You Are So... [ChanSoo]

Capítulo diez: Chanyeol da el paso.

Junio terminaba y como todos los fines de mes en Cotton se respiraba un aire tenso y vicioso. Kyungsoo notó a sus compañeros de trabajo más nerviosos que de costumbre. Estaban terriblemente callados, con expresiones cargadas de ansiedad y estrés. Como no sabía lo que estaba pasado, le preguntó a Chanyeol.

—Es fin de mes —le dijo Chanyeol, como si eso respondiera todo.

—¿Qué se supone que significa eso?

—Junmyeon invita a cenar al departamento de la revista más vendida del mes. Es como una recompensa por el buen desempeño. Están esperado que Riku vuelva de la junta para saber el resultado.

—Pero eso es bueno, ¿no? ¿Por qué están tan preocupados? —preguntó Kyungsoo.

Chanyeol se recargó en el respaldo de su silla y comenzó a girar un bolígrafo entre sus dedos.

—Bueno, los otros departamentos deben estar tranquilos, pero para nosotros la situación es más crítica. Softcore lleva cuatro meses sin ganar, es la peor sequía de los últimos dos años.

—Pero son la revista de entretenimiento más vendida —dijo Kyungsoo, frunciendo el ceño—. Al menos eso dice el presidente.

—No importa que seamos la revista de entretenimiento más vendida de entre todas si nuestros números internos no aumentan —explicó Chanyeol—. GreenGreet y Stargazing avanzan mientras que nosotros seguimos estancados, eso hiere el orgullo. 

—No lo entiendo.

Chanyeol soltó una risa entre exasperada y divertida y se colocó el bolígrafo detrás de la oreja.

—Eres tan insensible. ¿Por qué viniste a trabajar aquí si no te emociona?

—En realidad apliqué para el mismo cargo pero en el departamento de Stargazing —confesó Kyungsoo—. No había vacantes, así que me ubicaron aquí.

—¿Qué tiene de bueno Stargazing? Son unos estirados.

—Bueno, supuse que era más interesante proteger de filtraciones a una investigación sobre un nuevo medicamento contra el cáncer o una teoría sobre las dimensiones paralelas, que proteger información como... No sé, el nuevo color de cabello de un idol o el comeback de un grupo.

Chanyeol pareció ofendido. Y dolido.

—Qué pedazo de snob eres, Kyungsoo.

—¿Qué? ¿Snob?

—Sí, un snob de la información. Escribir sobre idols no es todo lo que hacemos aquí, ¿alguna vez has leído la revista?

Algo así. Kyungsoo había pasado horas leyendo los artículos de Chanyeol en línea. No se lo iba a decir, obviamente.

—No —respondió.

—En ese caso, no me extraña que tengas una opinión tan mezquina.

Kyungsoo abrió la boca para contestar, pero justo entonces Riku apareció por el piso llamando la atención de todos. Sostenía una carpeta en la mano y tenía una expresión muy seria. Su mirada recorrió el lugar y finalmente una sonrisa estalló en su rostro.

—¡Ganamos! —informó, alzando una carpeta en el aire.

Se alzó un suspiro colectivo de alivio, y luego un barullo de gritos, risas y aplausos. Por el aire volaron papeles y bolígrafos.

—Escuchen, escuchen —dijo ella, leyendo la hoja en sus manos—. Softcore tuvo un crecimiento en sus ventas del 60%, con 3 millones de impresiones nacionales y 1.5 millones en el extranjero. Digitalmente obtuvimos 63 millones de lecturas y fuimos leídos en más de 12 países.