Pepe Party - El Juego De Las Puertas [EN EDICIÓN]

El collar.

Estaba anocheciendo, estaba sola.

Bueno, no.

No estaba sola. 

Tenía a alguien conmigo. . . el silencio. Siempre me ayudó a relajarme. 

Con ese amigo me quedé pensando. No sé lo que me dio. 

Espera...

Mi madre me lo advirtió. 

El collar con el as de trébol que llevo . . .

ese fue el problema. 

Este collar puede ser mi perdición. 

Mi madre me dijo que le pertenecía a mi tía. Pero como se cansó del collar, decidió dárselo a mi madre. 

Mi mamá durante seis años ocultó, ante mi hermano y a mí, el poder que tenía el collar. En ese collar hay un demonio encerrado, que a primera vista parece muy amigable, llega a ser un estorbo y dice cosas que no están bien. Al menos, te da un poder imaginable y también tiene sus desventajas, como lo de las grietas en la cara cuando te enfadas o tienes un ojo blanco. A muchos les puede dar vergüenza, pero, a mí no me da vergüenza, a mí me mola. Sí, como dije antes, tengo un ojo blanco. El problema, para algunos, es que puedes ver fantasmas, demonios y espíritus merodeando por el mundo. Para mí no es una desventaja, pero la mayoría de las personas que llevaron este collar dicen que es una gran desventaja. 

Así que sí, es como si viera alucinaciones. Pero no lo son.

Lo divertido es que también puedo hablar con ellos. Claro que cada fantasma tiene su personalidad, pueden tratarte bien, mal, como si fueras su amigo de toda la vida, etc...

Normalmente, pueden llegar a tener, durante toda su vida, el collar, personas especiales. Que el as de trébol les representará o también el as de picas, el as de corazones y el as de diamantes. Mi mamá me dijo que habían, y siguen habiendo, tres collares con los ases que acabo de decir. 

Sigo llevando el del as de trébol.

Una persona cualquiera no podría tenerlo toda su vida.

El collar decide quién lo mantendrá.

La persona que intente conseguir el collar, sin que el collar lo quiera, de una forma u otra se irá de este mundo.

...

¿Qué? ¿Cómo yo lo conseguí? Es una aburrida y corta historia.

No sé si contarla. . .

Ok, la cuento.

Mi yo de seis años, simplemente, estaba jugando con una muñeca muy bonita y mientras jugaba, vio algo brillante sobre la mesa. Decidió cogerlo y . . . su madre vino corriendo y le quitó el collar de las manos. Es ahí donde le entró la curiosidad, así que se puso a investigar y a buscar el collar. Se pasó una semana entera buscando y no lo encontró.

Pero el octavo día, por la noche, oyó como uno tintineos.

Venían de afuera. 

Se puso de pie y fue por el bosque que rodeaba su casa y en un laguito vio el collar, brillando sobre el pequeño lago. Lo agarró y se lo puso.

Y . . . y. . . ya no sé.

Ah, sí.

Al parecer, se desmayó y su madre vio una luz morada que provenía del bosque y pues, vino a recogerla y se la llevó a su casa.

Desde ese entonces, aprendió muchas cosas sobre el collar y obtuvo más poderes y también, un ojo blanco. 

Y esa es la historia de cómo conseguí el collar.

La verdad, ni mi madre sabe por qué el collar estaba allí. 

Hace un año o dos, no recuerdo bien, me dijo que ella nunca se puso ese collar, no porque no podía, sino porque le daba miedo y tampoco quería tener un ojo blanco, ni tampoco mucho más poder que una persona normal porque el poder pudo habérsele subido a la cabeza, sinceramente.

Tampoco pensó que yo podría haber tenido el collar, porque no quería que yo lo tuviera, para no hacerme daño, y menos quería que mi hermano lo consiguiera porque él puede llegar a ser muy destructivo.

Ahora mismo, mi hermano, está en casa, bueno, en su casa en el quinto universo. 

Yo estoy en el cuarto. 

Se fue de casa, no quería estar con nosotras, mi madre y yo. 

Es una historia larga, ya os contaré. 

Me alegro de que ya no quiera destruir este universo. 

La última vez que quiso destruirlo fue hace dos años. 

Fue muy difícil detenerlo pero, por suerte, se aburrió y decidió irse, aunque causó muchos daños.

 Como mis amigos me ayudaron, fue un poco más fácil reconstruir la ciudad. He de admitir que fue divertido trabajar todos juntos, y también porque no teníamos que ir a clases. Fueron buenos tiempos. 

Ayudar a cualquiera es bonito.

 Ahora, para mí, es bastante difícil concentrarme en clase, pero me esfuerzo. 

En fin, esa es la historia acerca del collar. 

Es muy importante en la historia de Klawx.

Es una reliquia, perdón, son reliquias los collares que mencioné.

Algunos llegan a pensar que son unos afortunados, y lo son, y otros piensan que están maldecidos, y están UN POCO en lo cierto. Yo soy una de las personas que cree que son afortunadas por tener el collar.

Me hace sentir que no estoy sola, aunque a veces no me de cuenta de que hay alguien dentro de mí, escuchándome y comprendiéndome. A veces, comprendiéndome.

O incluso, controlándome.