33. Cuando piensas que una cosa no puede pasar dos veces, pasa.

1 0 0
                                    

Escucho mi nombre varias veces, abro los ojos un poco aturdida, me encuentro atada a un radiador enfrente de Tatiana, miro mis manos aturdida, están atadas, me vienen deja vu, cole, Adrián, una cama, sangre, morados, yo tirada en el suelo, lagrimas, la bandeja de comida.

Intento no pensar y salirme de ese deja vu, no funciona, solo veo sangre, muerte, morados, dolor, las lagrimas se salen de mis ojos y recorren mis mejillas sin yo quererlo, esto no puede estar pasando otra vez, pero no puedo dejar que mi pasado nos afecte a mi y a Tatiana, abro los ojos y miro el lugar, veo un poco borroso pero algo veo, estamos atadas en un viejo radiador, intento sentir las armas de mi cintura pero no las siento, veo que por lo menos tengo los tacones, tengo dos cuchillos en el top.

-¿Han entrado?- le pregunto a Tatiana intentando concentrarse lo importante, hay una cama y una ventana vieja y tapada, hay rendijas por donde entra la luz, supongo que soy yo por la droga que me han metido la que se mueve ligeramente.

-No o por lo menos mientras que yo he estado despierta- dice con lagrimas.

-Tatiana escúchame- digo acercándome mas a ella, esta me mira con los ojos llenos de lagrimas, le estiro mi pie donde se que esta mi localizador- en mi tobillo tengo un localizador que lo controla Mark- le digo para tranquilizarla -cuando entre para ver si seguimos vivas nos aremos las dormidas y luego nos desataremos, no tardaran en venir a rescatarnos- digo para consolarla pero si soy sincera no tengo mucha fe, apollo la cabeza en el radiador para que se pase el efecto de la droga.

Pasa tiempo no se cuento pero se escucha una voz, cierro los ojos y me intento relajar, la puerta se abre, escucho pasos.

-Es raro que sigan dormidas, pero están son dos de las veinte que tenemos aquí- dice la voz de Cale, estoy deseando de meterle una bala entre las cejas, noto como me toca el pelo y me lo quita de la cara.

-Las dos se venderan muy bien- dice otro que no he escuchado nunca, estos cabrones cogen a chicas, las vende para que las prostituyan.

-¿Cuanto queda para llegar? quiero dormir- dice Cale, no, si vas a tener tiempo para descansar en el infierno hasta que yo valla, escucho a una chica gritar y eso hace que todo mi cuerpo se tense, me arrepiento al instante, no entiendo ¿que quiere decir con eso?¿nos estamos moviendo?.

-Dos horas y algo- dice el otro, parecen que no se han dado cuenta, la puerta se vuelve a cerrar, abro los ojos lentamente y miro discretamente, se han ido, me incorporo y con la cuchilla del anillo enpiezo a cortar la cuerda.

Tardo bastante en cortarla, pero cuando estoy libre con las muñecas rojas, cojo una cuchilla del top y le corto la cuerda a Tatiana, saco las dos pistolas de los tacones, le tiendo una, ella lo coge, intento sacar las dos armas de mi cintura pero no estan, maldigo mil veces por lo bajo, saco los cuatro cuchillos, las vuelvo a guardar, me levanto y miro por la ventana, esta tapada con madera pero puedo ver algo, veo otra habitacion como esta, pero con un pasillo de por medio , con un cuchullo retiro un trozo de madera y se lo tiendo a Tatiana.

-Bloquea la puerta- le digo, esta asiente y sigue ordenes, una vez que ella bloque la puerta yo salto por la ventana.

-No salgas de aqui- le digo y ella me mira entre asustada y confusa, no podia dejar que la pillen, me da igual que me peguen una paliza, pero a ella no -no me voy a ir de aqui sin ti, pero hay algo que no me cuadra- digo antes de que me diga algo, salgo de allí.

Avanzo por un pasillo que no suele ser de una casa normal, algo no me cuadra aqui, sigo avanzando y cuando veo una puerta al final pongo la oreja para pasar, pasa un rato y no escucho nada, la abro y las cosas me enpiezan a cuadrar, reaciono rapido al ver a un hombre con una MP5, le agarro del cuello durante treinta segundos y cae al suelo, le quito las armas y el cuerpo lo tiro al agua, a nadar, corro hasta llegar a la habiatcion donde esta Tati, le tiro la MP5.

-Vamos- le digo al principio se sobresalta pero luego lo hace, la ayudo a saltar por la ventana, cuando ya estamos fuera nos apegamos a los containers.

-Necesitamos encontrar un movil- dice Tatiana, y lleva toda la razon, avanzamos hasta llegar a popa, alli hay dos hombres fumando, le hago señales a Tatiana para que haga lo que yo digo, ella me entiende.

Hacemos ruido a lo lejos y nos ponemos detras de la puerta, esperamos a que los dos salgan, van armados como el otro hombre, le pegamos con el arma en la cabeza y estos caen al suelo haciendo muchismo ruido, me agobio por saber que le pueden hacer algo a Tatiana, les quitamos las armas, los tiramos al agua y entramos en la cabina, Tatiana intenta comunicarse por radio y yo busco los planos del barco, encuentro lo que quería.

-Nos vamos- le digo, salimos corriendo hasta donde yo creo que esta, una vez llegamos, efectivamente esta hay, con la maquina lo bajo al agua -salta- le digo ella no se mueve -venga Tatiana que no tardaran en venir- le digo nerviosa, escucho un disparo, por intuacion nos agachamos las dos, -salta de una puta vez- le chillo y con la MP5 empiezo a dispararles.

-No sin ti- dice muy seria disparando, joder que cabezona que es, pero me acuerdo de algo, me enpiezo a tocar los brazos y en la muñeca encuentro algo raro, saco un cuchillo y me hago una raja para sacar lo que tengo incrustado en la muñeca, el dolor que me causa hace que me de un escalofrio, es un localizador, me acerco a tatiana le hago lo mismo, ella se queja por el dolor pero luego se queda con el ceño fruncido, agarro su muñeca y la tiro para abajo ya que hay altura la dejo colgando para que se sujete a la escalera y aunque le cuesta hacerlo, al final lo hace, le tiro una de mis armas, me doy la vuelta y enpiezo a disparar, tengo bastante punteria, pero apenas tengo posibilidades de ganar, son muchisimos contra una, pero yo nunca tiro la toalla, veo como a lo lejos Tatiana va con su lancha, para que no la vean le disparo mas, me da igual gastar muchas balas.

-Sabia que no eras una chica cualquiera- dijo Cale por un megafono, apenas tengo balas, maldigo mil veces en mi interior.

-Pues yo siempre supe que eres un imbecil- dije sonriendo, me gusta vivir experiencias peligrosas y ir al limite, estoy detras de un contenedor.

Escucho algo detras de mi asi que me doy la vuelta pero el primer golpe en la cara llega rapido, hace que caiga, maldigo mil veces en mi interior, reaciono rapido pero cuando le apunto con la MP5, ya estoy en un coro de hombres apuntandome, las patadas enpiezan rapido, el dolor es bastante grande pero he sentido dolores peores, aunque en una de las patadas en la cabeza todo se vuelve negro y ya no siento nada.

La hija misteriosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora