Imperio |ɴɪᴇʟᴀɴ|

13. Voy a...

Lan Wangji sabia que las cosas no estaban yendo bien, había algo que hacia ruido en el fondo de su cabeza cuando dejo de recibir cartas de su hermano con la misma frecuencia, estaba acostumbrado a recibir una a la semana cuando menos, cartas largas, detalladas y con su preciosa caligrafía

Pero últimamente no habían llegado muchas y las pocas que le llegaban, estaban descuidadas, eran cortas y sabia en el fondo de su corazón que su hermano le estaba escondiendo algo, a su vez no había llegado nada a sus oídos cuando Wei Wuxian le había traído algunas veces noticias de su hermano, pequeñas cosas como verlo, lo que estaba usando y lo que estaba haciendo pero cuando su pareja regreso de su visita mensual, este negó haberlo visto y no tuvo la oportunidad de preguntarle a alguien antes de que lo despidieran del palacio

Incluso el había sentido el trato diferente, como si estuvieran ocultando algo y eso hizo que los vellos mas sensibles de su nuca se erizaran con miedo, algo estaba pasando con su hermano, lo sabe muy en el fondo y sí va a pedir tantas audiencias con el como sean posibles porque necesita verlo, saber que esta bien y eso es todo

Envía tantas cartas formales como puede pero todas son negadas, todas son rechazada y su piel pica, Wei Wuxian ha intentado mantenerlo a raya, que no haga una tontería que incluso les gano una discusión, con Wei Wuxian queriendo que las cosas se calmaran para que pudiera seguir avanzando y con el queriendo ir al reino de Qinghe en cuanto antes habían tenido una horrible noche, al final aun enojados Wei Wuxian lo acompaño al imperio Nie, tan imponente como solo el príncipe de Gusu podía hacer, se paro frente a Nie Mingjue bajo las escaleras de su trono, sus cejas se fruncieron mientras veía al emperador que también frunció sus cejas a su dirección

Antes de que pudiera demandar algo, Wei Wuxian tomo su muñeca mientras lo ponía tras el, antes de que pudiera decir algo se inclino haciendo que lo siguiera -Bixia, nos encantaría tener una audiencia con la emperatriz Lan-Wangji había ignorado la forma en la que se dirigían a su hermano, aunque en si, si se había convertido en una emperatriz había otros matrimonios en reinos circundantes donde eran tratados con el mismo titulo de emperador, había tantas cosas mal en esto, tantas cosas que estaban mal alrededor del matrimonio de su hermano que lo hacen sentir miserable por no hacer algo mas aunque le cueste la vida en el proceso

Hay un murmullo de los sirvientes, un revuelo alrededor que mira expectante a las acciones de su emperador, Mingjue suspira mientras llama a uno de sus sirvientes, en voz baja le habla con calma, este asiente y guía a Wei Wuxian a lo que conocen como el patio que Huaisang le había otorgado cuando se hicieron buenos amigos, Wangji aun quiere decir algo, vino preparado para pelear pero Wei Wuxian niega mientras lo mueve desde los hombros -Hay algo mal Lan Zhan, no hay que empujar a nuestra suerte-susurra porque a diferencia de otras veces viene siendo escoltado por un par de soldados cuando antes había caminado de la forma mas libre en el palacio

Les da una última sonrisa antes de cerrar la puerta de las habitaciones, sus cejas se fruncen a diferencia de su normal sonrisa relajada, Wangji se sienta para dejar que su pareja piense -¿Tu hermano no dijo nada en sus cartas?-el niega y hay un suspiro que sale de los dos, el tampoco había podido hablar con Huaisang y parecía seguir lejos de la capital, había visto esa mirada en Mingjue antes, algo había hecho, algo de lo que no se había arrepentido y no sabe como darle esta información a Wangji sin que este salga de la habitación como una tromba y les gane otro problema
Es casi el anochecer cuando tocan sus puertas -General Wei, Bixia a pedido que tomen los alimentos en sus habitaciones y mañana por la mañana tendrán una respuesta a su petición-una mirada apurada en los sirvientes mientras deja entrar a otros con diferentes platillos en la mesa que tienen en su patio, Wei Wuxian se inclina cuando uno de los sirvientes le pide con urgencia acercarse para hablarle en secreto, frunce sus cejas mientras mira de reojo pero no puede hacer otra cosa mas que observar.