XI.- Visita Inesperada

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Stiles se encontraba en la comisaria charlando con Caleb, ambos estaban almorzando mientras que Noah había salido a hacer lo mismo pero con Peter. Jordan se encontraba a su lado pero se mantenía callado y sonreía de vez en cuando de las tonterías que esos dos decían, cada día se daba cuenta de que parecía que esos dos eran mellizos.

- ¿Cuántas citas has tenido con Derek? Debo decir que pasas más tiempo en su loft que en el nuestro.

Unos días atrás Caleb y Stiles se habían mudado al loft debajo del alfa, Noah se había entristecido porque su hijo estaba creciendo pero al verlo feliz no le importó ni siguió insistiendo para que se quedara en casa. El castaño también se había salido de ahí para que su padre pudiera vivir una vida de pareja con Peter sin interrupciones.

- Deja de molestarme. No te pongas celoso de que yo disfrute de mi relación de manera abierta además de que estamos disfrutando del pueblo antes de que nos vayamos a Quántico. – le dijo Stiles con diversión.

- Sigo sin creer que Derek te acompañará. – comentó Jordan ignorando la mueca de indignación de su casi novio.

- Siendo compañeros lo mejor será estar juntos además de cierta forma me tranquiliza, si se queda aquí estará solo. Sí, sé que estarán ustedes pero no es lo mismo, casi toda la manada se fue y ustedes no lo sienten tanto como Derek.

- Tiene lógica, los alfas se sienten desolados cuando su manada se aleja y a pesar de que estemos nosotros no es el mismo lazo profundo como con los demás betas y más los que fueron mordidos por él. Peter no cuenta porque por mucho tiempo fue un omega así que su lobo no resiente tanto este alejamiento. – comentó Caleb mientras pensaba en la manada, tal vez había pasado poco tiempo desde que los conoció pero ellos lo aceptaron como uno más sin ningún problema. Así que se preocupaba por ellos y por auto denominado cuñado.

- Le hará bien estar pegado a su compañero. ¿Qué hará allá?

- No me ha querido decir pero al parecer tiene algún negocio o algo así. Lo único que se es que es arquitecto fuera de eso no me ha querido decir lo que ha hecho. – le dijo Stiles restándole importancia.

- Pequeño Stilinski. – el menor miró al oficial que traía esposado a Henry que sonreía con diversión – Dice conocerte y ser tu auto proclamado hermano mayor.

Stiles no pudo evitar suspirar. ¿Por qué los miembros del consejo eran tan raros?

- Lo conozco, puedes soltarlo Jerry. – le dijo el castaño mientras se acercaba a ellos ignorando la risa del brujo.

- Hola pequeño Mica. Ha pasado tiempo. – le saludó Henry una vez que estuvo libre de las esposas.

- ¿Cómo terminaste esposado? – le preguntó el castaño mientras se sentaba de nuevo y seguía comiendo; ese lobo no iba a arruinar su almuerzo.

- Digamos que me tope con un idiota en el supermercado, no pude evitarlo pero cuando les dije que te conocía me trajeron aquí contigo y gracias a eso no estoy detrás de las rejas.

- No puedo creer que vienes al pueblo de alguien más y causas problemas desde el primer día.

- Es bueno verte, Henry. – lo saludó Caleb que ahora estaba sobre el regazo del sabueso.

- Veo que te esta yendo bien pequeño brujo.

- ¿Dónde está el tuyo?

- ¡Maldito imbécil! Compórtate. – gritó un hombre de cabello castaño de ojos verdes mientras entraba a la comisaría y se acercaba al alfa.

- Hola, Apolo. – lo saludó Caleb sin dejar de comer.

- Caleb. – se acercó al castaño después de haber golpeado al otro alfa – Soy Apolo Winter. Un gusto conocerte al fin, Mieczyslaw Stilinski. Los brujos no podíamos estar en la reunión donde te explicaron todo, sería peligroso dar a conocer nuestra existencia. – se presentó el brujo castaño.

- Un gusto, Apolo. Es bueno saber que Henry tiene a alguien que lo regañe y no lo deje hacer tonterías. – le dijo Stiles con diversión y más al ver la mueca por parte del otro alfa.

- Es mi deber desde hace diez años, es un dolor en el trasero; es como tener un hermanito molesto que no deja de joder todo el tiempo.

Stiles asintió, de cierta forma ahora podía entender ese vínculo después de todo ahora lo tenía con Caleb y desde que él había llegado su vida es mejor. Es molesto pero sigue siendo el hermano que nunca tuvo, esa persona que realmente lo conoce y no tiene que ocultarle nada.

- Sin mi te sentirías solo. – se quejó el alfa mientras el otro ponía los ojos en blanco.

Stiles miró a Caleb y ambos sonrieron mientras que Jordan apenas y entendía lo que estaba sucediendo después de todo no terminaba de comprender lo que significaba el vínculo que había entre alfas y brujos. Nadie en la manada podía saberlo realmente porque era uno mucho más fuerte que el de un alfa y su beta.

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Durante las siguientes semanas Stiles se vio atascado con Henry, lo cual volvió su relación mucho más cercana. Derek de alguna manera lo acepto y llevó una relación tranquila aunque pudo hablar de mejor manera con Apolo, ya que él parecía completamente diferente a su hermano alfa.

Cuando Henry se fue poco después llegó Yumiko con su brujo y así pasaron algunos mees donde se vieron interrumpidos por la llegada de varios miembros del consejo que solo querían pasar tiempo con el castaño y terminaron amando a Derek, quien a pesar de que lo negaba le gustaba la compañía de otros alfas además de que estaba aprendiendo bastante con solo escucharlos además le agradaba saber que ellos se preocupaban por su hermoso novio y velaría por él.

Ahora ellos dos se encuentran empacando sus últimas cosas, estaban a un día de irse a Quántico. Habían estado hablando con algunos de los chicos en ese tiempo pero los del consejo los habían mantenido ocupados. Noah y Peter no podían creer que los alfas se iban y ahora empezarían una vida lejos de ellos. Este sería el último adiós después de mucho tiempo hasta que se volvieran a reunir.

- ¿Estás listo? – le preguntó Derek mientras lo abrazaba.

- Lo estoy. 

MordidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora