Perfección

El Partido a ganar.

Estoy segura de que tengo ojeras, casi no pude dormir otra vez, cada que cerraba los ojos su cara en la pista, viéndome con enojo, con tristeza y decepción. Y luego viene a mi mente el recuerdo de su rostro cuando me besó, y duele, duele como nunca creí que podía doler querer a alguien.

Desenredo mi cabello y queda algo esponjoso, no quiero atarlo, así que lo llevo suelto.

Entro a clases y como de costumbre me siento con Gorya.

Todos murmuran, pero esta vez no es sobre mí, están ansiosos y felices.

-De que hablan todos? -Pregunto con curiosidad a Gorya.

-Del partido de hoy, vendrá otra escuela a jugar con la nuestra, básquetbol femenino, y todos dicen que Au… -Gorya se detiene como si ese nombre fuera prohibido.

-Aum vendrá a jugar, qué bueno, es una gran deportista, nuestro equipo tendrá que dar mucho
para vencerla - Digo.

Gorya asiente ante mí, no tengo nada contra Aum, solo al recordarla veo a MJ besándola y el estómago se me revuelve, pero sé lo guapa que es, puedo reconocerlo, quizá si MJ la hubiese conocido antes, lo nuestro nunca hubiera pasado.

Pasan las clases una tras otra, y yo paso mis apuntes, no recuerdo ni la mitad de lo que me han hablado.

La hora de receso llega y todos salen apresurados al partido.

-Gorya iré a la cafetería antes, si quieres puedes ir. -Digo

-Thyme me ha invitado a verlo, así que me adelantaré -Dice sonriendo y yo asiento.

Camino hacia la cafetería de la escuela

-Quiero un Café caramelo -Pido y la persona de la barra asiente

-¿Y/n? -Escucho una voz a mi lado

-¿Entrenador? -Pregunto con sorpresa al encontrarme de frente con el ex entrenador de mi equipo de básquetbol en Estados Unidos, hace tiempo, que se fue de la escuela por un mejor trabajo.

-Qué pequeño el mundo, sabía que eras de aquí, pero no imaginé encontrarte estudiando donde ahora doy clases. -Dice amablemente

-Pues yo tampoco espere encontrarme con usted -Digo sonriendo mientras me dan mi café.

Me saluda dándome su mano

-Bueno profesor, nos vemos luego...

-Porque no nos acompañas al partido de hoy Y/n, en Estados Unidos fuiste de mis mejores alumnas y podrías
ayudar-Dice tomándome del hombro y conduciéndome hacia el gimnasio donde tendrá lugar el partido, ya no puedo huir ahora que hago.

El profesor me conduce hacia las gradas y se sienta a mi lado, que fuera de sitio me miraré tomando un café en el gimnasio, completamente esto no estaba en mis planes.

El equipo de nuestra escuela se forma al rededor del profesor, viéndome extrañadas, y yo no suelto mi café, porque lo necesito, para darme energía, no me siento viva sin café.

El entrenador les explica las jugadas y voltea a verme como si esperara mis sugerencias o aprobación.

El gimnasio está lleno, todos han venido a ver el partido, o a Ella.

El equipo contrario entra y Aum liderándolas parece que se lleva bien con todas ellas, es alta, esbelta y simpática, el estándar perfecto de mujer.

-¡Profesor! -Una chica de nuestro equipo corre asustada hacia el entrenador

-¿Qué pasa? Tranquila.

-Zara no puede jugar, se ha lastimado en los vestidores -Dice mientras detrás de ella llegan dos chicas, una cargando a la otra que cojea con el pie claramente lastimado