✧.*ೃ༄ 𝐄𝐌𝐏𝐄𝐙𝐀𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐎 ✧.*ೃ༄

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Abro bien grande mis ojos como dos platos. Esto podría servirme para todo lo que estoy viviendo últimamente.

Estos tres años de secundaria y los dos de bachillerato se podrían resumir en muchas palabras, pero ahora voy a hacer hincapié en una: esperar. Durante cinco años he estado esperando a tener un año increíble, como lo fueron los años de la primaria, cuando aún era chiquita, cuando aún no tenía responsabilidades (sin contar la escuela), cuando aún era feliz...

Sí, estos años de adolescente no fueron muy felices que digamos. Sí tuvieron sus momentos buenos y dulces, pero fueron escasos en comparación con los malos y amargos. Digamos que podría resumir todo en dolor, mentiras, engaños, malos compañeros de clase, exigencia, entre otras palabras.

Todo empezó cuando mi madre me envió a un colegio privado cuando empecé la secundaria. Era el colegio Kataoka, el más barato de la ciudad de Nankatsu; la matrícula era de siete mil yenes, pero como mi madre enseña Inglés ahí, pagaba la mitad de la cuota, permitiendo que yo entrara en él, ya que nuestra economía no es la mejor como pagar mi educación. Y bueno, el lugar era bonito en estructura, pero socialmente... Mmm... no era el mejor lugar.

Mis compañeros en general eran muy arrogantes, los chicos principalmente te hacían ver como un inútil si eres malo en Educación Física, y se hacían los que tenían plata solamente por ir a un colegio privado. ¡Unos tarados! Yo si en ese entonces hubiera tenido "los huevos" para responder a sus taradeces, les hubiera dicho: "Nenes, este es literalmente el colegio más barato de Nankatsu, tampoco se hagan los ricachones porque no pagan ni diez mil yenes, y el Utsuromiya College de Tokio paga el triple que eso, así que...", o algo parecido, pero en esos tiempos era una tremenda cobarde. Me sentía horrible por eso, pero ahora justifico mi miedo, porque mi mamá siempre andaba en la vuelta en el colegio, cuando estaba sola en los recreos, ella me preguntaba: "¿Por qué estás sola? ¿No pensaste en acercarte a tus compañeros?", y yo pensando: "Sísí, claro, cómo no, con lo lindo que me tratan...". La razón por la que no me acercaba a ellos era que eran una mugre de persona, pero a lo que quería llegar era que mi madre me crió para no andar diciendo malas palabras, y cuando me molestan tengo ganas de decirles un BUEN insulto que les cierre el orto, pero con mi madre espiándome, el director, las cámaras que hay en cada metro cuadrado del colegio... no me conviene decirles nada. El miedo que sentía era tan grande... Y lo peor de todo era que estuve con los mismos compañeros mugre todos los años, apenas cambiaban a uno o dos y venían nuevos de otros colegios, pero los más mierda siempre eran los mismos. Llegué a tener amigos, pero casi todos me tiraron a la basura con el correr del tiempo, la única que más o menos sigue conmigo es Ayane, una compañera de clase, pero a veces ha soltado comentarios incómodos sobre mí, por eso no le tengo tanta fe, es decir, la considero más una compañera para trabajar en clase, pero amiga no, ya que nunca la he invitado a mi casa, y tampoco la pienso invitar.

En resumen de todo eso: tuve una vida escolar del orto por culpa de que mi madre me mandó a un colegio lleno de engreídos. Entiendo que mis padres querían una buena educación para mí, y de hecho la tuve, pero socialmente es una mierda ese colegio. 

Mi escuela era mucho más linda. Mis compañeros eran decentes, tenía amigas que ahora ya no están en mi vida por falta de comunicación y circunstancias de la vida, me sentía despreocupada... Pero todo cambió de un año al otro...

Y no sólo fue por culpa del colegio Kataoka, hubo otros factores que arruinaron "una maravillosa etapa de la vida", como diría mi mamá, refiriéndose a la adolescencia, y yo así: "¿Qué tiene de lindo? ¿Sufrir? Ay, pero qué masoquista, mamá", entre esos factores están Kansai, mi hermano mayor, Himiko, una vecina del barrio que es un año mayor que yo, y algunas situaciones tensas con mis padres, de las cuales hablaré después, ya que mi madre me acaba de llamar para ir a la playa:

─¡Abiii, anda aprontándote para irnos!

─¡Ya voy!─ le grito, apago el ventilador y busco mi traje de baño de dos piezas en el cajón. La parte de arriba es turquesa, de un sólo hombro, y la de abajo es de color negro. Amo este traje de baño, fue un regalo de mi abuela Kimie por mi cumpleaños de quince. Me aplico protector solar en mis extremidades y demás partes del cuerpo, y por último mis shorts de jean azules, mi camiseta rosada y mi gorra negra. 

Sí, estamos en verano, a un mes y medio de empezar las clases, mi último año de bachillerato. Ojalá que el verano no termine nunca, así no tendré que volver a Chérnobil... Digo... ver a mis compañeros tóxicos, jaja. El verano me trae paz, y por más que yo amo empezar las clases con útiles nuevos, me desilusiono cuando veo que el año va a ser una mierda con estos compañeros del culo que tengo.

─¡ABRIL!

─¡QUE YA VOY!

Mejor dejo de hablar antes de que Terminator se desespere, jaja. Cuando vuelva haré más énfasis en mi hermano, Himiko, mis padres y otros problemas menores.

Y veré ese video que me generó tanta curiosidad...

𝗘𝗠𝗣𝗘𝗭𝗔𝗥 𝗗𝗘 𝗖𝗘𝗥𝗢 ❱ Capitán Tsubasa ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora