White Flag

4. Intento de asesinato

Hoseok estaba observando el entrenamiento de los soldados, eso siempre le fascinó y no por lo que algunos de los soldados pensaban, pues algunos decían que solo veía los cuerpos de los hombres por ser un doncel lujurioso. Sin embargo Hoseok amaba ver las tácticas de batalla, aprendía observando de los movimientos de los peleadores más expertos, la arena de entrenamiento era estilo un coliseo donde practicaban tiro, espada y la lanza, por otro lado peleas cuerpo a cuerpo con cuchillo.

Los soldados de Fuyu eran conocidos por su letalidad con la espada y cuerpo a cuerpo, pero algo que no podían hacer perfectamente era el tiro con arco sobre el caballo. Hoseok era experto en eso recordaba la forma en que sus hombres y los salvajes, se equilibraban sobre los caballos y apuntaban con su arco disparando justo en el blanco. Hoseok estuvo a punto de saltar al campo de entrenamiento, pero la presencia de su esposo quien lo vio con una mirada asesina lo detuvo.

— Príncipe Hobi, al parecer a su esposo no le gusta que usted este observando el entrenamiento.

—  Es un idiota... Cree que solo vengo a ver cuerpo calientes de hombres. Es tan estúpido que no lo entiendo. —  dijo viéndolo con la misma mirada que él le daba. Escuchó a uno de los soldados comentar que él estaba allí viendo sus cuerpos, cuando Hoseok solo se había sentido atraído por un solo hombre, no era lujurioso ni descarado, su único interés amoroso era Taehyung y lo peor es que él no lo amaba, tenían un mes de casados y hasta el momento solo habían tenido aquel beso que según su esposo no era nada.

Hoseok dio media vuelta recorriendo el camino por el bosque que ocultaba el campo de entrenamiento del castillo, sonrió pues al menos Fuyu era hermoso, su clima era agradablemente frío, agradecía que su dios Sol lo cuidara pues a veces la nieve cubría el lugar con un hermoso manto blanco. — Hoy el Rey SeokJin quiere tomar el té con usted.

— Lo sé, a eso voy. A veces me aburre, no veo a los niños corriendo a la playa, no puedo entrenar en el campo abierto o jugar con Hope en la selva, el pobre tiene que quedarse en el sauna. Extraño mis peleas con Jackson... —  Hoseok se detuvo cuando se percató de sus lágrimas, Sangmin limpió su lágrimas. Taehyung observó la escena y algo primitivo ardió en su interior como si fuese el centro del sol, Chanyeol le sonrió malicioso y este frunció el ceño.

—  Esos celos te enloquecen... ¿Por qué no aceptas que te vuelve loco un hombre? 

— ¿Por qué no te meto una espada en el culo? 

—  Porque tu tío te mataría, es mi esposito lindo...

—  ¡Piérdete, Chanyeol! 

— Como ordene su majestad.

Taehyung lanzó la espada clavándola en un blanco, todos los soldados se quedaron impactados por el aura furibunda de su príncipe.  En el palacio, Hoseok estaba frente al Rey SeokJin tomando el té, este vio su rostro enrojecido y sus ojos irritados, sabía que su hijo estaba siendo un maldito. Lo había descubierto en su habitación con unas de las sirvientas del palacio, a la cual había enviado a otra aldea por suripanta y aceptar a su hijo estando casado. 

— Sé que no estamos siendo muy buenos contigo, pero...

—  No diga eso su Majestad. Su esposo, usted y la pequeña Jisoo me han tratado como familia y me han proveído de todo lo que necesito. El Sabio me deja leer sus libros de historia y son muy amables conmigo.

—  Pero no estamos haciéndote sentir en casa... Sé que mi hijo se opone a que entrenes con nuestro ejército, tampoco te deja ir a expediciones al desierto de hielo, además tampoco te respeta como esposo... — Jin se detuvo pues no sabía si el el príncipe conocía esa información, pero al ver su rostro nublarse supo que no estaba ignorante de la situación.