𝗘𝗠𝗣𝗘𝗭𝗔𝗥 𝗗𝗘 𝗖𝗘𝗥𝗢 ❱ Capitán Tsubasa ✔

V. 𝐋𝐈𝐌𝐏𝐈𝐄𝐙𝐀 𝐃𝐄 𝐏𝐄𝐍𝐒𝐀𝐌𝐈𝐄𝐍𝐓𝐎𝐒

Mis padres hablaron con respecto al tema del cambio de colegio. Mi padre dijo que le gustaría que yo fuera al colegio Shutetsu, porque tiene mejor educación que el Kataoka, pero me preguntó si yo estaba cien por ciento segura de que quiero hacer los exámenes de admisión para que me den la beca, y yo respondí que sí, que sí quería. Lo que sea por liberarme de esas mugres de compañeros que tengo.

Ojo, tampoco digo que todos los del Shutetsu me vayan a tratar divino, porque en un colegio de más plata deben ser más arrogantes todavía... Es una teoría que tengo, tampoco voy a ir a ese lugar pensando que todos van a ser un amor conmigo, tendré la guardia arriba.

Pero aún así me asustan los exámenes (tampoco es que sean exámenes para entrar a la NASA, pero igual), y más porque estudiar en verano me da pereza, muuucha pereza, sin embargo, me voy a esforzar al máximo.

Finalmente, llegó el día en que daré los exámenes. Tengo de Lengua japonesa, Estudios sociales, Matemáticas, Ciencias, Música y Arte, nada más. Si los apruebo, podré obtener una beca y estudiar en este colegio sin siquiera pagarlo.

Lo hubiera hecho antes, cuando inicié la secundaria, así la beca serviría para más de un año, pero bueno, qué más da.

Me presenté en el colegio Shutetsu a hacer los exámenes. El lugar es enorme, y vi montones de estudiantes que fueron a dar exámenes de materias que perdieron el año pasado. Tengo muchas ganas de estudiar aquí. Tengo que sacar mínimo sesenta puntos de cien para aprobar los exámenes.

Haré mi máximo esfuerzo para que estas últimas cinco noches estudiando hayan valido la pena. 

Han pasado tres días desde que di los exámenes. No fueron tan difíciles, pero algunos casi me da un ataque, jaja.

Primer paso, hacer los exámenes: completado. Segundo paso, soltar mi objetivo: en proceso.

Sí, tal y como decía el video, tengo que desaferrarme de lo que quiero, y en una parte mencionó el conectar con las emociones que quieres sentir una vez que conseguiste el objetivo, en vez de pensar en el objetivo mismo. O sea, con palabras más simples sería: "Sentirme como me quiero sentir", si quiero sentirme feliz, agradecida, etcétera, tengo que sentirme así ahora, pero sin esperar a que así se cumpla mi objetivo.

No esperaré nada, voy a vivir así para disfrutar el presente, sin esperar el futuro.

─¡Abril, la cena está lista!

─¡Ya voy, mamá!

Mmmm, ¡amo la ensalada! Antes no la comía, pero ahora que Kansai se hizo más consciente de su salud, nos pegó el amor por la ensalada. Le pone aguacate, zanahoria, huevo, condimentos... ¡Ñam! Y mamá hace milanesas para acompañar. Juro que cuando vi la ensalada me morí de felicidad. Está muy copado comer esto en verano. Es rico, es fresco... Kansai puede hacerme cosas horribles, pero ha hecho cosas buenas en la vida.

Uy, y hablando de eso, algo que me enseñó el video es agradecer lo que ya tengo en mi vida. Lo he hecho estos días, pero ahora quiero agradecer todo de una. 

Fui a comprar un helado al almacén, y me senté afuera, a la sombra, y me puse a mirar el cielo.

─Agradezco tener una familia, quizás les cueste entenderme, pero me dieron una casa, me dieron y me dan amor, me dieron y dan agua, comida, luz, internet, televisión y abrigo, se esfuerzan en pagar por mi educación, y me dieron la vida... También agradezco mi infancia, mi niñez feliz y sin preocupaciones, agradezco haber ido a una escuela, nunca haber sufrido violencia física, quizás sufría violencia verbal, pero eso fue necesario para que aprendiera lo que realmente es la vida: el caerte mil y un veces y levantarte mil y dos, agradezco no tener problemas de salud, no tener que acudir a un médico o a un psicólogo muy seguido, y poder tener una vida normal, a diferencia de otros países como Afganistán o Arabia, una vida en la que tengo posibilidades de vivir al máximo. Soy feliz con todo esto, y no necesito nada más.

Muchos nos desanimamos por lo que no tenemos en vez de ver lo que sí tenemos, que quizás no es mucho, pero esas cosas nos van formando como persona, y si las agradeces, atraerás más cosas que agradecer.

Si tan sólo hubiera visto ese video hace cinco años, todo hubiera sido diferente... Nah, no creo, era demasiado pequeña para entender tanta filosofía, de hecho, este dolor me hizo madurar, crecer, ver más allá de mí.

Agradezco haber pasado por este dolor.

Aprovechando que papá está haciendo carne en el parrillero, escribí en un papel todas las cosas malas que me pasaron en estos cinco años, y las voy a tirar al fuego, para que ardan, para que se desintegren en cenizas, para que desaparezcan de mi conciencia. 

Papá entró a buscar la carne, yo me puse de pie frente al ardiente fuego con el papel en mis manos. Por mi mente iban y venían recuerdos del pasado, momentos dolorosos, palabras hirientes, engaños, burlas, decepciones, rencores, traiciones, de todo. Arrugué la hoja y la eché al fuego. Adiós dolor.

Puedo ver cómo el papel se carboniza.

─Las palabras se queman, mi dolor se quema, todo se quema...

─Abi─ me habla papá─. ¿Qué haces?

─¡Nada! ¡Nada! Jeje─ río nerviosa. 

Me despierto. Son las nueve de la mañana. En verano me despierto como muy tarde a las dos de la tarde, jaja, pero quedan unos días para comenzar las clases, y tengo que agarrar la costumbre de levantarme temprano, en unos días voy a empezar a despertarme a las siete...

En eso recuerdo un sueño que tuve. Soñé que estaba frente al colegio Shutetsu, dando a entender que sí logré entrar... Fue un sueño raro, ¿qué significará?

Mi madre entra a mi cuarto con el desayuno. ¡¿Cómo carajo supo que ya me levanté?!

─Aquí traigo el desayuno para la niña que aprobó todos los exámenes de admisión y consiguió la beca─ dice con una sonrisa.

─Gra...─ quedo recalculando lo que dijo─¿Qué dijiste?

─Me acaban de llegar los resultados de tus exámenes, Música aprobaste con ochenta puntos, Artes con noventa y uno, Lengua japonesa con noventa y cinco, Estudios sociales con setenta y tres, Matemáticas con sesenta y nueve y Ciencias con sesenta y cinco. Te fue muy bien, hijita. Estoy muy orgullosa.

─...

No tengo palabras para describir todo lo que estoy sintiendo en estos momentos.