Cap 24: El Cuarto Día

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Cuando desperté, el fuego se había apagado. Wei Ying estaba durmiendo frente a mí, en el suelo, vestía sus túnicas, pero no sus prendas interiores ya que su pecho se veía muy descubierto. Por otro lado yo estaba... ¿tapado? al observar mejor, noté que tenía las prendas interiores de Wei WuXian sobre mí y encima de eso mis túnicas.

Por un momento me enojé y casi lo confronté, pero luego vi mis prendas interiores: estaban maltrechas, sucias y olían mal. Las de Wei Ying estaban en mejor estado y a pesar de haber sido sumergidas en el estanque, no tenían tanto olor a sangre como las mías.
Así que me vestí y lo contemplé por un rato. Mientras dormía, pude fijarme que si bien últimamente venimos comiendo mal, estamos sucios y exhaustos... Wei Ying es hermoso.

Me levanté con mucho trabajo ya que mi pierna estaba entablillada, recogí algunas ramitas y al regresar mi acompañante también estaba despierto. Se encontraba sentado y muy callado.

- Lo he estado pensando. -Soltó de pronto y volteó a mirarme-. Si nadie viene a rescatarnos en tres días, nosotros deberíamos encargarnos del monstruo. -Acto seguido se levantó a ayudarme, tomó las ramas de mis manos y me ayudó a sentarme.

- Estaba pensando en que no es un monstruo. -Me miró sin comprender- ¿A qué se parece?

- ¿A una tortuga?

- Mhm. Hay una criatura divina que adopta una forma así.

- ¿La bestia divina Xuanwu? -Cuestionó un poco incrédulo y vino a mi lado a sentarse.

El Xuanwu era una bestia divina, una combinación entre tortuga y serpiente; una deidad del agua.

- ¿Pero como puede ser que una deidad luzca así, con colmillos y que coma carne humana? -se preguntaba Wei Ying.

Suspiré.

- Por supuesto que no es un Xuanwu divino. Es el resultado de uno semi-completo. -Expliqué-. Se terminó transformando en un yao, nunca llegó a la divinidad. -Wei Ying me observaba sin comprender-. Es el "Xuanwu Falso de la Mortandad".

- La criatura que Wen Chao quería que capturáramos ¡¿era el Xuanwu Falso de la Mortandad?!

- Su tamaño parece ser mayor que el registrado en los libros pero sí, yo creo que es eso.

- De ser así, han pasado 400 años ¿no te parece que es lógico que haya crecido? -Expresó con autosuficiencia.

Finalmente volvimos a pactar que si nadie venía en tres días, nos encargaríamos del Xuanwu nosotros mismos.


Durante estos tres días, traté de descansar para recuperar mi pierna y en un cierto punto funcionó: mi herida no ha empeorado ni se ha infectado, de acuerdo a Wei Ying, hasta está mejorando levemente. Por otra parte, el no alimentarnos nos lleva a debilitarnos, pero aún conservamos energía espiritual.

Estuvimos explorando la cueva y a nuestro enemigo: ya no quedaban cadáveres, el Xuanwu se los llevó todos dentro de su caparazón, ya que los guarda y los come cuando así desee. El primer día sí escuchamos ruidos de masticación pero ahora fueron cambiados por ronquidos. Así que Wei Ying aprovechó para buscar el agujero por el cual escaparon todos, pero no lo encontró; de seguro el cuerpo de la bestia lo está cubriendo.

También reunimos todos los arcos y flechas que encontramos en lo que fue el campo de batalla. Wei Ying hizo manojos de flechas, unía cinco o seis y las ataba. Yo saqué todas las cuerdas de los arcos y las até en cada extremo. Ya que no poseíamos nuestras armas, debíamos improvisar y lo que me pareció mejor, fue intentar mi ataque de Acordes Asesinos. Es una técnica única de la Secta GusuLan y quienes pueden utilizarla son aquellos que usan el guqin. Se basa en volver las cuerdas filosas y muy resistentes para poder hacer daño y cortar al enemigo.

- Su caparazón es muy duro. -Expresé con tranquilidad, sabiendo que Wei Ying también conocía lo que iba a decir-. Debemos...-

- Matarlo desde adentro. Lo sé. -Sonrió y me observó.

- Mhm.

