Capitulo 14: Por supuesto, todo esto es norm-

378 47 8
                                    

Íbamos entrando a la casa de mi madre, pero fuimos interceptados por una mancha rojiza bastante conocida

De hecho, esa mancha pasó a través de todos y cada uno de los miembros que iban en grupo hacia la puerta de la residencia

Todos menos uno en especifico

Pues, de un momento a otro, esa mancha tacleó a la lucario, que iba hasta atrás del grupo, platicando con la zoroark

Lo siguiente que escuché fue un golpe seco, un gemido ahogado y un azote en el suelo

—ay...— se quejó la lucarió con el poco aire que le quedaba en los pulmones después de ese gran golpe

Resultaba que ahora estaba apresada contra el suelo gracias a una lycanrock, la cual mantenía su mirada fija en su cuello y una malévola y afilada sonrisa

Analizando mejor la situación, la lycanrock se encontraba sentada encima de Lucy, bloqueando sus piernas y abalanzada sobre ella, negando el movimiento de sus manos al tener sujetadas sus muñecas entre sus manos

Instintivamente cubrí los ojos de mis pequeñas y me las llevé hacia adentro de la casa, de paso hablándole a mi madre para que las entretuviera un rato en lo que arreglaba la situación de afuera

Sumado a esto, también llevé conmigo a Hanna y les dije a las hermanas que me siguieran adentro

Una vez hecho esto, corrí velozmente hacia la entrada, solo para encontrar a Marie observando a la lycanrock con bastante enojo, probablemente a punto de atacarla

—maldita perra! Aléjate de mi..— comenzó a gritar la zoroark, siendo detenida abruptamente por la voz burlona de la lycanrock

—tu qué?, puedo oler a leguas que esta hermosura no te pertenece— contestó a modo de burla la lycanrock, sumado al hecho de acercar su rostro al cuello de la lucario

—Este embriagador aroma no es tuyo, sino del humano que está allá— hundió su nariz en su cuello

—Hola... amo...— carcajeó triunfante regresando su cabeza para observar a Lucy a la cara

Ella se relamió los labios

—Jane!— grité

Instantáneamente la lycanrock se giró hacia mí, liberando a la lucario y saltando a mis brazos

—papi!!!— gritó con alegría enroscando sus brazos alrededor de mí

—ella también?!— exclamó Marie atónita

A lo que tanto la lycanrock, como yo, le regresamos la mirada como si estuviera diciendo una completa locura

—No— dijimos al unísono

—Aunque me gustaría...— terminó la lycanrock sonriendo y volviendo a abrazarme

Mientras, Marie ayudaba a Lucy a ponerse de pie, preguntándole con algo de preocupación si no se había lastimado o si no tenía algo que le doliera

A todo esto, Lucy solo sonrió y le respondió que solo había sido el susto

Unos minutos después ya estábamos todos dentro de la casa, estaba muy diferente a lo que recordaba

Por ejemplo, al entrar, volteando hacia el lado derecho, fuimos recibidos por una sala de dos sillones visiblemente cómodos ubicados a los laterales de una mesita de centro de cristal, incluso si veíamos un poco más a la derecha se encontraba un hermoso ventanal que daba al patio

Una familia un poco raraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora