XVI. 𝐔𝐍 𝐍𝐔𝐄𝐕𝐎 𝐂𝐎𝐌𝐈𝐄𝐍𝐙𝐎

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Y por fin, luego de tres meses de espera, finalmente llegó el tan esperado día de la partida de Kansai.

La tarde anterior, mi padre, él y yo fuimos en el auto a que pudiera cambiar algunos yenes por euros, y luego se nos unió mamá para dar una vuelta por la ciudad y por la costa, como para que Kansai vea por última vez su querida ciudad natal. 

Literalmente yo llevaba el celular y los auriculares para escuchar música "triste", aunque en este caso sería nostálgica, por ejemplo...

Amo esa melodía, se los juro. Y otra cosa que les juro es que siempre que me siento como nostálgica, muy feliz, pongo música de este estilo, tipo una película, jaja.

A la noche, mis padres apenas pudieron dormir de lo mucho que iban a extrañar a Kansai, y yo dormí lo más bien. Puede que parezca egoísta y cruel mi actitud en esta situación de que un familiar se va a ir lejos, pero el egoísta siempre fue él, no yo. Se lo merece, que vea lo mucho que me dañó.

Voy a tratar de actuar lo más triste posible, aunque soy pésima fingiendo, jsjs.


Son las seis de la mañana, y nos estamos aprontando para irnos.

Yo ya me puse uno de mis outfits favoritos: un pantalón verde mate, un buzo negro de cuello largo, unos zapatos marrones y una campera verde oliva larga. Llevo una pequeña mochila con algo de comer, un poco de dinero por si acaso, algo para dibujar por si me aburro, mi celular y mis auriculares. 

En eso Teppei me escribe:


Kisugi: Buenos días viajera ;)

Abril: Holiiis -w-

Kisugi: Con sueño?? xd

Abril: Shi :'3

Kisugi: Bueno, cuando vuelvas te mandas una linda siesta ;)

Abril: Obvio, sabes cómo caigo?? xd

Kisugi: Te dejo para que vayas a despedirte de tu hermano. Bss o3o

Abril: Bye ^^


─Sí, despedirme de mi hermano...

─¡Abril, ya nos vamos!─ me grita mamá.

─¡Voooy!─ agarro la mochila y antes de cruzar la puerta, digo─: Cuando vuelva a casa, empezará un nuevo comienzo...─ y cierro la puerta.


Vamos de viaje al aeropuerto de Shizuoka. Mi padre maneja mientras habla con mamá y Kansai. Yo me estoy enfocando en los bellos paisajes que solamente puedo ver cuando paseo en auto con mi familia, que con suerte lo hago una vez cada seis meses. Lo sé, muy triste. También estoy tratando de dibujar el Monte Fuji, pero obviamente, como nos estamos moviendo, estoy dibujándolo desde distintas perspectivas, aunque de todas formas me quedó bien, supongo, jaja. 

El viaje duró una hora. Estamos en el aeropuerto, organizando el equipaje. Yo estoy mirando por una ventana algunos aviones despegar y aterrizar, y el hermoso cielo azul con nubes. Qué ganas tengo de subirme a un avión, y viajar por ese cielo tan paradisiaco. Sinceramente no me daría miedo subirme a un avión por las alturas, total, voy a estar mirando el cielo, pero lo que sí me daría un poquito de inseguridad y pánico serían las turbulencias, y el miedo de que el avión se caiga, porque eso sería mi muerte asegurada, sí señor.

Mamá me invitó con un capuchino del McDonald's del aeropuerto mientras papá ayudaba a Kansai.

─No me sabe a nada, ¿tú le sientes gusto?─ me pregunta.

─Un poco, pero dentro de todo está rico─ le respondo─. Aunque me quemé la lengua, jiji.

─Te dije que soplaras. Nunca soplas.

─Bueno, en breve me voy─ llega Kansai con papá.

En muy pocos minutos, dejaré de ver el rostro de mi hermano...


La gente que se iba en el mismo vuelo que él empezó a formarse en una fila. Kansai empezó a despedirse con lágrimas en los ojos (literalmente es la primera vez que lo veo llorar, al igual que a mis padres). Me dio un poco de... ¿lástima? ¿Compasión?

─Nos vemos, hermanita─ me dice, sonriendo.

Lo primero que me sale decir es:

─Adiós─ sonrío apenas, agitando la mano.

Él se va por un pasillo junto a las demás personas. Ya no lo vimos más...


Esperamos media hora a que su vuelo despegara, y lo vimos partir.

Kansai ha abandonado Japón.

Mis padres estaban un poco tristes, y yo sentí un poco feo el verlos tristes, como les dije antes: adultos llorando son una de mis debilidades.

Aunque conociéndome, mañana se me pasará totalmente al ver que tendré la PC de Kansai todos los días a cualquier hora, y también pensando que ya no soportaré sus burlas por un buen tiempo...

Al regresar a casa, durante todo el trayecto me puse a escuchar música triste, jaja. Observaba el hermoso paisaje con la música de fondo y me daban ganas de romper en llanto por la enorme felicidad que estaba sintiendo. Soy demasiado sentimental, lo sé, jaja.


Llegamos a casa, y papá fue a devolver el auto alquilado. Le pregunté cuándo podríamos volver a alquilar un auto, y me dijo que posiblemente a principios del mes que viene cuando cobre. Eso me alegró bastante, porque serían justo las vacaciones de invierno. Ya tengo un plan para las vacaciones, pero no hay que olvidarse de esto tan importante: no obsesionarse, no, no, no, o no se hará realidad.

Mamá se puso a hacer el almuerzo y yo fui a mi cuarto a preparar la cama para dormir una siesta. Después de una buena mañana necesito dormir por lo menos cinco horas, ok no.

A partir de ahora, mi realidad será muy diferente.

𝗘𝗠𝗣𝗘𝗭𝗔𝗥 𝗗𝗘 𝗖𝗘𝗥𝗢 ❱ Capitán Tsubasa ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora