Nunca en mi vida me sentí tan abatido ni tan perdido.
Unos días más tarde y con mi pierna aún rota, me encontraba en Qishan. Al llegar a la Ciudad sin Noche, noté que fui el último: Nie HuaiSang, Jin ZiXuan, Jiang WanYin y Wei Ying ya estaban allí, junto a discípulos de sus sectas. Este último trató de saludarme, pero algo me decía que en esta situación, cuanto más lejos estuviese, mejor.
Había discípulos de la secta Wen a lo largo de una enorme escalinata y en el medio de la misma, se encontraba Wen Chao con con una mujer que jamás había visto en mi vida y un hombre alto y corpulento: Wen ZhuLiu. Él era conocido como "la mano derrite núcleos" pues dicen que tiene el poder de derretir los núcleos dorados, además de ser un excelente cultivador, por ende, es el encargado de proteger al menor de los hijos de Wen RouHan.
Wen Chao se pavoneaba como el Amo de todos nosotros. Repulsivo.
—Ahora que están en Qishan, deberán seguir las reglas. —tenía sus manos en la espalda y caminaba de un lado a otro— En primer lugar, durante el adoctrinamiento, a nadie se le permite llevar armas.
¿Cómo? Bichen es... es como si fuera mi brazo y privar a un cultivador de su espada... Claramente no fui el único anonadado y tomado por sorpresa, todos nos veíamos confundidos. ¡Wen Chao es un...!
—Bien, ahora de a uno van a ir entregando sus espadas. —Pronunció con malicia Wen Chao.
—Un cultivador nunca renuncia a su espada —dijo un discípulo— ¡Me niego!
—Nunca antes escuchamos que íbamos a tener que dejar nuestras espadas —expresó otro— el Clan Wen es tan sucio.
—¿Quién dijo eso? Que dé un paso —demandó Wen Chao— es por discípulos así, que desconocen la obediencia y los modales, que la Excelencia ha decidido adoctrinarlos. —Ahora sí nos miraba de frente y su expresión de soberbia era sumamente repulsiva— Ahora bien, si estas actitudes no se corrigen desde el principio, algunos podrían intentar desafiar a la autoridad. —Amenazó.
Wei Ying... solo espero que no hagas ninguna locura, el Clan Wen no es un enemigo al cual se le deba tomar el pelo y menos en estos momentos.
—¡Confisquen sus espadas!
Cuando Jin ZiXuan se rehusó a dar su espada, Wen Chao lo tomó como una rebeldía. Por suerte, una de las discípulas del Clan Jin salió a decir unas palabras para calmar las aguas.
—Está bien —Accedió Wen Chao— esta vez te perdonaré, pero la próxima vez que desobedezcan, el castigo será severo. —Amenazó y observó a Wen ZhuLiu para dejar en claro su punto.
El primer mandamiento fue aprendernos de memoria los principios del Clan Wen. Sencillo. Lo difícil va a ser comportarnos frente a Wen Chao cuando él se pasa faltándonos el respeto a nosotros y a nuestras sectas.
No ha sido sencillo, parece que Wen Chao está especialmente ensañado con Wei Ying (no puedo decir que no lo entiendo), Jin ZiXuan y conmigo. Lo he estado pensando y nosotros, junto con XiChen, fuimos quienes quedamos en los primeros luagres del último Concurso de Arquería ¿será que aún nos tiene resentimiento por eso? Yo solo trato de meditar antes de cada encuentro para prevenir acutar como Wei WuXian normalmente haría.
Unos días más tarde, estábamos otra vez frente a las escalinatas con Wen Chao sentado en uno de sus descansos. Él nos ordenó que repitiéramos los principios del Clan Wen en voz alta: me negué y Jin ZiXuan también. Para mi no sorpresa, Wei Ying pensaba hablar. Como ya es costumbre a esta altura, siempre somos nosotros tres los elegidos. Wei WuXian comenzó a caminar y a estirarse, haciéndonos perder el tiempo, esto me huele mal.—¡Wei WuXian! ¿Lo harás o no? —Wen Chao comenzaba a perder la paciencia.
—No matarás —Wei Ying continuaba caminando de un lado a otro—. No pelearás, ni serás lascivo. No gritarás ni deambularás de noche por los corredores.
No puede ser...
—No acosarás a los débiles mostrando tu fuerza o molestando a otros. No faltarás a clase ni te irás temprano. No te sentarás mal.
—¡WEI WUXIAN! ¿Cómo osas pronunciar los principios de la Secta Lan aquí en Qishan? —Definitivamente le había colmado la paciencia—. ¿Quieres morir?
—¡Ay pero que tonto soy! —Pronunció Wei Ying, claramente actuando— Entendí mal.
—¡BASTA! ¿Crees que puedes jugar conmigo? —Wei Ying lo había hecho enojar y solo le costó cinco minutos— ¡Soldados! Llévenlos a la huerta. —Comandó. —A cargar el estiércol.
¿Cómo se atreve? Está bien que Wei Ying no sea un heredero y es cierto que es un discípulo de la secta Jiang, pero es sabido que para el Líder Jiang, es como un hijo. Es indignante lo que nos pide que hagamos y no tiene nada que ver con mejorar nuestra cultivación o habilidades. Solo hace esto para denigrarnos.
Más tarde Wei Ying, Jin ZiXuan y yo nos encontrábamos efectivamente en la huerta, cargando estiércol. La situación era impensada y bajísima. Aún así, parecía que Wei Ying insistía en hablarme.
—Lan Zhan ¿te alcanzo una pala?
Sigo pensando que estaré mejor si no le hablo: no puedo meter a mi Secta en más problemas.
—Lan Zhan, ¿es verdad que Wen Xu fue a la Profundidad de las Nubes?
Aún me duele todo lo que pasó, no estoy listo para hablar de eso.
—¡Lo sabía! Algo malo sucedió.
¿Cómo puede saberlo si me he esforzado por no hablarle y por caminar normal?
—Lan Zhan, cuéntame.
Me tomó del hombro y antes de que pudiera soltarme, le pegaron un latigazo en la mano.
—¿Qué se están secreteando? —Era Wen Chao— Lo pueden decir en voz alta.
—Le decía a Lan Zhan que tu huerta olía familiar —se le acercó. No lo hagas Wei Ying—. ¿No eres tú quien huele así?
—¡Cállate! —Wen Chao quiso pegarle nuevamente con el látigo, pero Wei Ying lo agarró y lo impidió.
—Señor Wen, —eso se escuchó a amenaza— no me pongas a prueba.
En ese momento lo ataron sus discípulos, Wei Ying no tenía cómo moverse. Fue más fuerte que yo, cuando vi que Wen Chao le iba a dar con el látigo así, bajo esas circunstancias, me puse en medio. El maldito terminó pegándome en mi pierna rota.
—¡Basta Wen Chao! —fue Jin ZiXuan.
Nuevamente quiso pegarle a Wei Ying y detuve su ataque.
—Suéltenlo. —dijo finalmente.
Yo me acerqué para ver cómo se encontraba, si se había hecho algo.
—Wei WuXian, tú y yo tendremos una charla —se acercó a nosotros— quizás quieras preguntarle a Lan WangJi qué sucedió en la Profundidad de las Nubes.
No, eso...
—Quizás así comprendas el poderío del Clan Wen.
La forma en la que Wei Ying me observaba me partía el alma.
—Bien, llévense a Wei WuXian al calabozo.
¿Cómo? ¡No! Volví a interponerme.
—Señor Lan ¿quiere acompañarlo? Nuestros calabozos son amplios.
Wei Ying me detuvo y me hizo una seña para que me quedara. No pude más que observar mientras los discípulos del Clan Wen se lo llevaban... ¿Qué le harían? ¿Hasta dónde llegará Wen Chao en esta situación? ¿Estará bien? Por más que quiera disimular que no me preocupa Wei Wuxian, no podía evitar lo que siento.
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holas!
Al final mi bro dio negativeo del coronavirus, pero sigue trabajando en casa así que se me complica lo de la compu :/ (por eso la imagen) ya volveremos a las buenas épocas
que pasen lindo :)
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Recuerda Tus Palabras
FanfictionEs un FANFIC, no es la traducción de nada. Es una mezcla entre el drama y la novela vista desde el punto de Lan WangJi. DISCLAIMER: Los personajes no son mios, son de MXTX. El cover me lo hizo @JazeeraGazer01 MUCHAS GRACIAS!! :D