quería empezarse a poner bajo control.

Ahora me encontraba tirada en la cama sin hacer nada así que decidí llamar a Patrick para ver que turno tenía hoy y así saber si podríamos quedar para hacer algo, la verdad tenía ganas de pasar tiempo con él. Era como si a su lado todo estuviese bien, ni problemas, ni preocupaciones, era como estar en paz.

-Hola, a que se debe esta llamada tan grata?-dijo el chico al contestar la llamada desde el otro lado de la línea en un tono burlón.

-Es que me preguntaba a qué hora acababa tu turno.

-Uyy que estás tramando Jane.

-Nada por el momento.-reí.

Patrick también rió.- A las 22:00h.

-Vale, pasaré a verte un rato es que me aburro en casa.

-Ahora no hay nadie si quieres vente.

-Vale, en diez minutos estoy allí.

-Vale, te espero. Adiós.

-Adiós.

Cuando colgué mi teléfono me cambié. Me puse un pantalón corto vaquero negro y un top de tirantes también negro y todo esto acompañado de una chaqueta gris overside de color gris que me llegaba hasta un cacho por encima de las rodillas. Me puse mis gafas de sol encima de la cabeza como complemento, cogí la riñonera, me miré en el espejo y cuando comprobé que mi outfit quedaba igual que en mi mente salí en dirección al bar donde trabajaba Patrick.

Cuando llegué allí se encontraba dormido encima de la barra, menos mal que no había clientes. Entonces se me ocurrió una idea, entre al bar sigilosamente llene un vaso con agua y se lo eche todo por la cabeza. Inmediatamente Patrick se despertó.

-Se puede saber que pasa contigo.-gritó el chico exasperado.

-Nada.-Respondí entre risas.

-Jane a mi no me hace gracia.

-Pues a mi si.- y solte otra carcajada.

-Que esta pasando aquí y porque Patrick te encuentras mojado?-dijo una voz femenina detrás de mi.

-Porque a Jane a pensado que era buena idea echarme un vaso de agua por la cabeza mientras descansaba un poquito sobre la barra.

La chica se sentó a mi lado y rió ante lo que le había respondido el chico unos segundos a tras, sin embargo, esta vez yo no reí, me quedé con un semblante serio, no sabía porque pero la presencia de aquella chica no me gustó.

-A si por cierto ella es Andrea mi compañera de trabajo.-me la presentó Patrick.

-Hola, soy Andrea, encantada.-me saludó la chica.

-Igualmente.-Respondí en un tono un tanto cortante, haciéndola saber que su presencia me desagradaba por completo. - por cierto me tengo que ir que mi madre me mandó un mensaje cuando venía de camino para que la ayudara. Esta noche vengo entonces a las 22:00h cuando salgas de trabajar y vamos a tomar algo.

-Lo siento, después de hablar contigo llamo la jefa al bar y dijo que está noche cerraríamos nosotros porque la ha surgido un imprevisto y no va ha poder venir, así que no se cuando acabaremos, cuando eso te mando y mensaje y me paso por tu casa para ir a tomar algo si.

-No te preocupes ya quedamos en otro rato.-una vez dije esto me gire dispuesta a irme.

-Jane no te vallas así, no te enfades.

-No te preocupes esta todo bien ya quedamos otro día si? Además estarás cansado. Nos vemos adiós.

-Adi...-no acabe de escuchar como se despedía porque cerré la puerta del local y de un golpe y me fui.

Pasé el resto de la tarde fumando marihuana en el parque y cuestionandome distintas preguntas por ejemplo, porque no sabía de la existencia de la chica o porque me cabree al ver como hablaban Andrea y Patrick, tenía celos o simplemente es que la chica me caía mal como mucha gente... La verdad no tenía muy clara la respuesta ante estas preguntas pero de lo que sí me di cuenta es que me había portado mal con Patrick y tenía que pedirle perdón.