Oh! It's you →Choi San [+18]

Heaven

-Bienvenida.-San abrió la puerta de una hermosa cabaña.

La madera predominaba en el lugar, había unas flores en un jarrón de centro de mesa con una pequeña nota.

"Disfruten su estadía Señor y Señora Choi."

-¿Señora Choi?-Jihye lo miró con una ceja levantada, él solamente sonrió.

-No suena mal, tienes que admitirlo.

Jihye no contestó, aunque para sus adentros si le gustaba como sonaba "Choi Jihye". Sí, le encantaba.

-Ven, dejaremos el equipaje en la habitación.-La voz de él hizo que ella saliera de su burbuja y rápidamente vaya a su lado.

Su mandíbula cayó cuando vió la enorme cama, en el medio tenía unas rosas en forma de corazón y unos chocolates. Era tan hermoso y al mismo tiempo erótico para Jihye.

-¿Que opinas? No te he escuchado decir algo, si no te gusta podemos buscar otro lugar...

Ella lo besó callandolo.-Me encanta, gracias.

-Vuelve a hacer eso y te juro que te atare a la cama.

Jihye tragó saliva, este crío sabía cómo hacerla poner nerviosa. Pero hay una duda que a ella le retumbaba mucho en la cabeza.

-¿Cómo puedes pagar todo esto...?

-¿Si soy un crío? Pues, existen extensiones de tarjetas de crédito y también ahorro bastante.-Él se encogió de hombros sin darle importancia.

-Tus padres...

-Trabajan todo el tiempo, estoy solo con Nana.

-¿Nana?

-Es una señora mayor que trabaja en mi casa desde que soy pequeño... No me gusta referirme a ella de otra manera, es solo Nana.

Jihye sonrió, era un pequeño hablando de sus cosas.

-Tendremos mucho tiempo para charlar en paz y poder hacer cosas que no se puede en la ciudad, ¿no es increíble?-San sonrió tomando de la cintura a Jihye, beso su frente suavemente para luego tomar su mentón levantando su rostro delicadamente.-Me encantas, noona. Quiero que te relajes y disfrutes este pequeño viaje.

-Claro, seguro que lo haré.

San pidió que se de un baño y que se vista para salir a cenar, Jihye entró saltando a la ducha. ¿Hace cuánto no sé sentía así? ¿Años? Se sentía una adolescente nuevamente.

Ambos salieron cuando estuvieron listos, ella optó por un vestido veraniego,ya que la noche estaba caliente. Comieron en un lugar que tenía vista a la ciudad, era de no creerse, en todos estos años nunca la habían invitado a un lugar así.

San podía observar como sus pupilas se dilataban con cada cosa que ella veía, parecía una niña pequeña y eso provocaba una ternura en el.

–Todo esto es asombroso.–Jihye comentó mientras cortaba su carne.–Gracias.–Una sonrisa sincera se extendió por los labios se ella que provocó que él sonriera también, marcando ese precioso hoyuelo.

–Podrás agradecerme luego.–Él murmuró en un tono sexy que hizo que Jihye se mueva en su asiento y tragara saliva. San lamió sus labios.–¿En qué pensabas?

–¿Huh?–Jihye quiso aparentar se que nada le sucedía pero tenía al mismísimo Dios griego en frente de ella, vestido con una camisa con los primeros botones abiertos, dejando a imaginación de todos de aquel torso tallado a mano.–No pensé en nada.

San fingió tirar su servilleta, no sin antes fijarse si alguien lo estaba observando. Su mesa no era tan grande así que al agachar a buscar su servilleta estiró su brazo para poder tocar la entrepierna se Jihye. Ésta pego un brinco en su lugar pero debía admitir que eso la calentó. O al menos más de lo que ya estaba.

San volvió a su postura dejando la servilleta en la mesa y lamiendo los dedos que habían tocado la braga mojada de la chica en frente de él. Jihye tragó saliva, este muchacho iba a acabar con ella... Y ella estaba dispuesta a todo por él.

Ambos terminaron de comer y él rápidamente habló.–¿Sabes? Volvamos a la cabaña. Me muero de ganas de escucharte gemir mi nombre una y otra vez.

Dicho y hecho ambos se dirigieron a la cabaña y directo a la habitación, apenas la puerta se cerró San atacó a Jihye tomándola del trasero acercándola a su cuerpo.
Ella se sentía tan vulnerable, como si fuera un ciervo contra un león. Presa versus depredador.

San levantó el vestido de ella hasta sacarlo por la cabeza, besó su mentón hasta llegar a sus hombros, corriendo con los dientes las tiras del brasier. Jihye enredó sus manos en los cabellos de él, insistiendo que siga besando su cuerpo.

Una nalgada sonora retumbó en la habitación, acompañada de un gemido por parte de Jihye. Rápidamente el rojo predominó en su rostro.

Ese era el sonido favorito de él. Volvió a repetir la acción y consiguió lo mismo. Perfección era la palabra que se le venía a la mente a San cuando la veía así. Ella no perdió tiempo y arrancó su camisa y desabrochó los pantalones. Unas caricias fueron otorgadas al miembro del chico que suspiraba y maldecia en voz baja.

–Si continúas así voy a terminar poniéndote en cuatro y hacerte mia hasta que explotes de placer.–Él sostenía el mentón de ella conectando la mirada de ambos, una media sonrisa apareció en el rostro de Jihye, cosa que solamente calentó más al muchacho.

Como dijo el muchacho, la hizo suya en aquella cama, la tuvo gritando una y otra vez su nombre pidiendo más, rogando por hacerla acabar. Él disfrutó a no más poder a su chica, la cual se sentía en el mismísimo cielo.

Luego de varias horas cayeron ambos rendidos, San se durmió primero lo que hizo que Jihye admirara más a fondo la belleza del chico a su lado. Una frase de una canción se le vino a la mente y sonrió mientras acariciaba la suave mejilla del dueño de sus sueños mojados.

“Dicen que todos los buenos chicos van al cielo, pero los chicos malos bajan el cielo para ti.”

👁️👄👁️

HOLIIIIIUUUU

PERDÓN POR NO ACTUALIZAR ANDO A MIL CON MUCHAS COSAS 😭😭😭😭

PERO LES DEJO UN CAPITULO DE LA HISTORIA DE SAN Y JIHYE ESPERO QUE LES GUSTE Y QUE LE DEN AMOR.

YA VOLVERÉ CON MÁS ♥️♥️♥️♥️♥️♥️

LES AMO

ADIÓS UWU