White Flag

6. En tus brazos

Hoseok emitía palabras inentendibles provocadas por la sobre estimulación que le generaba la felación que le hacía Taehyung. Era como si algo ancestral los poseyera diciéndoles lo que debían hacer para hacer que el otro alcanzara el placer. Cuando Hoseok se corrió inundando la boca de Taehyung este sacó el miembro lentamente ante la vista nublada de Hoseok, sonrió al ver el rostro de su esposo agitado y sonrojado por lo que acababa de hacer. 

Hoseok vio como hilos de saliva y semen unían su miembro y los labios de Taehyung, gimió cuando este bajó, pero no a su miembro sino a su trasero y son su lengua estimuló su ano. 

— Mi Sol es momento de ser uno solo.  

— Príncipe de cuarta, esta vez no me falles. 

—  No lo haré, no sabes cuanto deseo estar dentro de ti... 

Hoseok se tiñó de rojo pues jamás había estado tan expuesto ante alguien, pese a haberle dicho que lo deseaba no se sentía muy seguro, su cuerpo no era como el del príncipe Park y menos como el de las mujeres con las que se había acostado. Los pensamientos  inundaron su mente y Taehyung observó que estaba diferente, su semblante había dado un giro completo. Entonces Taehyung empezó a besar las piernas de Hoseok, las acariciaba como si tocase una rosa. Hoseok lo observó, subió besando sus caderas luego su abdomen, el recorrido siguió hasta sus tetillas  las cuales succionó y mordió.

— Eres tan hermoso, tu piel es más tersa que cualquiera que hubiese tocado antes. Tu aroma... ¡Maldición! Es tan adictivo. —  dijo olfateando su cuello y pecho lamiendo su piel como si fuera un helado. —  ¿Cómo puedes oler a vainilla y canela? Me vuelves loco, puede sentirte a  kilómetros. — dijo cuando atrapó sus labios. Hoseok rodeó su cuello con sus brazos y dejó que la lengua de Taehyung explorara la suya. 

Las piernas de Hoseok se abrieron al sentir como Taehyung se frotaba contra su cuerpo. El miembro del príncipe Kim estaba totalmente erecto y Hoseok tembló al sentir lo que provocaba en el príncipe. — Tae... hyung... ¿Te gusta?—  Taehyung lo vio con el ceño fruncido mientras se acomodaba entre sus piernas, tanteó su entrada ya lubricada con su saliva y el semen de Hoseok, alineó su miembro y siguió viendo su rostro sin entender la pregunta.

— ¿Te... te gusto? —  dijo avergonzado. 

— ¡Demonios! ¿Cómo puedo convencerte de que me gustas demasiado? Tanto así que ardo en deseos por ti.  

Taehyung se hundió lentamente en el interior de Hoseok, este sintió dolor y se cubrió el rostro con los antebrazos, pero Taehyung tomó sus manos con suavidad y las llevó a sus labios, besó sus manos y luego lamió sus dedos luego puso las manos por encima de su cabeza sobre las almohadas. — ¡Tae... duele... Solo espera...! ¡Es tan vergonzoso! — decía mientras sollozaba avergonzado ante sus gemidos que se escapaban sin pudor. 

— Déjame verte... Eres tan caliente cuando te tengo así, me aprietas endemoniadamente bien. 

—  ¡Mierda! ¡No digas eso!— Taehyung sonrió y cuando sintió que estaba más relajado empezó a moverse, su pelvis empujaba dentro de Hoseok, este tembló y se arqueó con cada embestida, sus pieles estaban húmedas y calientes pues era lo que provocaba el contacto entre ellos. 

Hoseok sentía miles de sensaciones que lo llenaban, el miembro de Taehyung lo abría de una forma tan placentera que lo hacía gemir. Hoseok llevó sus piernas a la cintura de Taehyung rodeándolo atrayéndolo más hacia él, Kim sonrió y jadeo ante la sensación de aquellas lindas piernas rodeándolo, además se había enterrado tan profundo que había visto las estrellas. 

— ¡Aghhh! ¡Más profundo! — Taehyung tomó sus piernas, las besó  y las llevó a sus hombros, Cuando hizo eso su cuerpo se empujó dentro de él llegando a su punto dulce, sus cuerpos empezaron  a experimentar miles de sensaciones, sus cuerpos sintieron el cosquilleo de sus orgasmos y pronto se liberaron, Hoseok se arqueó y gimió al igual que Taehyung. Sus ojos se abrieron y ambos se sorprendieron al ver sus ojos rojos con tonos dorados.