8. Una visita muy esperada

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"Prometo que no estoy intentando hacer tu vida más difícil, ni volver a donde estábamos." DIDO

Hoseok no dejaba de pensar en las palabras del príncipe Kim, no sabía que pasaba por la cabeza de este pues cada vez que daban un paso hacia adelante daban dos hacia atrás "Juro por mi vida que cuando lo vuelvas a ver no habrá ningún rastro de ese sentimiento hacia él porque todo tu amor será solo mío." Esas palabras no dejaban de repetirse en su mente, pues ¿Qué necesitaba el príncipe Kim Taehyung para entender que solo lo amaba como hombre a él? Qué para él era su esposo y lo amaba desde hace mucho tiempo. Dejó escapar el aire viendo por el balcón de su habitación el hermoso paisaje blanco, esa era otra cosa dormían en habitaciones separadas, Taehyung estaba en su habitación de soltero y no lo visitaba en la nupcial.

— Jacky ¿Por qué no has venido? Te necesito tanto.

Dijo recordando a su amigo mientras se sentía tan solo, los Reyes estaban viajando a la ciudad vecina donde realizarían una reunión con sus principales generales. Así que en el castillo solo estaba el príncipe Jimin con su escolta, Sangmin, los sobrinos del Rey y Hoseok, desde luego estaban los escoltas y sirvientes. 

Hoseok se decidió a salir de la habitación pues estaba aburriéndose demasiado, el otro problema que tenía era que en Fuyu las personas lo veían como alguien extraño, peculiar.  Cada vez que salía ellos criticaban que sonriera por todo, sus hanbok de colores llamativos  y su risa escandalosa. Por tanto, era una total pesadilla salir del castillo. Cuando bajó hasta el jardín se decidió a practicar con su espada, su agilidad lo hacía ver como un bailarín y eso provocaba demasiadas cosas en los guardias, quienes veían la forma en que sus piernas se movían y su cabello brillaba con los pocos rayos del sol que se escapaban en las nubes grises.

  — Es toda una belleza.

— No entiendo cómo el príncipe no disfruta de ese cuerpo.

Los dos guardias de la zona del jardín conversaban sin saber que el príncipe escuchaba sus comentarios. No le importaba lo que otros pensaran de su matrimonio, pues nunca había sido por amor, sin embargo los dos guardias siguieron hablando y Hoseok estaba muy asqueado por sus comentarios. 

— ¡Cierren la boca! No soy un juguete sexual, debería hacer su trabajo y no decir que su príncipe no disfruta de mi cuerpo. 

— ¿Qué mierda dijeron? — dijo Taehyung acercándose junto a Jimin y Jungkook, Hoseok solo envainó la espada y se alejó sin ver a Taehyung. Odiaba sentirse estúpido frente a Taehyung, un hombre que no confiaba en él, un hombre que no entendía sus sentimientos y que no le prestaba atención. Vio a Vante quien estaba en su tamaño normal, este se acercó restregándose en él. 

Mientras Taehyung seguía al príncipe después de haberle dado una golpiza a los dos guardias. Hoseok caminaba sintiendo lo fría que era la nieve, empezó a correr junto a Vante y pronto otros lobos los siguieron . Hoseok recordó sus días en Natsu cuando corría por la selva junto a su jaguar a quien tuvo que enviar de regreso pues no soportaba el frío de Fuyu, pero por suerte los lobos lo amaban y se sentía un poco en casa. 

La selva le gustaba más, sus aromas eran increíbles, las flores y los frutos poseían un aroma singular y exquisito, además del dulce sabor de las frutas tropicales. De pronto tropezó y cayó en la nieve, empezó a reír y los lobos se colocaron alrededor de él. — ¿Te gusta jugar?

— Algo. — dijo levantándose avergonzado. Se sacudió la nieve y se dio media vuelta e iba a irse, pero Taehyung lo detuvo y lo hizo girarse para quedar frente a él.

— ¿Estás molesto?— Hoseok veía hacia otro lado evitando la mirada de Taehyung quien se sentía un poco decepcionado de que su esposo no quisiera ni verlo. — Yo... He estado un poco ocupado...

White FlagDonde viven las historias. Descúbrelo ahora