La novia de mi hermano 1 [Disponible en físico + Extras]

36 - Estrategia

NOTAS

¡Feliz sábado, familia!

Esta semana les he mimado mucho, ¡eh! Seguro que este capítulo también les toma por sorpresa. Soy feliz con que se diviertan. A mí se me acumulan los comentarios para leer, así que me espera una divertida maratón.

¡Besos y apretujones!

PD: Me encanta Laura en modo... ¡ja, ja! ¡Bah! En todos sus modos.

--------------------------------------------

Estrategia

—Y recuerda que tú eres una alumna ejemplar. Compañías como la de Ana no te harán ningún bien. Por algo ella está repitiendo curso y tú sacas excelentes. ¿Sí? Nos vemos el próximo día. —Así concluyó el profesor de Historia su supuesta charla reflexiva en el pasillo cuando terminó la clase. Me limité a asentir con la cabeza y a disculparme, pero deseaba rebatirle. Dado que mi imagen se habría visto dañada por contestona, me juré que le callaría la boca a ese señor ayudando a Ana a brillar como el diamante que es.

Ani seguía preocupada por mi expulsión de la clase. Temía que el profesor hubiera tenido la mano dura conmigo como la tuvo con ella, pero la tranquilicé con la verdad. Yo estaba orgullosa de mis ocurrentes vivencias con ella, y eso fue motivo de más risas traviesas hasta que empezó la clase de optativa. Ani se marchó sin mencionar algo sobre la foto, pero sé que había tenido efecto en ella porque me estuvo mirando los labios hasta el último momento.

—¡Eh! ¡Lau! ¿Lista para la hora más kawaii del día? —Por ahí viene Aura, excesivamente sonriente como si hubiera ganado el premio internacional a miss Parlanchina del año.

—Sí. —Ya lo creo. Hoy le daré lo que quiere para endulzarla: mi atención. A cambio, ella jugará un papel muy importante para mí.

—Tenía tremendas ganas de que llegara esta clase para estar contigo. —Ocupa el puesto de Ana como si le usurpara el trono—. Tengo que hablarte de mil cosas. —¿Solo de mil? Parece poco—. ¡Ah! Pero primero lo primero. Eres súper kawaii. Al final, visitaste mi perfil de Instagram. Lloré de emoción cuando vi en las notificaciones que les dabas a "me gusta" a mis publicaciones. O sea, fue un "¡Dios! A Laura Larson le gusta mi perfil". Mis amigos no me querían creer. Tuve que enviarles captura. Me sentí como una privilegiada. —No debí haberlo hecho.

—Me gustaron tus memes. —Cuatro palabras mías por cada cincuenta o más suyas. Esta hora será larga, pero tendrá sus frutos.

—¡Lo sabía! ¡¿A que son kawaiis?! No todos son producto de mi creatividad, pero siempre cito a las fuentes originales. ¿Ves? Nos hacen gracia las mismas cosas, algo más que tenemos en común. ¡¿Y viste mis cosplays?!

—Sí. Muy bonitos todos. —Lo bueno es que no tengo que esforzarme para contentarla. Cuatro palabras y una sonrisa refuerzan su entusiasmo, aunque no le estoy mintiendo.

—¡Dios! Hoy es el mejor día de mi vida. —¿Qué desayunará para ser tan exagerada? No había conocido a alguien tan extremadamente enérgica. Seguro que la máquina de cafés aparece seca todas las mañanas. De hecho, seguro que la amamantaban con café durante la lactancia—. ¿Te has disfrazado alguna vez? Seguro que sí. A ti todo te quedaría de maravilla. Tienes cara de chica anime. Lo digo porque eres súper kawaii, la más linda de todo el instituto. —Ese elogio va con segundas. Lo sé por la pausa que realiza y por cómo se intensifica su mirada más de lo que está.

—Gracias, Aura, pero no es para tanto.

—A lo mejor me quedé corta... —La entrada de la profesora en el aula la interrumpe.