•Viejo tieso•

106 13 9
                                    

_____________________________________

                   •••Pov Bulma•••

Seguimos camino por otros treinta minutos hablando de temas random. No sé cuánto camino recorrimos pero se que falta mucho para llegar así que tengo Vegeta para rato.

A lo lejos en la carretera se pueden ver unas noches de lo que creo que podría ser la estación de servicio en la que frenamos con mis amigos de camino al festival. ¿Será que podremos frenar? De repente se me antojo comer algo dulce.

- Vegeta, ¿podemos frenar en la estación? Se me antoja algo - pedí suplicante juntando las manos esperando acceda y me cumpla el capricho.

- jajaja ¿que se te antoja? - río tranquilo.

- mmm no se, quisiera como algo salado.. o tal vez un poco de agua, quizá mejor algo dulce - respondí indecisa. - tal vez algo con chocolate, o unas papas.. a lo mejor un jugo, o simplemente un poco de agua.. tal vez una galleta? O mejor sería fantástico encontrar un rico vino.. en realidad quisiera una paleta, o un chicle.. ay no se, podría..-

- jajaja okey okey - me interrumpió - paramos - acepto y sonreí feliz.

Llegamos y estaciono el auto apagando el coche. Abrí la puerta para bajar y antes de que salga preguntó  -¿vas sola?- asintí bajando apurada, ya quería ver qué tenían en la estación para decir que me llevo.

- Ey Bulma - me llamo Vegeta y me detuve volviendo al auto y asomándome un poco a la ventana
- ¿tienes dinero?- pregunto y entonces recordé que de hecho no tenía ni un misero centavo.

- ah caray, no jajajaja - reí por lo tonta que soy, ¿Que pensaba comprar sin dinero?

- jaja ya, ten - saco unos billetes de su billetera y me los dió. Acepte feliz queriendo abrazarlo pero no entraría al auto de nuevo para eso.

- Eres el mejor Vegeta, ¡gracias! - agradecí con entusiasmo y volví a dirigirme dentro del local.

La estación se encuentra por completo vacía, ni un auto, ni un empleado, ni nadie más que yo comprando. Solo hay un señor del otro lado del mostrador leyendo una revista, seguramente es quien está ahí para atender  los clientes.

Al escucharme acercar a una góndola bajo la revista mirándome de arriba a abajo - Hola lindura - saludo baboso
- ¿que hace una belleza como tú deambulando por aquí tan solita? - le mire levantando una ceja, ¿Es idiota o no se da cuenta que hay un auto estacionado afuera? Resoplé asqueada mirándolo de mala manera por su forma tan asquerosa de verme.

Decidí ignorarlo y pasé por las góndolas hasta la heladera viendo que cosa se me podía antojar más. - ¿te puedo ayudar hermosa? - escuché al tipejo detrás de mi y conté hasta mil para no mandarlo al demonio - ¿eres sorda? ¿Porque no me respondes lindura? - continue haciendo un esfuerzo inhumano por ignorarlo escuchando sus pasos acercase a mi por la espalda - Linduraa- continuo llamándome intentando tomarme del brazo

- ya cállate de una vez viejo baboso, solo quiero comprar - le quite el brazo bruscamente y volví a girar mirando a la heladera.

- A mi no me hablas así niña tonta - protesto tomando nuevamente mi brazo brazo con molestia.

Hasta aquí llego mi paciencia, gire soltandome de su agarre y dándole un fuerte empujón haciéndole trastabillar y caer hacia atrás golpeando su cabeza con un escalón en desnivel detrás suyo.

El viejo quedó ahí tirado sin moverse, lo mire por un rato esperando que se levanté pero no lo hizo. Me acerque para verlo y estaba tieso en el suelo ¿Estará muerto?

Adictiva [Vegeta y Bulma] [DBZ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora