013//𝐍𝐨 𝐥𝐨 𝐬𝐚𝐛𝐞𝐬 ¿𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝?

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El Alfa soltó un suspiro al ver tal desorden en el baño de su habitación, no era fanático de ello pero aún así ya iba siendo necesario la limpieza que hacían una vez al año.

Entre tanto desastre trato de buscar su anillo de plata favorito, llevaba un buen tiempo sin obtener resultados y comenzó a frustrarse inevitablemente, sumando el hecho de autoregañarse por no poner las cosas en lugares especificos.

La puerta de la habitación fue abierta y Yoongi corrio hacia ella encontrandose a su Omega. En cuanto lo vio un puchero se hizo en sus labios y estiró sus brazos hacia el.

-Jimin- lo llamo dramáticamente
-cargame-

Jimin sonrió divertido al ver a su mayor en ropa deportiva oscura, descalzo y con el ceño fruncido, no le estaba dando una carita tierna ni mucho menos sonriendo pero eso era parte de su encanto, no puso objeción a sus peticiones, al contrario, gustoso lo alzó de sentir sus pieles cerca y el respirar de su Alfa justo en su cuello.

-¿Que te pasa?- pregunto acariciando su espalda, podía sentir la frustración a través de su reciente lazo.

-¿No se supone que en las parejas siempre hay uno que es fanático de la limpieza?-

-En su mayoria-

-¿Y quién de nosotros dos lo es?-

-Ninguno- una risa salió de su boca mientras escuchaba al Alfa quejarse -si no te has dado cuenta no somos una pareja convencional- un pequeñito beso fue dado en su hombro.

-Nos vamos a pudrír juntos- una risa más fue escuchada en la habitación.

Jimin a pesar de estar riendo, pudo sentir dolor en su espalda baja, tanto que tuvo que caminar hasta la cama y sentarse en la orilla con Yoongi sobre el. Le pareció raro pues su Alfa realmente no era muy pesado.

-¿Desde cuándo te importa el orden? Seguramente es una nueva fase por qué ya pasarás a tus treinta- el tono de sorpresa no pasó desapercibido para Yoongi.

-Por la luna, ya deja de joder con eso- dijo fastidiado, no era el único que empezaba a recordarle su nueva edad pronto.

-¡Oye!- los ojos de Jimin se agrandaron de más y sacaron una dulce sonrisa -cuidado con esa boca- su pulgar acaricio sus labios.

Yoongi aparto su mano y lo beso directamente con lengua, tomando desprevenido al Omega que se adapto a su ritmo de inmediato, sus manos tomaron su cintura disfrutando del interior de la boca de su chico. Su labio inferior fue mordido y Jimin apretó con fuerza al mayor hacia el, un punto débil.

- De veras- le susurro el Omega en sus labios -deberías tener cuidado- los ojos de Jimin podían demostrar tranquilidad e inocencia y su voz por más aguda, y dulce que fuera su tono, Yoongi sabía bien que sus verdaderas intenciones no eran esas.

-Solo por qué te vas- le respondió finalmente acariciando su cabello castaño.

Jimin suspiro e hizo un puchero mientras dejaba caer su cabeza hacia atrás, no era que le molestará ir a ver a sus padres, solo estaba agotado por el trabajo, y que Yoongi masajeara sus hombros le hacía saber que también estaba al tanto de su cansancio.

-Acompañame-

-Tus padres no quieren verme a mi- las grandes manos de Yoongi acunaron sus mejillas -y menos cuando se enteren que te marque- dijo observando la mordida tan llamativa.

No podía ser ocultada, era sumamente grande y aún se encontraba algo morada después de dos semanas, Yoongi podía sentir algo de ansiedad cada que la miraba, pensaba que había hecho algún daño a su pareja, la marca fácilmente abarcaba la mitad de su cuello por la poca hinchazón que quedaba en ella y para su perspectiva, era dolorosa.

𝘽𝙮 𝙉𝙖𝙩𝙪𝙧𝙚//JimsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora