3-Capítulo

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El comedor era increíblemente espacioso, con una mesa de caoba al centro, se respiraba orden y buen gusto, sin ser demasiado ostentoso. Sobre la mesa estaba dispuesto un desayuno tipo americano, demasiado apetitoso, compuesto por panes, mermeladas, huevos, jugo, fruta fresca y té con leche. Que logró que se le hiciera agua a la boca.

Poniendo un segundo servicio en la mesa estaba una mujer con algunas arrugas, que vestía un uniforme de servicio.

"Buen día" dijo Mo Lili

Como para probar si podía sentarse frente a la comida. La mujer la miró y pareció sorprendida, para luego mostrar una sonrisa llena de cariño

"Oh mí! Joven señorita no la escuché bajar. Ya va tarde, cada vez le cuesta más levantarse. He preparado todo lo que le gusta a la señorita, avíseme si necesita algo"

La mujer de sonrisa cálida parecía conocerla muy bien, y pareció un poco perpleja cuando Mo Lili le respondió un seco

"Gracias"

Mo Lili comenzó a comer con mucha hambre, realmente todo estaba delicioso. Nunca había tenido un desayuno tan bueno. Su desayuno habitual siempre eran solo unas gachas claras de avena con algunas verduras. Aunque la mujer la miraba un poco perdida, luego de unos momentos se retiró. Quizás a la cocina.

Cuando estaba por terminar se acercó una mujer hermosa de mediana edad, cabello castaño, con ojos parecidos a los de su reflejo en estos momentos. Usando un traje sastre bastante elegante color azul, con blusa blanca y collar de perlas. Caminaba con paso seguro haciendo un ligero ruido con sus tacones de aguja. Estaba ajustando una pulsera a su muñeca y distraídamente se sentó frente a Mo Lili 

"Hola cariño, ¿Qué tal dormiste?" dijo con una sonrisa y luego comenzó a comer su propio desayuno.

"A mí también se me ha hecho un poco tarde"  dijo con una sonrisa    "Tu padre salió esta mañana temprano, tenía que arreglar algunas cosas en la empresa. Pero me pidió recordarte que no olvidaras tu tarjeta escolar, acaba de recargarla"

Luego la mujer puso una tarjeta que parecía una identificación de estudiante sobre la mesa. 

"Gracias" respondió Mo Lili, tomó la tarjeta y la metió en su bolsillo. La mujer detuvo sus movimientos y la miró detenidamente durante unos momentos. Con voz preocupada dijo

"Yue-yue, ¿te sientes bien? Hoy estás muy seria. Y... ¿por qué estás comiendo de esa forma?"

Mo Lili, que estaba bebiendo el té con leche, al escuchar ese nombre comenzó a toser casi ahogándose con el líquido. La razón era que ese nombre lo había escuchado antes.

-Debo haber oído mal- "¿Cómo... me..... llamaste...?"  preguntó luchando por dejar de toser.

La mujer ya se había levantado y estaba dándole pequeños golpecitos en la espalda. 

"Yue-yue, como siempre, como te he llamado desde que eras un pequeño baozi"  dijo la mujer haciendo una expresión herida  "Cariño, sé que estás enojada por que no hemos accedido a subir tu asignación mensual, pero debes entender que no podemos cambiar todo tu guardarropa ahora que hemos tenido que hacer esta gran inversión. Sabes lo duro que hemos estado trabajando para tomar este proyecto, es la obra de toda una vida de tu padre y mía, incluso hemos tenido que vender varias propiedades para estar a la altura. Confío en que nuestra familia podrá ganar la licitación; y entonces te compensaremos ¿de acuerdo?"

"Qué? compensar?"  respondió Mo Lili con cara de interrogación 

"Me tengo que ir Yue-yue" dijo la mujer mirando a Mo Lili a la cara y luego su atuendo "Me alegro que hayas considerado lo que hablamos anoche sobre ir a clase con el uniforme y sin tanto maquillaje"

Quiero escapar del protagonista obsesivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora