Capitulo 8

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El rostro de Usagi-san se descompuso notablemente, su ceño se fruncio y su mente tratando de encontrarle una solucion a todo esto solo pudo llegar a una conclusion: Ir inmediatamente por Misaki. Sabia de sobra que buena parte de que el castaño estuviera alli era su culpa, pero bien podria haberse ido con Takahiro, cosa que no hizo y queria, mas bien, debia averiguar. Una excusa poco creible invento el escritor a la hora de intentar deshacerse de su amigo, diciendo que tenia que terminar un escrito para el dia siguiente, cosa que en el fondo era cierta, pero que no estaba dispuesto a hacer. Arranco el coche y condujo directamente hasta la mansion Usami, alli cuanto sirviente estuvo trato de detenerle de ir a meterse en la habitacion de Haruhiko, pero ninguno fue capaz. De una patada abrio la puerta.

-!Donde esta Misaki!

-Akihiko, que sorpresa mas inesperada.

-No me vengas con cortesias. ¿Donde esta?

-En la universidad por supuesto, ¿Es que no sabes sus horarios?

-Ese no es el problema ahora.

-¿Entonces cual es?

-Quiero lllevarmelo de regreso, ahora mismo.

-Lo siento, pero eso no sera posible. Misaki esta muy bien viviendo aqui conmigo, no hemos teido ningun problema desde que llego y si lo piensas de forma inteligente, llego aqui simplemente por que tu lo corriste de tu casa.

-No es de tu incumbencia los problemas que tenga con mi amante.

-Lo son si el viene a mi por ayuda. Pero a decir verdad me causa mucha gracia que le llames tu amante ¿Aun crees que lo son? Solo piensalo, han pasado tantas cosas entre ustedes que dudo puedan ser algo mas que conocidos. Aunque no lo creas, con Misaki hemos pasado un tiempo realmente agradable y no comprendo la razon de tu impertinencia en venir a destruir la felicidad que hemos logrado contruir.

-No tengo que escuchar tus idioteces. Solo quiero verlo.

-Te he dicho ya que no esta aqui. Puedes esperarle abajo, pero no te garantizo nada.

Mascullando los dientes bajo las escaleras sentandose en el sofa de la sala. Penso en un millos de cosas que podria decirle a Misaki para mejorar la situacion, pero la rabia contendida y el odio contra su medio hermano no le permitian pensar claramente. Su unico objetivo era recuperar al castaño y desquitarse con Haruhiko. Las horas pasaban y nada ocurria, su vista se mantenia fija en la puerta de entrada y a cada sonido creia que era el. Su corazon estaba lleno de nerviosismo y palpitaba tan fuerte que llegaba a doler.

Sin embargo, cuando menos se lo esperaba, la puerta abriendose de par en par dejo ver la delgada fgura de su Misaki. Los ojos del castaño no podian creer lo que veian, Usagi esperandole talvez

o quizas para recriminarle por algo? su mirada mas que denotando alegria denotaba molestia, la cual no paso desapercibida por el mayor que no encontraba las palabras adecuadas para iniciar la conversacion, a lo que sus labios simplemente balbuceaban pequeñas frazes irreproducibles.

-Quisiera saber...¿Que haces aqui?- El castaño rompio el hielo de una forma poco amigable esquivandole la mirada.

-Yo...yo...necesito hablar contigo...por eso...

-¿Se te olvido recriminarme por algo mas?- Pregunto sosteniendo aquella molesta y nefasta actitud hacia el mayor.

-No- Respondio con la mirada baja-No he venido para eso, quiero que arreglemos las cosas...

-Ja- reia- ¿Arreglar las cosas dices?, por favor, no me hagas reir. ¿Tu intentando eso? pense que ya estaba sucio para ti.

-No digas eso.

-Es lo que tu me diste a entender. ¿No te acuerdas? Como te pusiste aquella vez.

-Lo recuerdo perfectamente. Por eso...yo quiero...pedirte perdon y pedirte que regreses conmigo....

¿Me olvidarías?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora