El Misterio De Veronika Hoult+18 ✓

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-¿Sabes porque prefiero el vino? Me recuerda a la sangre.-Daniel Steils.

NA: ¡Aviso! Este capítulo tiene contenido +18, si no te gusta puedes saltar el capítulo y esto no va a interferir en los demás. Este es el capítulo más largo en lo que va de historia así que les pido que por favor le den apoyo.

¿Clan? Como que clan.

Pero bueno. Ahora mismo me encuentro junto a Valeire arreglandonos para la fiesta de bienvenida o algo así.

Esta gente está loca.

—Veronika, tienes buen cuerpo—Dice Valeire mirándome de arriba a abajo. Sus palabras aunque no quiera me suben el autoestima, soy una chica de piel morena algo clara desde mi nacimiento. Soy alta, aunque es estereotipo de belleza aquí en este maldito pueblo es una chica pequeña nalgona, tetas súper grandes y con una cintura extremadamente pequeña. No lleno el estereotipo, mi piernas son largas y delgadas, mi cintura es pequeña por mi tipo de cuerpo mis senos también son pequeños y mis glúteos no son los más grandes. No soy una tabla de planchar pero mis glúteos no son grandes y mis senos no son unos melones. Pero aunque no lo sea llevo mi cuerpo con elegancia y estilo propio, algo que muchas no hacen. Me encanta mi cuerpo, me encantan mis caderas y mi cabello.

Cargo puesto un vestido negro con un escote en forma de corazon, pero de tirantes apretado arriba y en la parte de la falda, el vestido tiene unos detalles a los lados que parecen rollitos de tela que me marcan muy bien las caderas, unos tacones negros punta fina y un maquillaje sencillo con algo de rimel un delineado y en mis labios un rosita transparente con algunos brillitos. Mi cabello lo cargo suelto después de hacerme unos moños en el para que al soltarlos parezca ondulado.

Cargo unos pendientes de diamantes -que no pregunten de dónde los saque- a juego con un hermoso collar, ambos de color plateado realzando el negro.

En mis piernas cargo unas mayas de huecos negra, y en los brazos unos guantes de cuero que llegan hasta arriba de mis codos.

—Gracias, tu tampoco estas mal—Le digo observándola de arriba a abajo. Esta chica llena completamente el estereotipo de aquí y además lo complementa con sus grandes caderas, grandes piernas, piel completamente blanca y su cabello rubio.

Lleva puesto un vestido azul electrico muy fuerte ceñido al cuerpo con escote en forma V y unos tacones negros punta Dorada, en su cuello lleva un largo collar de color dorado con un dige de trébol.

—Es que quien no diria que estas buena tienes un buen culo— ¿A caso es lesbiana? Y ¿Cuál culo que no lo veo?

—¿Gracias?

—De nada es una observación de un punto de vista diferente—Dice encogiendose de hombros mientras se mira al gran espejo de su habitación para arreglar su cabello rubio liso desde su inicio hasta las puntas.

Mi cabello tiene una ondulación natural cerca de donde un día hubo un flequillo, gracias a ese fleco se me marca la onda a los lados de mi cara, es a veces muy difícil acomodarla. Ojo, solo en los días que se pone rebelde, otros días se ve completamente poderoso y sexi. Exactamente como se mira ahora.

—Oh, si lo explicas así...—Le respondo.

—No mentira, si estas bien...—Se acerca a mi y comienza a susurrar— Es que desde que nos estamos vistiendo hay alguien en la puerta mirando— Dice señalando con la mirada hacía la puerta. Oh no, triste por el mirón.