Adictiva [Vegeta y Bulma] [DBZ]

•La despedida•

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Desperté aturdida, sintiéndome fatal. Todo a mi alrededor giraba y sentía el estómago a punto de volcar todo su contenido. Me levanté de la cama y cruce la puerta a toda prisa buscando llegar al baño, una vez que lo localicé corrí hacia él y por suerte llegue a vomitar adentro.

Me sentía morir, la cabeza me latía como si estuviera a punto de estallar y la luz tan blanca del baño me quemaba los ojos. Aún no reconocía dónde estaba.

- ¿Estás bien? - ví a Aidan cruzar la puerta y agacharse para quedar a mi altura. Lo observé confundida, no podía reconocer dónde estaba, ni recordar como había llegado aquí.

Volví a vomitar, me sentía fatal. Aidan se acercó y sobó mi espalda tratando de reconfortarme pero mi cuerpo empezaba a pasar factura de tanta porquería que le había metido.

Tenía escalofríos y estaba completamente helada, todo mi cuerpo temblaba y las pocas fuerzas que tenía a penas me ayudaban a seguir despierta.

- Tengo frío - le dije a Aidan tiritando

- Tranquila.. vamos, Te ayudo- me ayudó a levantarme y a llegar a la habitación, mientras íbamos por el pasillo reconci la casa y note que estaba vestida con un pijama de 18 y mi pelo aún se encontraba húmedo. No tengo idea de que pasó.

Aidan me acostó en la cama y luego se acostó conmigo tapandonos hasta arriba. Me abrazo pegandose a mi para pasar el frío. Yo por mi parte intentaba recordar que había pasado hasta que sin darme cuenta me quede dormida.

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Abrí los ojos con pesadez, la poca luz que se filtra por las cortinas es suficiente para lastimarme los ojos. Mire la habitación y poco a poco fui reconociendo el lugar, estoy en la habitación de Aidan.

Me incorpore en la cama sintiéndo un dolor punzante atravesarme la cien.
Me quedé sentada intentando recordar qué fue lo que pasó y de a poco recuerdos al azar e incompletos llegaban a mi mente.

Otra vez la había cagado, me siento fatal. Qué me hayan encontrado en ese estado me está matando por dentro. Tanto tiempo de aparentar tener todo superado para tirarlo por la borda por culpa de un estúpido impulso.

Es verdad que bien podría seguir mintiendo y fingiendo qué me metí de más sin medir las consecuencias, que todo esta bien, pero el mal momento ya se los hice pasar y eso es algo que no me lo puedo perdonar.

Escuché pasos fuera de la habitación acercándose a la puerta así que saque energías de donde no tenía para poner mi mejor cara de que todo está bien. Aunque por mucho esfuerzo que haga necesitaría más que eso para convencer a alguien.

Abrieron la puerta, Aidan entró y se sonrio al verme despierta.

- ¡hey! ¿qué tal estás? ¿Te sientes mejor?- Se acercó sentándose en la cama conmigo. Y esa mirada, mierda esa mirada me destrozó. Es la mirada de "aprovechar cada segundo" como si me pudiera morir en cualquier momento. La misma mirada que recibí cuando ellos se enteraron de mi intento de suicidio y me buscaron para saber cómo estaba y quedarse conmigo.

-Bien, mucho mejor.. aunque con una terrible resaca para no perder la costumbre jeje - bromee intentando quitarle seriedad al asunto

- Bulma, se que es muy pronto para hablar de lo que pasó, pero solo voy a pedirte una cosa.. que no finjas qué no pasó nada porque no voy a creerte. No hay forma que te metas esa cantidad por error. - me dijo tan serio que me devastó

- okey.. - baje la mirada. Ya no podía verle a los ojos - ¿qué hora es? -

-son casi las 6 de la tarde-