Lán Xichen lo único que sabe es que debe salvar su Imperio y a la única familia que le queda, así tenga que modificar su título de emperador de Gusu
Nie Mingjue lo único que sabe es que no va a dejar que nadie pase por encima de su imperio, no sí el...
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Después de su presentación con los ancianos estos mismos invitaron a Xichen a pasar algunas tardes con ellos, los ancianos estaban encantados por el trato de Xichen a ellos sin poner en duda el cómo el mismo era o fue un emperador que sabía lo que estaba hablando y como tratarlos, era inteligente, capaz y recatado, lo suficientemente valiente y sabia hablar con las personas cuando atendió algunas peticiones dándoles una sensación de paz como todo Lan una de las mejores parejas que podía tener el emperador a su criterio.
A Xichen le encantaba debatir con ellos si seguirlos porque le recordaban demasiado a su tío y era como sentirse con él después de tanto tiempo, río tras su manga cuando le ganó a algunos ancianos que le estaban enseñando a jugar damas, entendió demasiado rápido y los ancianos aceptaron no hacer apuestas para que el también pudiera entrar en la partida, está cercanía fue ignorada al principio por el emperador pero después las concubinas empezaron a hablar y a quejarse la posición ventajosa que un prisionero estaba tomando
Solo así Mingjue presto atención a lo que estaba haciendo, Xichen no parecía buscar nada más que un buen rato con otras personas fuera de su séquito, no pregunto cosas que estaban fuera de su deber de conocimiento, no intento meterse entre los conocimientos de los ancianos de altos rangos.
Pero le molestaba la forma en la que se estaba divirtiendo con alguien más, cargo más sus deberes hasta que Xichen paso algunos días sin salir con la excusa de tener demasiado trabajo, Mingjue no comento nada acerca de su falta en la comida ni esa vez, ni la siguiente así que el mismo prefirió pasar sus comidas en la comodidad del jardín que le correspondía.
Disfrutaba muchísimo más comer en constante silencio que estar escuchando a las parejas del emperador dándole indirectas que no apreciaba
Por su parte Mingjue reunió a los ancianos harto de las quejas de sus allegados —¿Por qué Lan Xichen recibe este trato y los demás son ignorados?— hubo varios cambios de tonos en las caras de todos por el tono que su emperador utilizo —Bixia no es lo que crees, no es favoritismo es solo que nosotros...— la mano de Mingjue se azoto contra la mesa —No quiero que le den demasiadas libertades, él es y seguirá siendo un prisionero... un premio de guerra. No dejen que se ponga demasiado cómodo en cualquier momento hará lo mismo que por lo que está aquí— los ancianos bajaron la cabeza arrepentidos
Después de eso Xichen volvió a ser excluido por las únicas personas que lo habían aceptado, cuando se acerco a ellos se dio cuenta que los ancianos negaban alejándose de él como si tuviera una enfermedad, quiso evitar el agujero que se creo en su pecho pero crecían como las burlas hacia su persona que debía aceptar en cada comida con los allegados al emperador y el mismo
Su única compañía de nuevo fue Huaisang quien siempre le gustaba pasar sus tardes con él, sus sirvientes quienes siempre le brindaban una cálida sonrisa y diferentes formas recreativas que se hacían en Gusu y el había evitado por su estricta educación sin saber incluso que en el imperio Lan había juegos para pasar el rato.