- En lo que no estoy de acuerdo, es en que uses esa técnica. -Se puso su mano en la barbilla y quedó meditando- Su caparazón es duro, por lo tanto deberías entrar, para poder realizar una técnica complicada y en tu estado actual... -Me observó preocupado- Tu herida de la pierna aún no sanó ¿cierto? -Otra vez, su cara de superioridad.

Lo sé, pero tampoco quiero que se exponga impudentemente por mi culpa.


El cuarto día llegó y nadie vino a rescatarnos, así que decidimos atacar. Obviamente Wei Ying era quien al final iría a meterse dentro del caparazón del Xuanwu.

Habíamos llegado a la conclusión de que mientras durmiera, uno de nosotros podría meterse en el caparazón y analizar dónde su piel es más fina para luego atacar ahí. Yo tengo mi ataque de Acordes Asesinos, así que me resguardé, listo para atacar.

Wei Ying se zambulló y nadó hasta nuestro enemigo, luego entró al caparazón. Durante un rato, fue todo normal y los ronquidos se seguían escuchando pero de pronto... la cantidad de energía resentida ¡fue impresionante! Me sentí completamente impotente. Claramente algo malo sucedía y no podía ayudarlo. ¿Estaría bien? ¿Qué estaría ocurriendo allí dentro?

Unos minutos más tarde, el enemigo comenzó a sacudirse al igual que el agua, pero ni Wei Ying ni su cabeza se hicieron presentes en la superficie. Me preparé porque sabía que en cualquier momento lo harían y así fue. La cabeza de la bestia salió a la luz, Wei WuXian estaba debajo de su boca; le había clavado una espada en la mandíbula.

- ¡Lan Zhan!

Era mi momento. Utilicé mi técnica de Acordes Asesinos. Primero lancé la cuerda y la clavé firmemente en su cuello para poder aferrarme y saltar hasta su coraza. Una vez allí, traje de vuelta la cuerda y volví a lanzarla para enredar su cuello. De ahí en más fue una lucha de prevalencia y supervivencia.

Wei Ying seguía aferrado a la espada y yo, con todas mis fuerzas tiraba de la cuerda para apretarla alrededor del cuello de la bestia. El Xuanwu luchaba y se movía frenéticamente, de seguro nunca estuvo tan cerca de su muerte en sus 400 años.

De pronto sentí un gran impulso de energía resentida: Wei Ying. Al observarlo, él temblaba débilmente, estaba muy pálido, algo estaba mal.

- ¡Wei Ying! -Grité realmente preocupado.

Pero él no dijo ni hizo nada. Yo solo utilicé todas las fuerzas que me quedaban y el cuello del Xuanwu cedió y la criatura dejó de moverse.


Yo salté y volví a la tierra firme pero Wei Ying cayó como peso muerto hacia el agua. Enseguida me sumergí: lo coloqué en mi espalda y lo fui sacando hasta la orilla, por suerte estábamos cerca.

Lo acosté en el suelo pero no reaccionaba ¿A caso él...? ¡No WangJi! ¡No pienses eso! ¡Wei Ying no me dejes! Rápidamente acerqué mi mano para tocar su mejilla pero antes de que hiciera contacto:

- ¿Qué pasó? ¿Está muerto? ¿Lo matamos? -Él estaba un poco desorientado.

- Sí, lo está. -Respondí serio.

- Lan Zhan -Pronunció serenándose-. Acabo de oír cientos de voces gritando en mis oídos. Ellos... me dejaron inconsciente. -Tomó aire- Lan Zhan ¿esto es un sueño?

- No.

Wei Ying ¿qué demonios te sucedió? Estaba oficialmente preocupado. Sentí una gran cantidad de energía resentida y ahora Wei WuXian estaba... así.

- ¿Sabes Lan Zhan? -Sonrió con un poco de esfuerzo- Jamás pensé que vería al Segundo Amo Lan tan preocupado por mí.

¡Por supuesto que estoy preocupado por tí!

- No te preocupes por mí -Intentó sonreír- Estoy bien.

Al intentar pararse sus fuerzas lo abandonaron y sus piernas cedieron, lo atrapé justo antes de que cayera nuevamente. Me paré delante de él para detenerlo.

- Estoy bi...-

Se desmayó. Wei Ying cayó sobre mi pecho. Lo sostuve bien y lo acomodé en el suelo, luego prendí una fogata y me quedé a su lado hasta que me dormí.

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