008

1K 74 5
                                    

—Hasta el día que mueras?

—Si, hasta ese día

—Y si muero primero?

—...

—...

-No dejaré que eso pase.

No se lo había puesto a pensar antes pero...
Si ya no tuviera a Aoi algo de él cambiaría?

Si, definitivamente lo haría.

— No me quiero casar ahora.

— Yo no hable de casarnos.

—Hablas de un noviazgo?

—Habló de una promesa en la que estemos juntos.

—Solo una promesa?

—Si, y si quieres también tu cosa del noviazgo.-

—¡Pues bien, tampoco quiero algo suelto!

Algo suelto? Claramente Aoi no entendió lo que Inosuke quería decir con "promesa".

Para Inosuke la promesa es sagrada así que más que una palabra soltada al aire, podía llegar a ser más fuerte que un noviazgo o un matrimonio.

La "promesa" sería como si los dos demostrarán sus sentimientos, la revelación del hilo rojo que compartian, aquella aceptación de la nueva vida que ellos estaban dispuestos a compartir.

Pero, al mismo tiempo que los pétalos de cerezo caían, sus mentes fueron creciendo y madurando, entendiendo que algunas cosas que se dejaron para después, se debían realizar.

Esto se vuelve más difícil cada día.

Estaba recostado en las piernas de Aoi mientras ella jugaba con su cabello.

Esto duele..

Pronto Inosuke tendría que irse de la finca, esto antes no era una decisión difícil pues sus amigos y él solo llegaban a la finca mariposa de visita.
Pero, tras el reciente matrimonio de Kanao con Tanjiro Aoi se quedaba sola con sus tres ayudantes.

Siempre había sido así, el grupo de amigos venía de visita unos días y luego volvían a la casa de los Kamado, pero...

Sus últimas despedidas se hacían cada vez más difíciles.
Ya habían pasado unos años desde que Aoi e Inosuke formalizaron su noviazgo pero llegó un punto en el que ninguna carta bastaba para llenar el vacío de no tener al otro cerca.

Sus amigos se preocupaban cada vez más al ver cómo Inosuke después de dejar la finca cambiaba completamente.

Algunas noches no tocaba el plato de comida o no salía de su habitación, solo le volvían los ánimos cuando emprendían otro viaje directo a la mansión.Y ni hablar de cuando llegaban, pero por más que disfrutarán el tiempo juntos este se terminaba y se volvía a repetir el ciclo.

Un día Tanjiro no aguanto más y se lo dijo.

—Pidele matrimonio. Así como yo se lo pedí a Kanao o como Zenitsu se lo pidió a Nezuko.

—¿Y qué con eso?

—Bueno podrías vivir en la finca mariposa, ayudar a Aoi y formar una familia con ella.
Ya va siendo hora de que tu formes tu vida separado.

— Y si no me acepta? Y todo se acaba.

— Porque pasaría eso? Ya son pareja desde hace mucho tiempo.

— Una vez me dijo que no quería hacer eso.

— Pero eso fue hace algún tiempo. Tú y yo sabemos que muchas cosas han cambiado.

¿Ésto es el amor?// InoaoiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora